Metidos en un lío. No es bueno dejar a los mellizos solos.

Plan de grupo, y una madre preocupada.

<Narra Dylan>

Desde el pequeño incidente nocturno en el supermercado, aprendimos lo siguiente, jamás ir a un supermercado por la tarde, y a evitar ir a ese supermercado en los próximos ochenta o noventa años.

Me estiré, y mi mente fue ocupada por una sola cosa, la fiesta de Dake es mañana, y no estoy de coña, espero ver la casa con cuatro paredes, el lado bueno es que puedo estar con los chicos y hacer una game pijamada, lo bueno de tener mi cueva friki es que pase lo que pase, allá arriba no se escucha nada, es lo mejor, además es grande y espaciosa, por lo tanto cabemos los seis, es más caben unas quince o veinte personas y aún sobra espacio.

Me levanté al baño, antes de que el intento fallido de bella durmiente despertara, entré hice mis necesidades, me arreglé y salí, fui a mi cuarto a vestirme, tomé el buzo del colegio, y mi gorrita que tenía el logo del "New for speed the most wanted", amo con mi vida ese juego. Salí de mi cuarto y bajé a intentar hacer el desayuno, pero me encontré con la "princesita" de la casa.

-Dake, despierto tan temprano ¡FIN DEL MUNDO! ¡VA A LLOVER! ¿Qué hiciste?- me puse al lado de mi hermano para ver que hacía.

-No es el fin del mundo, el día lo pronosticaron soleado, y no hice nada, salvo el desayuno, pero no te daré nada, por hacerme burla hermanita- me miró, y yo achiné los ojos.

-Recuerda, que mamá aún no sabe lo del florero, y que tengo una sartén- Dake rodó los ojos y sirvió los panqueques con miel, nos sentamos a desayunar, mientras veíamos tele, aparentemente una mañana tranquila, raro pero cierto, Dake fue a dejar los platos a la cocina, y yo me quedé viendo tele.

-Me baño, me visto y nos vamos- asentí, lo sentía subir las escaleras al segundo piso, y desde arriba me gritó- ¡LAVA LOS PLATOS VAGA!- me paré, e iba a contestar pero se me ocurrió algo mejor... Fui a la cocina, y lavé los platos, luego fui a la parte donde estaba el calefont, y lo apagué... Dake gritando en...3...2...1

-¡AH! ¡DYL ¿QUE VERGAS PASA CON EL CALEFONT?! ¡MORIRÉ DE HIPOTERMIA!- mi pequeña venganza, era por la fiesta, porque adivinen quién estará después de nana, recogiendo mientras, un homúnculo estará con resaca en la cama, así es... yo.

-¡NO SÉ ESTÁ ENCENDIDO, PERO APURA SINO LLEGAMOS TARDE!- fui a mi cuarto sin dejar sospechas, y esperé a Dake mientras se arreglaba, en menos de diez minutos estaba frente a mí, con el pelo mojado y vestido.

-Listo, cuando regresemos veré que le pasó al calefón, porque tú si lo fuiste a revisar ¿verdad?- me miraba y analizaba, bien es difícil engañarse entre mellizos básicamente, podemos leernos la mente, yo lo hice con él a los siete, pero ese es otro tema.

-Sí, si fui, ahora mueve el culo que si no llegamos tarde- lo empujé y bajamos. Al ir por la calle Dake se ganaba al lado donde daba sol, porque estaba muerto de frío, seguimos caminando, hasta que llegamos a la escuela, él se fue con sus amigos, y yo me senté en una banca, a esperar a los chicos, mientras tanto comencé a jugar en mi consola portátil, sentí a alguien sentarse a mi lado, por el rabillo del ojo vi que era Mark.

-Hola Mark

-Holi Dyl, ¿Qué tal estas?

-Bien, algo tensa por la fiesta que dará Dake mañana.

-Pobre, y pequeña Dyl- Mark me abrazó por los hombros y me quitó la gorra, no le di importancia básicamente, todos mis amigos hacen eso, me volví a concentrar en el juego, pero alguien me quitó la consola, no era otro sino Ale.

-¿Cómo avanzas tan rápido?- Ale siguió jugando mientras que Arm se sentaba en el piso, e Iri se sentaba al lado mío.

-Bien faltan dos de la manda- Iri, se estiró, y soltó un bostezo.