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-¿Entonces qué se supone que debes hacer? No lo entiendo-Dice frustrada. Ruedo los ojos y tiro mi cabeza para atrás.

Mila se levanta del sofá y sigo su trasero con mi mirada, viendo como la tela azul se ajusta perfectamente a sus delgadas piernas. Le doy una nalgada, pero ella ríe y continúa su recorrido hacia la cocina como si nada.

-Ese odioso castaño dijo algo sobre una prueba de tres meses y que su secretaria llamaría y aún no lo hizo-Vuelvo a resumirle el por que de mi frustración. Miro la tela negra del sofá y la golpeteo suavemente con mis dedos comenzando a pensar que a éste lugar le hace falta un poco de vida-¿Tú crees que le haga falta un poco de color a éste apartamento?

Mila regresa sosteniendo una cerveza, la cual deja sobre la mesa ratona y se sienta sobre mi.

-No lo sé cariño, es tu estilo-Responde dándome un pequeño beso en los labios. Sus ojos verdes con matices oscuros alrededor de sus pupilas me invitaban a seguir, y al darme cuenta de lo largas que eran sus pestañas, hice un puchero. Desearía tener pestañas tan largas y voluptuosas como las de ella.

Mila era una persona muy importante para mí. Cuando entré a la universidad, estaba sola y ni siquiera estaba segura sobre la carrera que había optado seguir. Mis amigas se habían ido y ya no contaba con la opinión sincera de nadie, pero entonces ella apareció, con sus muchas locuras y su encantadora personalidad, y poco a poco fue haciéndose más cercana a mi.

Comenzó a besarme y la sostuve de la cintura, pero antes de que algo más pasara, la melodía que emanaba mi teléfono se hizo presente y, viendo como la rubia soltaba un gruñido, me separé de ella.

-¿Hola?

-¿Irina Black? El señor Hardfor solicitó que le explique lo que tendrá que hacer en los tres meses de prueba-Escucho la chillona voz de la secretaria que estaba en recepción hoy-Durante el transcurso de tres meses, usted deberá mostrarle su potencial a su supervisor, el señor Hardfor. Lo acompañará a eventos, quizá tenga que pasar por varias pruebas de creatividad... Son simples pruebas para probar si usted tiene el potencial para éste trabajo. Aquí nos encargamos de mostrar y promocionar el arte en diferentes aspectos, mostrarle a las personas la belleza de las cosas. Representamos a muchos artistas prestigiosos y tenemos en nuestro poder muchísimas galerías de arte alrededor del mundo. Su supervisor se encargará de darle el puesto correcto en ésta empresa. Nosotros aquí no sólo nos encargamos de hacer piezas de arte con un lienzo y una hoja en blanco, señorita Irina...

Continúa hablando la mujer. Imagino que si esto debe decirle a todos los que llegan a hacer la prueba, ha de ser muy cansador su trabajo.

El señor Hardfor...

Hardfor...

Estaba muy segura de haber escuchado ese apellido en algún lado, y si bien no recordaba donde, a mis oídos se le hacen sumamente conocidos ese conjunto de letras.

-Disculpe, ¿Cómo es el nombre completo del señor Hardfor?-Le pregunto a la mujer, cortando su aburrido discurso que había dejado de escuchar hacía ya varios minutos.

Se escucha como suspira, volviendo a llenar sus pulmones de aire. Con un discurso tan largo cómo ese, de seguro que la pobre chica necesita un pulmón nuevo.

-Dylan Hardfor-Responde ésta-Oh, y recuerde llevar varios de sus bosquejos y pinturas para que el señor Hardfor las vea. Es de suma importancia que él vea su potencial desde el principio. Necesita saber algo m...?-No la dejo terminar, y soltando un "¡No, adiós! ¡Gracias!" termino la llamada.

Dylan Hardfor, el chico del que no supe nada luego de que él recobrara la memoria y me dijera que sentía mucho el haberme dicho y hecho cosas horribles. El mismo chico que me gustaba en la secundaria, el mejor amigo de mis hermanos, ese chico que ayudó a que todo el desastre de mi vida comenzara, con el que casi me acuesto y me rechazó, ese que dijo que yo era una fácil...

-Ey... Oye... ¿Irina, estás ahí? ¿Cariño? ¿Qué pasó?-Mila sostenía mi cara mientras me miraba a los ojos con ambas cejas arqueadas hacia arriba, esperado a que responda. Me deshago suavemente de su agarre y la miro impresionada.

-Dylan Hardfor es mi supervisor-Balbucéo-El imbécil dijo que no me conocía. Sabía que lo había visto en algún lado, ¿Quién más iba a ser? Por supuesto que sí, cómo no... ¡Tengo la mejor suerte del mundo! ¡Pero claro que ese idiota me conoce!-Comienzo a gritar, pasando del balbuceo tranquilo a las quejas con sarcasmo.

-Irina, ya debo irme. Luego me explicas, llego tarde. ¡Adiós, cariño!-Se despide Mila corriendo hacia la puerta y sale por ésta.

Mañana comenzaba mi prueba en la compañía, y no perdería la oportunidad para encarar a Dylan.

¿Acaso él no pensaba decirme?

Veo al gato de Boris, mi vecino, asomarse por mi ventana. Ese gato escurridizo color negro con una manchita en la punta de la nariz es ciertamente adorable, y aunque los gatos no son de mi mayor agrado, éste gato me gusta.

-Hola Carlos, ¿Cómo está mi minino favorito?-Le pregunto como si me fuera a responder y sacudo mi cabeza en cuanto me percato de que sería idiota si pensara que el gato me contestará, algo como: 'Ah, hola Irina. No pues muy bien por aquí. Hoy en la mañana atrapé un ratón muy sabroso y quería pasar a contártelo'.

Y sí. El gato se llama Carlos

Me dirijo a la cocina y saco un plato hondo, lo lleno de leche, vuelvo a la sala y, llamando al minino, dejo el plato a un lado del piso.

-Ven Car... ¿Carlos? ¡Carlos, no!-Grito corriendo hacia él-¡Deja eso, gato infeliz!

Lo insulto mientras lo quito de arriba de mi pintura, pero el maldito felino me rasguña y se escapa de mis brazos, corriendo por mi apartamento y dejando huellas anaranjadas marcadas por todo el piso. ¡Esa pintura me había costado horas de trabajo!

Voy detrás del gato y lo busco por todo mi apartamento, lo cual no se me hace difícil, pues sigo el camino de manchas naranjas con forma de patitas por todo el piso, hasta que finalmente el rastro termina debajo de mi cama, donde los ojos azul claro del felino podían verse desde un pequeño hueco que separaba la cama del piso.

Camino con cuidado, asegurándome de que Carlos no escape, y cuando estoy lo suficientemente cerca intento saltar hacia él, pero de pronto mi pié se engancha a las sabanas que están desparramadas en mi cama y el piso, haciendo que caiga y estampe mi cara con el piso de madera.

Auch

Definitivamente, odio los gatos.


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Hola muñecos, brave_lion aquí reportándose, ¿Cómo va todo? ¡Los extrañé demasiado!

¿Les gustó el comienzo del segundo libro? Prometo que les encantará, Irina vuelve con todo y nuevos problemas que deberá enfrentar se interpondrán en su camino.

¿Qué me dicen de la portada? ¿Les agrada?

Seguramente a muchos les habrá llamado la atención la aparición de Mila, una nueva e importante integrante en la historia de Irina... Sorpresa sorpresa, amigos míos.

Preparense, porque volví, amores, y con muchas ideas para hacerlos sufrir de ansiedad con ésta nueva aventura de Irina y su vida.

Los adoro, recuerden eso 😂❤. Pasense a saludar en los comentarios ;) estaré respondiéndoles hoy.
¡Hasta el próximo capítulo!

brave_lion, fuera.

Proyecto RepeticiónWhere stories live. Discover now