Capitulo 11: Solo son sueños

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– ¡Cine! ¡Cine! – Repetía la mayor.

– ¡Palomitas! ¡Palomitas! –Repetía la menor.

Las dos estaban ansiosas pues milagrosamente sus padres la llevarían a un lugar para "Convivir en familia".

– ¿Que película quieren ver? – Preguntó su padre quien iba manejando.

– ¡Una de terror! – Dijeron al unísono.

– De terror será –Su madre sonreía divertida.

Al llegar al cine las gemelas iban emocionadas pues no era recurrente que visiten ese lugar.

– ¿Que les parece si ustedes piden los boletos? – Dijo su padre.

– ¡Vamos! – Dijo la de pelo corto feliz.

Las dos pequeñas albinas fueron a la taquilla, sus padres rieron pues ninguna de las dos alcanzaba. Cada uno cargo a una gemela.

– ¿Me puede dar dos boletos por favor? – Preguntó con voz dulce la de pelo largo.

– Son cuatro – Dijo la de pelo corto.

– ¡Eran dos!

– ¡Eran cuatro!

El de la taquilla río por tan tierna pelea.

– Son cuatro – Dijo su madre.

– ¡Ja! ¡Te dije! – Sonrió victoriosa.

– Aquí tienen, disfrute la película con sus hijos – Dijo el joven de la taquilla.

– ¿Hijos? – Preguntó enojado su padre.

– Amor, no empieces

– No me iré de aquí sin que quede claro – Este dirigió su mirada amenazante al vendedor – Si usted no esta ciego vera que tengo a dos lindas niñas, no son ellos, son ellas – Su voz se oía con enojo.

– L-Lo siento señor, no me fije en... – El chico fue interrumpido.

–Pues para la próxima fijese bien – Este tomo las entradas enojado y se retiró.

– No era necesario que hicieras eso

– Sabes perfectamente que me molesta que le digan niño, yo no se porque no le pones aretes a esa niña, o una diadema para que la distingan

La pequeña albina tenia la mirada perdida en el suelo, siempre que salían pasaba el mismo problema, el día se arruinaba sólo por ella.

– ¡Entonces ella no es mi hija! – Grito su padre.

Este se acerco a la de pelo corto y la tomo del brazo asustando a esta.

– P-Papá que haces – Dijo asustada.

– Te voy a enseñar a ser una niña

(...)

– ¡AAAH! – La de pelo corto se levanto sudando, miro a su alrededor, todas ya estaban dormidas.

– Solo fue un sueño – Dijo con la respiración agitada.

– P-Puppet – La voz de la rubia sonaba en todo el lugar.

– ¿Chica? – Esta miro por todos lados, ahora se encontraba sola en la habitación – Que demonios

– Puppet – La rubia apareció en frente de la albina.

– ¿Donde están las demás?

Sin esperarlo recibió una gran cachetada de parte de la otra.

– Nunca lo creí de ti – La rubia derramaba algunas lágrimas.

Mi mejor error  [Puppica]  ~Terminada~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora