PARTE 3

2.2K 146 26
                                    

N/A: Título sacado de: "From the Dining Table" - Harry Styles.

---------------------------------

PARTE 3: EVEN MY PHONE MISSES YOUR CALLS, BY THE WAY

Una semana.

Una semana desde fin de año. Una semana desde Chloe.

Una semana en la que ya has roto incontables veces tu propósito de seguir adelante y olvidarte de la pelirroja que conociste en un ascensor.

Una semana que ha ido exactamente como predijiste, mirando el móvil constantemente solo para sentir decepción cuando se ilumina tu pantalla vacía y te recuerda que Chloe no tiene intención alguna de contactar contigo.

Una semana con ojos azules y ondas cobrizas que plagan tu mente en cuanto tienes un momento de paz. En cuanto bajas la guardia un segundo. Y que, por más que intentas empujar su recuerdo lejos de ti, es como un puto boomerang, porque no importa cómo de lejos lo lances ni hacia dónde, que va a encontrar el camino de vuelta a ti y golpearte igual que una patada en pleno pecho.

Tratas de mantenerte lo más ocupada posible, de no darte ni un solo minuto de respiro para no tener tiempo para pensar. Ayuda bastante el hecho de que, con el año nuevo, todos los artistas parezcan haber encontrado inspiración divina y estén solicitando productores para grabar sus nuevas canciones.

Tus días empiezan a las ocho de la mañana y nunca se sabe exactamente cuándo van a terminar.

Te pasas la mayor parte del día corriendo de un lado para otro, a donde los caprichos de tu jefe te manden; y encerrada en diferentes estudios de grabación, discutiendo técnicas musicales, ritmos, letras y notas con cantantes que creen tener algo nuevo y diferente, pero que en realidad solo están haciendo más de lo mismo.

O quizá sea que tú estás más cínica de lo normal.

El hecho es que, cuando llegas a casa, a veces a las dos, tres de la noche, solo te recibe un apartamento vacío y la silenciosa presencia de Sombra mirándote fijamente desde el escondite que haya escogido ese día para que no le devuelvas a la señora Robinson.

Y, aunque estás agotada, no puedes evitar ver el fantasma de Chloe parada en medio de tu salón en ese precioso vestido negro diciéndote que le gusta que estés llena de misterios. O su esbelto cuerpo en solo ropa interior recorriendo tu habitación con notable curiosidad y admirando tu póster firmado de David Guetta.

Se niega a ser borrada, a ser olvidada. Es como si fuera un poltergeist que viene a atormentarte.

Así que, cuando se cumple la semana y llega el sábado, y ya no te puedes refugiar en el trabajo, decides poner toda la casa patas arriba para limpiarla. Subes todas las cosas del suelo a un lugar alto, te pones la música a todo trapo a pesar de que sabes que tus vecinos luego se quejarán cuando inevitablemente coincidas con alguno en el ascensor, y limpias el polvo, el baño, pasas la aspiradora y friegas los suelos.

Nunca pensaste que fueras una de esas personas que descarga sus frustraciones limpiando, pero ahí estás. Con la aspiradora en la mano, arrodillada en el suelo frente a tu cama y sintiendo una extraña satisfacción cuando ves las pequeñas pelusas incapaces de resistir la corriente y desaparecer por el agujero del cepillo.

Ojalá pudieras hacer lo mismo con tu cabeza.

Ojalá pudieras ser como Dumbledore y tener un Pensadero al que echar todas aquellas cosas que no te dejan en paz y a las que no quieres dar más vueltas.

Pero, siendo las cosas como son, solo puedes pasar la aspiradora y conformarte con imaginarte que esas pequeñas pelusas de polvo son tus pensamientos, tus recuerdos.

SerendipityWhere stories live. Discover now