5.

11 2 0
                                    

Después del juego, ganó nuestra escuela

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Después del juego, ganó nuestra escuela. Me levanto de las gradas pidiendo permiso para ir a comer con Chad (se lo debia). 

–¿Fue el chico que te trajo ayer?– pregunta Josh cruzado de brazos.

–Si fue el– respondo– creo que debemos ir a celebrar porque ambos equipos ganaron.

–No estoy seguro...– dice Rhys quien evidentemente esta celoso. Sandy le da un codazo provocando que Rhys ponga cara de dolor.

–Esta bien puedes ir– dice finalmente mi madre– a las 10 en punto te quiero en la casa.

–Claro ma– me despido de todos caminando a los camerinos en busca de Chad. Me recuesto sobre la pared en su espera.– oh ahi estas Johnson.

–Hola Brown– saluda con una enorme sonrisa– ¿lista para ir a comer?

–Obvio– caminamos en silencio hasta su auto, cuando llegamos, me abre la puerta del copiloto– que bello, gracias.

–Por nada– sonrie cerrando la puerta, entrando tambien.– ya verás a donde te llevaré. 


Chad enciende el auto conduciendo al misterioso restaurante. La verdad no me interesa si me lleva a comer a uno muy lujoso y caro, desde que me alimente todo esta bien. Miro por la ventana contemplando todas las personas caminando de un lado a otro sin importarles sus problemas o cosas así. Después de varios minutos en silencio llegamos a un carrito andante cerca al parque.

–Espero no te importe que comamos aquí– dice apagando el carro mientras me mira.– faltan varias semanas para tener mi pago por trabajar ayudando a mi padre con el papeleo de la empresa.

–No me interesa donde comamos, comida es comida– suelto una risita saliendo del auto, mientras caminamos al carrito andante.

–Hola Pablo– saluda al vendedor quien hace un ademán con la cabeza– dame por favor un perro caliente con todas las salsas, unas gaseosas y... ¿tu que quieres Grace?

–¿Hay hamburguesa?

–Claro que si– responde el famoso Pablo– en un momento sale tu pedido Chad.

Chad y yo nos sentamos en la acera mientras esperamos a que la comida salga.

–¿Cuando será tu próxima quimio?– pregunta interesado.

–La otra semana, estar en el hospital no es tan malo como pensaba– respondo oliendo la comida que están preparando en el carrito.

–¿Duele mucho?

–Un poco– respondo captando la seña que le hace Pablo a Chad. este se levanta reclamando la comida. se vuelve a sentar pasándome mi hamburguesa. 

–No sabes lo asustado que estaba cuando ese día te desmayaste, no sabia que hacer– suspira dando su primer bocado.

–Aún así me llevaste al hospital.

Amor enfermizoWhere stories live. Discover now