Parte 11

394 44 7
                                    

Holi!! Sígueme en Facebook: Wolfmik01

:D

*****

Las horas pasaron lentas, no veían la hora en que el sol comenzara a salir apenas el sol saliera comenzarían a armar su plan. Su segunda noche en aquel extraño mundo fue para su sorpresa mejor que la primera, se sintieron seguros, sin necesidad de permanecer alerta.

Marinette fue la primera en despertarse había recuperado sus fuerzas casi por completo, Adrien dormía pesadamente al otro lado de aquella habitación.

-Oh que bueno que despiertas ¿Podrías ayudarme?- pidió Plagg, el pequeño kwami se encontraba bien sujetado por Adrien.

-Te lo mereces por manipular a tu portador, Plagg eso está prohibido.- le regaño Tikki, Marinette hizo caso omiso a sus comentarios, se acercó ligeramente a Adrien quedando tras de él e inclinándose un poco, los kwami solo le observaron.

-Adrien...-le llamo dulcemente.- Adrien me escuchas.

-Mmmm.- Adrien se movió un poco cosa que la azabache tomo como un sí.

-Adrien abre to mano por favor.- pidió de la misma forma, el rubio frunció el ceño entre sueños apretando más su mano, Plagg pareció contener la respiración.

-N-no funciona.- dijo el kwami de manera forzada.

-Adrien, por favor mi pequeño minino abre tu garrita.- esta vez Marinette le mimaba tras el oído, Adrien sonreía que por fin termino por ceder, al abrir su mano, Plagg salió rápidamente antes de ser tomado por sorpresa nuevamente.

Después de que Marinette parara sus mimos se aseguró que él siguiera dormido.

-Oh te amo más que la primera vez que me alimentaste- Plagg por su parte se abrazó a Marinette.

-Deberías de dejar de gastarle estas bromas a Adrien, él es muy bueno.- dijo Marinette, Plagg le miro directo a los ojos para después negar con su cabeza.

-Si tú lo dices, sin mí su vida sería demasiado aburrida.

-¿Qué piensas ahora Marinette?- le pregunto Tikki. A pesar de haber tenido una buena noche, su cabeza no dejaba de hacerse la misma pregunta.

- Lo siento, sigo intrigada por los padres de la Marinette de este mundo.

-¿Confías en lo que Alya te dijo?

-Sí, pero...

-Solo confía, veras que todo pasara a ser un amargo recuerdo.

Desde el día anterior que las horas comenzaron a ser todo un infierno, todos tenían miedo de salir de sus "celdas" Marinette y Adrien no estaban en su mejor humor y el simple hecho de tenerles cerca era solo para implorar por sus vidas.

Alya en su único lugar de resguardo se encargaba de curar las heridas de Nino y Nathaniel, los pobres habían logrado salir con vida de ese lugar y solo de milagro.

-¿Es muy grabe?- pregunto el pelirrojo, Chloe le miraba con pena mientras terminaba de vendar su mano.

-Vas a necesitar puntadas, no soy médico pero puedo asegurarte esta es una quemadura grabe.- le dijo. Nathaniel torció los labios, le dolía hasta el alma, sabía que Adrien su amo, era mucho más despiadado que Marinette, y ni siquiera ella se había salvado de su ira incontenible.

-¡¿Por qué hicieron semejante locura?!- regaño Alya mientras terminaba de vendarle la cabeza a Nino.- Adrien pudo haberlos matado.

-Culpa nuestra no fue y lo sabes Alya.- respondió Nino, la morena había apretado las vendas con fuerza a propósito.- fuimos los encargado de esa vez resguardar las entradas.

Los amos del malOù les histoires vivent. Découvrez maintenant