¿Hasta que la muerte nos separe?「CB」

D O S

ChanYeol se miró una vez más en el espejo de cuerpo completo y le sonrió ampliamente a su reflejo para después acomodarse el cabello peinado hacia atrás con copete desvanecido.

El gran día había llegado y por más feliz que estuviera con ello, también se encontraba bastante nervioso y detestaba sentirse de esa manera porque entonces su torpeza aumentaba. En tan sólo ese rato ya se había tropezado con todo y caído dos veces además de tirar un jarrón al suelo, haber perdido momentáneamente la corbata del traje—la cual tenía en la mano—y haber batallado en abrochar los botones de la camisa y el saco del traje.

Alguien tocó la puerta y al segundo instante la abrió, ChanYeol se giró y recibió a su madre con la misma sonrisa nerviosa. La mujer que portaba un precioso vestido lila de noche hasta los tobillos se metió a la habitación cerrando la puerta y caminando después hasta su hijo para mirarlo de pies a cabeza apreciándolo y tras eso tomar la corbata para deshacer el nudo y rehacerlo de forma correcta.

— ¿Qué tal estas?

—Nervioso. Muy nervioso. —La mujer sonrió de manera tranquila.

—Todavía estás a tiempo de cancelar todo.

—Mamá. —le reprochó frunciendo su ceño y la mujer suspiró.

— ¿Todavía estás seguro de esto?

—Por supuesto —Ella se alejó un paso de él y le miró a los ojos.

—Ay ChanYeol, ¿dime por qué a él? Tenía mejores opciones para ti y... sé que hay alguien mucho mejor allá afuera así que ¿por qué lo elegiste a él?

—Porque lo amo —respondió sin dudar con una leve sonrisa ladina, la mujer negó.

—Espero que ese amor que tú sientes baste para ambos porque ese chico-...

—BaekHyun no es malo, mamá. No comprendo porque sigue sin gustarte y sé que no es debido a que es un chico ya que tú no tienes problema con mis preferencias.

—El amor te vuelve ciego... y sordo cariño —acarició su mejilla y ChanYeol negó de buen humor.

—Con el tiempo lo conocerás mejor y te agradará, ya verás.

—Exacta, con el tiempo lo conocerás mejor y... espero que sigas pensando de la misma manera que hoy porque aunque ahorita todavía veas todo color de rosa, tarde o temprano te percataras de que no es así.

La puerta volvió a abrirse antes de que ChanYeol respondiera y esta vez su abuela y su hermana entraron a la habitación con sus esplendidas sonrisas en la cara, animando aún más a ChanYeol.

—Ya debes ir al altar, BaekHyun está por salir de su habitación. —Los nervios volvieron de un sopetón multiplicados por cien a él.

—Oh Dios, espero no estropearlo.

—Yo también lo espero —dijo la abuela —Porque todo allá afuera está perfecto como para que sea estropeado —el menor hizo una mueca.

—Eso no ayuda en nada, abuela —la mujer de mayor edad sonrió y caminó hasta él para pararse de puntitas y pellizcar las mejillas de su nieto.

—Sólo bromeaba, todo saldrá bien, ya lo verás. —ChanYeol asintió y se giró a ver a su hermana.

— ¿Y BaekHyun? ¿Cómo luce? —YooRa sonrió.

— ¡Te iras de espaldas en cuanto lo veas! —ChanYeol se movió de forma inquietante, girándose para mirar su reflejo de nuevo y asegurarse de que luciera bien.