El SECRETO DE CAITLIN SNOW. (PAUSADA)

5

Barry.
Pregúntale vamos, mi mente me decía que no, y mi corazón que debía preguntarle pero no lo hice simplemente me quedé observando a Caitlin hasta que la mesera llegó con nuestras órdenes, le dimos las gracias y se retiró, me comí un poco rápido las hamburguesas pero nadie se dio cuenta, y sólo me quedaban más órdenes de papás fritas y la soda, cuando Caitlin apenas iba en su segundo mordisco.

— Vaya Barry vas muy rápido, deberías comer más lento — dice riendo. Y yo también lo hago.

— Lo se es que en verdad tenía hambre — digo apenado.

— Barry eh estado pensando mucho y creo que debería mudarme a... — ella se quedó callada. Siento como si se me atoraran las papas a la francesa, y después me las tragó.

— No Caitlin no te vayas a otra ciudad, no podremos hacer nada sin ti, te necesitó — digo con desespero. Me tranquilizó y la dejo hablar estaba llevando las cosas ya a otro nivel.

— Iba a decir que a otra colonia Barry, de hecho compré un departamento casi cerca de donde vives, es para estar más cerca de los laboratorios y era el más disponible de hecho creo que está dos pisos más arriba es en tú mismo edificio sólo que no sabía cómo te lo tomarías por que pues no se pensé que querrías tú privacidad cómo vecino. — dice para después darle mordidas a su hamburguesa que va a la mitad. Wow simplemente me quedo sorprendido, Caitlin vivirá a dos pisos arriba de mi eso es genial tendré a mi amiga más cerca, y no sé hasta podríamos hacernos más compañía mutuamente, digamos que no quiero estar sólo mientras Iris soluciona las cosas en su mente.

— Caitlin es una muy buena noticia y no me molesta en lo absoluto, al contrario podríamos frecuentarnos más  y eso me agrada sabes que eres mi amiga y me alegra mucho escuchar esa noticia — digo con una sonrisa radiante.

Mi estado de ánimo había cambiado de neutral a pura felicidad en algunos minutos.

— Gracias Barry en verdad te lo agradezco, eres un buen amigo y comprensivo también — dice sonriendo por fin acaba su hamburguesa. Y yo eh terminado de comer todo, no estoy completamente lleno pero estoy satisfecho.

— ¿Cuando piensas mudarte? — le pregunto con curiosidad.

— No lo sé, probablemente el miércoles — dice con un sonrisa.

— ¿Por que hasta ese día? — preguntó.

— Ese día me entregan las llaves — dice ella.

— Bueno considerando que hoy es domingo, por que no te ayudo con la mudanza ese día — le sugiero una idea. Ella sonríe.

— Claro pero no quiero ser una molestia debes tener cosas más importantes que hacer  Barry — dice encogiendose de hombros.

— No eres ninguna molestia Caitlin no pienses eso nunca, soy tu amigo y siempre podrás contar con ello — digo con un tono neutral.

— Bueno está bien supongo que me vendrían bien un par de manos extras — dice sonriendo. Yo asiento. Pasan unos minutos y ella no toca sus papás.

— ¿Te vas a comer eso? — preguntó señalando sus papás.

— La verdad que no, estoy llena con esa hamburguesa — dice con pena.

— Bien, ¿Te importa si me las como? — preguntó.

— No para nada, adelante — las pone frente a mi, yo las tomó y me las empiezo a comer de una por una pero se acaban rápido aunque me las haya comido con lentitud. Lo bueno dura poco bien dicen.

— Bien, iré a pagar ya regresó — digo parandome ella me asiente, y se queda en su lugar, miró la cuenta, sacó el dinero y se lo doy a la mesera, mientras le doy su propina aparte. Ella me sonríe.

— Gracias joven tenga buen día — me guiña el ojo. Me río, y camino hacia la mesa en donde estábamos. Caitlin se para y camina hacia mi, le abro la puerta para que salga del restaurante, y seguido de ella salgo yo detrás de ella. Ella saca las llaves de su bolsillo del pantalón y abre los seguros. Yo me incorporo en el asiento de copiloto, pongo mi cinturón y prendo la radio mientras Caitlin mantiene su mirada en la carretera.

[…]

— Son unos traicioneros — grita Cisco con drama.

— La próxima nos vamos a los tacos de Don Beto los que te gustan Cisco — digo apenado.

— Claro ya que les remuerde la conciencia de que no me llevaron a Big Belly Burguer — dice con un tono de voz con sarcasmo.

— Tú estabas con tú nueva novia — dice Caitlin.

— Basa chicos la próxima salimos todos lo siento Cisco — digo apenado.

— Era broma chico, me la pase super bien con Tess creo que estamos progresando quiere presentarme a sus padres — dice con emoción. Me siento alegre por la noticia, por que es mi mejor amigo lo abrazó y Caitlin después de mi.

— Felicidades — decimos Cait y yo al mismo tiempo.

— Dejen de hacer eso me asustan chicos — dice Cisco bromeando.

— Cisco quiero contarte algo — dice Caitlin, ella se va con el. Creo que se que le contará lo de que se mudara a mi edificio.

Mi teléfono suena, es Joe.

*Llamada*
JOE: ¿Bueno Barry?
BARRY: Hola Joe, como va todo por allá.
JOE: Bien, Barry en realidad hablaba para ver como estabas tú lamento que esto se dividirá en dos bandos no voy a elegir uno y perdón por haberme inclinado hacia Iris.
BARRY: Joe lo entiendo Iris si es tú hija ella lleva tú sangre, en cambio yo no.
JOE: Barry también eres mi hijo no lo veas de ese modo.
BARRY: Adiós Joe tengo que colgar.

*Fin de llamada*

Suspire mientras guarde mi teléfono. Caitlin y Cisco venían hacia mi bromeando, tal vez la llamada me había dejado abrumado por que ambos me miraron con asombró y miedo.

— ¿Tengo algo en la cara o que chicos? — pregunté con un tono molesto.

— Barry estas pálido — habló Caitlin. Al pronunciar Cait esas palabras sentí como si mi mundo girará, dio vueltas, y sentí como caía al piso, todo se volvió negro, escuché las voces de Cisco y Caitlin a lo lejos, cada vez más.

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¿Que rayos tiene Barry? D:

Dejen sus teorías, gracias por leerme esta madrugada tengan buen día los quiero <3

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