Metidos en un lío. No es bueno dejar a los mellizos solos.

No más hermandad.

<Narra Dake>

La fiesta iba de maravilla, no podía salir mejor, todo estaba yendo bien... esto quiere decir que en cualquier momento la vida me patea el culo y me dice "Hasta aquí tu suerte Dake".

Buscaba a los chicos que en algún momento los perdí de vista, como sea, busqué cuarto por cuarto del piso de abajo, mi querido Zack estaba de barman en la cocina, asegurándose de que no rompieran nada, Zack me estaba cuidando la espalda de algún desastre, sabía que lo haría está en su naturaleza de "madre" cuidarnos a Leith y a mí. Me acerqué a pedirle un trago.

-Hey Zack- lo saludé y lo primero que recibí fue un zape- pero Zack ¿qué hice ahora? Descubriste que yo rompí al "señor unicornio" ¿cierto?, en mi defensa fue Leith, el empezó, por favor, perdóname- Zack me miró con cara de ¿Qué vergas con este niño?... hasta que su cerebro reaccionó y me dio otro zape.

-No era por eso, pero tu mataste al "señor unicornio" desde este momento Leith es mi hijo adoptado favorito, y el primer zape fue porque dejaste solo a Leith y anda beodo.

-Primero, lo del "señor unicornio" fue culpa de Leith, segundo siempre Leith fue tu hijo adoptado favorito, y tercero ¿Cómo que Leith anda beodo? Tú nunca lo dejas beber en exceso.

-Claro que no lo dejo, porque la última vez.... Paso ya sabes eso... y a mí no me ha venido a pedir tragos, porque sabe que le daré chanclaso si viene.

-Ni me recuerdes lo que pasó esa vez... sigo traumado...bien iré por él, pero de casualidad ¿no has visto a Dyl o a Broke?

-Dake, primero a Dyl no la veo desde que subió con los chicos, segundo a tu "noviecita" no la he visto desde que entró por la puerta, y tercero gracias por buscar a Leith- me iba a levantar y Zack me pasó una lata, la bebí sintiendo un sabor amargo correr por mi garganta- para mi otro hijo adoptado favorito... sin alcohol- ya sabía que sería raro que Zack me diera algo de licor, en fin salí a buscar a Leith, o a Broke, sin olvidar la misión secreta que me encargó Dyl, no le volveré a fallar a mi hermanita.

Sentí a alguien rodearme los hombros con un brazo, era Broke, olía a un perfume que hacía que me picara la nariz.

-Hola "osito"- no sé si es por Dyl, o qué pero "osito" ¿enserio? "O-S-I-T-O" ahora entiendo por qué los chicos y Dyl pensaban que esto era ridículo, y es porque es ridículo.

-Hola linda- tengo que actuar sutil, ahora con lo que dijo Dyl, no me fío un pelo de esta tipa.

-Ten te traje algo de beber- me asó un vaso, con una bebida de aspecto anaranjado, olía dulce, así que lo tomé, sabía dulce.

Bien ya encontré a Broke, solo falta encontrar a Leith, iba a irme pero Broke me tomó del brazo.

-¿Dónde vas Daky?- ¿Qué cojones? ¿Daky? ¿Enserio?

-Espérame aquí que estaba buscando a Leith- me zafé de ella, pero me jaloneó y me besó, no mentiré el beso me gustó, así que la seguí.

-No tardes- me soltó, y salí disparado en busca de Leith, por favor que esté un poquitito cuerdo o consiente, que no pase lo que pasó la última vez.

Lo rastree, hasta por el patio y nada, eran cerca de las 01:20 A.M, y no había rastro de Leithan desde las 10:30 P.M, no creo que se haya metido en mi cuarto, o en el de Dyl, si hubiera subido, de una patada en el culo Linz lo manda escaleras abajo, evité a toda costa el pasar por la cocina, que si no Zack me agarra a chanclasos por no encontrar al bebé.

Después de buscarlo, casi medio siglo de mi vida lo encontré bailando twerk... espera ¿twerk? ¡¿TWERCK?!, ¡AH MIS OJOS MAMÁ!. Como si mis pensamientos invocaran gente apareció Zack.