Fragile [Petekey]

20.

Michael salió de su casa y fue hacia la casa de Pete.

-Cariño abre la puerta soy yooo, Mikeey. -gritó Michael y tocó la puerta.

-Ya voy bebé. -dijo Pete y abrió la puerta.

Michael pasó y le dio un beso a Pete, fue a sentarse en el comedor y Pete le sirvió pollo con vegetales.

-Que rápido. -dijo Michael viendo el plato.

-Es que sólo a ti se te ocurre venir cuando ya estoy terminando de hacer la cena... aunque así mejor, no esperarías por la comida. -dijo Pete con su plato y sentándose a un lado de Michael.

-Ja, debería ser así siempre aunque... ¿Siempre haces la cena a las 6 de la tarde? -le respondió y empezó a comer.

-No, no tengo un horario exacto, sólo cocino cuando tengo hambre.

Estuvieron un rato en silencio comiendo hasta que entró Hemingway a la cocina y se quedó viendo el plato de Michael.

-Hola Heming, ¿Quieres pollo? Toma pollo -le hablaba Michael levantándose de su silla con un pedazo de pollo y llevándolo a su tazón.

-No le fueras dado pollo, ha comido mucho hoy e incluso se supone que haría bistec pero se lo comió él, puedo asegurar que ese perro come más que yo. -dijo Pete.

-E incluso más que yo, -dijo Michael viendo a Pete y le sonrió.- lleva poco tiempo aquí y ya lo veo un poco más grande que aquél día en que lo vimos.

-Eso es que le compré lo necesario a ese animalito, tiene que vivir de lo mejor. -decía Pete llevando su plato a la cocina.

-Oh bien, es bueno que te preocupes por Hemingway.

-Sí, como no preocuparme si es mi niño. -dijo Pete acercándose a Hemingway y acariciándolo.

-Oye, quería preguntarte acerca de algo...

-¿Sí? -dijo Pete viendo a Michael.

-Es sobre Meagan, Podrías... no lo sé, ¿Darme su número? Quiero hablar con ella. -preguntó Michael algo incómodo y Pete levantó una ceja.

-¿Hablar con ella? Mikey, creo que no sería lo mejor ya que ella sólo te diría locuras...

-Eso no importa, quiero hablar con ella y yo ya tengo claro que está un poquito mal de la cabeza pero no importa, pásame ya su número. -le decía Mikey sacando su teléfono.

-Como sea, dame aquí para anotártelo. -dijo Pete y agarró el teléfono de Michael.

-No te preocupes que sólo le preguntaré algo a ella y listo. -dijo Michael y Pete le devolvió el teléfono.

-Bien, confío en ti bebé. -dijo Pete y le desordenó el pelo a Michael.

-¡Hey, mi cabello! -se quejó Michael acomodándose el pelo.

-Me encanta tu pelo, es tan... lindo. -dijo Pete agarrando un mechón del pelo de Michael.

-Necesito cortarme el pelo, estos mechones de al frente me incomodan.

-Yo puedo cortarte el pelo... si deseas, -dijo Pete viendo con una sonrisa a Michael, mientras que él sólo lo veía.- espero que eso sea un sí, espérate un momento aquí, buscaré los utensilios.

-Y si me pintaras el pelo sería mucho mejor. -dijo Michael con una sonrisa y Pete se quedó parado viéndolo.

-Que maravilla, no tengo tinte pero podemos comprarlo... ¿Vamos o prefieres que sólo te corte el cabello? -preguntó Pete con las llaves de su auto en la mano.

-Vayamos. -dijo Michael y salió de la casa con Pete.

                      *** ***

-Y dime, ¿Qué color quieres para tu cabello? -preguntó Pete mientras encendía el auto y conducía.

-Pensé en color negro, y en cuanto al corte...

-¿Te parece si me encargo yo de eso? -preguntó Pete con una sonrisa.

-Oh pues... está bien, con tal de que yo pueda ver bien y que me vea bien. -decía Michael devolviéndole la sonrisa.

-Genial, yo la verdad pienso en cambiar algo de mi cabello pero a la vez pienso en que me veo muy bien, así que será luego.

-Digo lo mismo de ti, aunque no me molestaría que hicieras un cambio.

Llegaron al frente de un centro comercial y al momento de bajarse Michael le agarró la mano a Pete, comenzaron a caminar y habían cámaras por todas partes.

-¿Por qué no simplemente íbamos a una peluquería? -preguntó Michael en voz baja.

-Oh es que siéndote sincero, yo nunca he ido a alguna de por aquí y la única que he visto es una que está en este centro comercial.

-Pues mejor compramos el tinte y nos largamos, no quiero estar ahí adentro y que las cámaras empiecen a molestar.

-Sí así lo deseas.

Los chicos entraron a una peluquería y compraron el tinte, Michael veía las cámaras y pensaba:

"¿Ahora tendré que acostumbrarme a esta basura siempre que salga? Diablos, terminaré teniéndole una fobia a las cámaras".

Al momento de salir de ahí Michael empezó a caminar rápido con Pete hacia la salida y entró al auto.

-¿Por qué tanto apuro? -preguntó Pete montándose al auto.

-No quiero seguir viendo esas cámaras, me es muy incómodo tener muchas cámaras cerca. -le respondió.

-Bienvenido a mi mundo Mikey, tendrás que acostumbrarte a eso ahora que estás en una banda y que eres mi pareja, no podrás deshacerte de todos... sólo tienes que ignorarlos, sonríe y sigue tu camino. -dijo Pete viendo a Michael.

-Supongo que está bien, vayamos a tu casa.

                     *** ***

-Por fin hemos llegado. -decía Michael abriendo la puerta de la casa.

-Sí, por fin -dijo Pete cerrando la puerta y dejando el tinte en la mesa.- ahora si me permites, quiero que te vayas a sentar pues es hora de cambiar tu cabello.

-Con gusto me sentaré... -dijo Michael y se sentó en una de las sillas del comedor.- No me harás ninguna maldad en el pelo, ¿Verdad?

-Confía en mi, tu cabello va a verse muy bien, iré a buscar las cosas. -dijo Pete dirigiéndose hacia su baño.

Pete volvió a la sala con todas las cosas que le faltaban, luego de unos minutos de haber vertido el tinte él empezó a pintarle el pelo.

-Oye Mike.

-Dime.

-Mejor no te corto el pelo, con este color me recuerdas a tu hermano y pues así me gustas más. -dijo Pete sonriendo y Michael se quedó con cara de sorprendido.

-Eres un maldito estúpido, con razón Frank te odia. -dijo Michael y empezaron a reírse.

-Es broma, esa es otra razón por la cual te cortaré el pelo.