Capítulo 19

3.3K 292 242
                                    



Mi primer pensamiento al despertar la primera mañana de las vacaciones de navidad fue ¿Por qué le dije a Scorpius que solo quería ser su amigo? ¿Por qué soy así? No quiero que seamos amigos pero al mismo tiempo me es imposible pensar en no serlo. Al decir amistad vienen a mi mente mi padre y mis tíos Ron y Hermione, yo no quiero que Scorpius y yo terminemos así, nada me molesta más que pensar en Scorpius casado y con hijos. 

El día transcurrió con normalidad, James y Lily gritaban, molestaba, lanzaban cosas y eso que hacen siempre. Mamá me pregunto cómo iba todo en la escuela y dijo que mi padre quería hablar conmigo por mis calificaciones, cosa que sabía que terminaría pasando y que no podría aplazar más. Estuve desde la mañana sentado en el piso de mi habitación acomodando mis ingredientes de pociones, que estaban una caja con un hechizo expansor que Scorpius había visto, me preocupaba un poco el hecho de que pudiera haber notado algo raro pero no me dijo nada.

--Albus ¿Cómo te va?

James entró a mi cuarto si tocar la puerta porque le encanta invadir la privacidad de todos, especialmente la mía.

--!Deja de entrar a mi habitación así! !¿qué tal si estoy haciendo algo y entras de repente?!

--La única cosa "rara" que podrías estar haciendo también la hago yo y todos los hombres así que no seas tan sensible.

Estaba comiendo una manzana y sin pedir permiso ni nada, fue y se acostó en mi cama. Se veía muy feliz, como siempre solo que un poco nervioso, con curiosidad, no pude interpretar su expresión.

--¿Qué se traen tú y Malfoy?

--Nada... ¿Por qué lo dices...?

--Porque lo vi metiéndote la lengua hasta la garganta en el cuarto baño de prefectos.

Volteé a ver a mi hermano con todo el odio que fui capaz de lanzar con la mirada y él se rió.

--Scorpius y yo no tenemos nada "romántico" si a eso te refieres.

--Entonces lo suyo es como más ¿sexual?

--!No! --le lance ropa sucia que había dejado ayer tirada en el piso-- si viniste a hacerme preguntas extrañas será mejor que te vayas.

James se siguió riendo, bajo de la cama y sentó conmigo en el piso.

--Te pones muy sensible cuando hablamos de Scorpius ¿en serio te gusta verdad? --no respondí-- tú también le gustas a él. Es guapo, supongo...

--!James!

--¿Quieres hacer una apuesta?

Su mirada cambió, ahora me veía como siempre que está a punto de hacer llover chispas o explotar algo.

--No

--Si el regalo de navidad que te voy a dar yo es mejor que el que tú vas a darme no le dirás a mamá que no volveré a casa después de terminar el año escolar.

--¿Qué?

--Tampoco puedes decirle donde estoy y debes ser cuidadoso con las cartas porque solo te voy a escribir a ti.

--Pero James yo no...

Mi hermano movió la cabeza de un lado a otro diciendo que no y deje de hablar, no sabía que estaba pasando y no sabía en que se había metido pero terminé aceptando la apuesta sin saber muy bien por qué.

--Mi regalo ya no debe tardar y si no te gusta te golpearé.

Me reí, James también se rió y salió de la habitación. Me daba bastante igual todo el asunto con mis padres, si mi hermano "desaparecía" mi padre se pondría un poco mal pero en realidad no me parecía tan problemático. Como sea James tendrá que darme algo muy bueno porque le compré un kit de cuidado de escobas que mi madre dice que es lo mejor que ha salido a la venta en muchos años...

Unos minutos después de tener aquella conversación fui a mi cama y me dormí esperando que alguien me despertará a la hora de cenar, pero cuando desperté todo estaba oscuro, nadie me despertó, era más de media noche y había dormido unas 5 horas o eso pensé...

--¿Albus?

Scorpius estaba en mi cama sentado al lado de mí.

--James me dijo que podía quedarme aquí.

Yo seguía acostado, podría sentir a mi amigo al lado de mi pero todo me parecía muy confuso ¿Qué demonios hacía Scorpius en mi casa? Estaba soñando.

--¿Albus estas despierto?

Estaba con los ojos abiertos viendo hacia arriba y Scorpius puso su mano sobre mi pecho, se acostó al lado de mí y su mano se quedó ahí.

--Si no quieres hablarme está bien, no me voy a ir.

Me di la vuelta para quedar frente a él, no podía verlo pero sabía que era él y lo besé, quería quedarme así para siempre.

--Te quiero, siempre te he querido.

Lo besé, besé a Scorpius hasta hartarme, lo necesitaba conmigo más que a nada y el que él pareciera sentirse igual que yo me hacía sentir que era dueño del mundo...

A la mañana siguiente desperté, abrí los ojos mirando al lado izquierdo de mi habitación, aún tenía puesto el pantalón del día anterior pero no tenía camisa, no recordaba habérmela quitado. Recordé el sueño que tuve, Scorpius y yo besándonos en la oscuridad, entonces me di la vuelta esperando verlo ahí, como si dentro de mi hubiera una chispa de esperanza de que mi sueño hubiera sido algo real, pero él no estaba ahí.

Me levanté y me enojé mucho conmigo mismo por seguir imaginando cosas raras con mi mejor amigo, demonios ¿Cómo pude soñar que Scorpius y yo nos besábamos en mi cama?, eso es desagradable y demasiado... No, ni siquiera voy a pensarlo...

Fui por papel y me dispuse a escribirle a Scorpius como me sentía y como debíamos seguir con la situación, nada más empezar a escribir me sentí como una niña estúpida escribiéndole a su novio o lo que sea...

Scorpius:

Antes que nada quiero decirte que eres mi mejor amigo y lamento mucho haberte puesto en esta situación tan incómoda. No tienes que fingir que me quieres para hacerme sentir bien, a ti te gusta Rose (o te gustaba) y por lo tanto las mujeres y yo no soy eso así que no es necesario que tú y yo ya sabes...

No voy a negar que te quiero y que he pensado en ti de todas las formas posibles, pero no debemos arruinar lo que tenemos, quiero que seas mi amigo para siempre, quiero tenerte conmigo hasta el final, no me importa como si me dejas estar a tu lado.

Demonios esto suena muy cursi, pero no es así, Scorpius somos amigos ¿sí? Amigos de verdad, hoy y por siempre.

Atentamente:

Albus

Puse la carta en el buró sin haber decidido si la quería enviar o no, después baje las escaleras con mucha hambre por no comer el día anterior y grite:

--!¿POR QUÉ NADIE ME DESPERTO AYER?!

Entonces vi a Scorpius Malfoy sentado, desayunando con mis hermanos en la mesa de la coc

Albus y Scorpius Where stories live. Discover now