Capítulo 29

997 52 9
                                    

Melodie.

Sabía que Matthew no era exactamente lo que yo pensaba era un príncipe azul, tenia su pasado y con ello llevaba una gran carga sobre sus hombros Mark me había advertido todo lo que él era; que me lastimaría, que me rompería sin siquiera poder reaccionar, he vivido varias cosas desde que lo conocí debo reconocer que tanto buenas como malas pero en general más malas. No me había detenido a pernsar en todo lo que me habían advertido de él.

— Mel si fueras una persona inteligente te alejarías de Matthew Collins, él es una patada en el trasero en todo el contexto de la palabra.— tenía la mandíbula tensada y su dedo rozaba su barbilla.
— Bueno y que tal si no quisiera ser inteligente por primera vez en mi vida.
— Melodie, él no es hombre para ti; hay varias cosas que él no te ha contado y tarde o temprano te lastimará es lo mejor que hace con las mujeres como tú.
— Por favor Mark no soy una niña se como defenderme.
— No, no entiendes nada ese tipo es de cuidado, tiene que ver con drogas, armas y las carretas ilegales.
— Bueno y que hace tiempo que lo ha dejado.— una risa sarcástica sale de sus labios.
— De verdad tu crees que ese imbécil a dejado eso a un lado si esas cosas son las que lo existan,  le encanta saber que él tiene el control en todo.— tomó mis brazos sintiendo el frío de la tarde acercándose.
— Pues de verdad no me importa lo que haya hecho en el pasado, eso ya quedo enterrado y yo se que puedo con todo lo que es él,  siento que yo puedo sacarlo de toda esa mierda.
— Claro que podrías pero quien te garantiza que no te arrastrará a su lado al infierno en el que vive.
— ¿ Acaso tú lo conoces?, sabes lo que ha pasado todo este tiempo. No verdad así que si no sabes es mejor que no opines Mark.
— Melodie tu hombre perfecto según tu, machaco a golpes a otro y sabes por qué solo por que su novia lo engaño, Daniel paso en el hospital seis meses y tres de esos en coma.
— No me importa la verdad es que no importa lo que haya hecho antes de mí. Lo importante ahora es que hará después de mi no crees.
— No seas ingenua, hay cosas que simplemente tu no puedes arreglar, no puedes tapar el solo con tan solo un dedo.— fue lo ultimo que dijo antes de alejarse de mi, yo se que esto será duro pero lo intentaré lo haré por él, lo amo y no hay nada que no hiciera por Matthew.

Dejo de pensar en cosas sin importancia para recoger los últimos detalles de mi habitación para salir rápido de la ciudad no era un secreto que aquel tipo quería ver mi cadáver en bandeja de plata, pero no le daría el gusto de verme asi, tomó mi maleta para bajar por las escaleras Matthew se había ido ya hacia un momento para recoger su equipaje, tendría que irme con Fabian al aeropuerto no se me hacia gracias saber que un hombre me estab acechando y  que Matthew no esté a mi lado.

Al momento de salir de mi casa no sólo estaba Fabian, estaban una grupo de hombres vestidos con trajes negros, gafas y un auricular cada uno. Bueno esto ya es exagerar así no me podría tocar ni el presidente de Estados Unidos.
— Señorita Carter ellos son los hombre que ha enviado el señor Collins.— Matthew envío tantas personas sólo para llevarme al aeropuerto.
— Por qué son tantos.— pregunto rozando mi mejilla.
— El señor Jacob quería estar seguro eso es todo.— me reprocho.
— Entonces creo que tenemos que ponernos en marcha.

Llegamos sin ninguna novedad al aeropuerto Fabian me había extendido unos papeles en el auto, revelaban nuestro destino real no iríamos a las Islas Canarias como estaba predestinado, iríamos a Australia aún más lejos pensé para mi misma.
— Señorita Carter después de leer todo lo que hay contenido en ese sobre, no tiene que mesionarselo a nadie, ni si quiera al joven Collins.— Pero no se supone que él iría conmigo.
— Él vendrá con nosotros verdad.— hice una mueca.
— Claro el nos está esperando adentro, a lo que me refiero es que hay muchas personas por aquí y no sabemos si es que podrían ser espías de De la Cruz. Así que por favor no mencione nada respecto al destino real.
— No te preocupes Fabian.— Fue lo último que le dije antes de ponernos en marcha.

Como Fabian lo había dicho Matthew estaba sentado esperando mi llegada, se lo veía tan relajado aunque sus ojos no estuvieran en sintonia con su cuerpo se lo veía bien, llevaba una camiseta de los Rolling Stones, unos vaqueros ajustados, zapatos nike y una chaqueta de cuero.
— Hola pequeña que tal el paseo.—me susurro mientras acariciaba mi cabeza, ya muy característico del él.
— Pues no me quejo a excepción de.— casi hago mención de mi posible muerte. Aún recuerdo como se puso la ultima vez.
— ¿De que?— pregunto emocionado.
— Tendré que cuidarme de ti por dos semanas.— le dije jugando con la solapa de su chaqueta negra.
— Pero por qué si yo soy una buena persona.— murmuró mordiendome el cuello, millones de semana sensaciones eléctricas se aglomeraron en todo mi cuerpo.

— Pues lo que estás haciendo no es de una buena persona.— le devolví el mordisco.

Sin decir nada me lleva a rastras hacia el baño de él aeropuerto, cierra con llave y me sube en el lavamanos para subir mi falda y deshacerse de mis bragas posa su lengua sobre si monte de venus, el hilo de mis pensamientos se desvanece inmediatamente. Cada beso que esparcía por mi cuerpo era como si un torbellino entrará en mi estómago, me acerca a el para introducirse en mí,  una tras otra vez me penetraban sin darme tiempo de recuperar el aliento siento como si pudiera caerme en un abismo y después volar. Me da un beso y nos quedamos abrasados un par de minutos hasta recuperar el aliento.
— Vístete amor estaré a fuera esperándote.— mordisquea él lóbulo de mi oreja.

Empiezo a acomodar mi ropa y a buscar mis bragas que no se donde habían terminado, la puerta de último de los baños se habré y dejando salir una hermosa rubia con ojos verdes como el zafiro, un vestido blanco con tacones de aguja a juego y unas gafas negras.
— Así que sigue siguiendo un impulsivo verdad.— Charlotte, solo de pensar en su nombre quería devolver el estómago.
— Que es lo que quieres.— le escupi con odio.
— Yo nada pequeña ingenua, mira te he traído un regalo.— saca un sobre de su cartera.
— Que es esto.— giro el paquete cuidadosamente, he visto varias películas de acción Cómo para intuir que podría ser una bomba.
— Si no lo abres jamás los sabrás,  como sea nos vemos en las Islas Canarias, dulce Melodie.— terminada esa ultimq oración salió del baño de damas.

Al abrir el sobre eran fotos de Matthew y ella haciendo el amor de varias maneras, el asco se apodero de mi; una lágrima sin previo aviso se resbala  por mi pómulo. Dejando un agujero negro muy repugnante dentro de mi.

Y este es el comienzo del drama muajajaja vendrán muchas mas sorpresas.
No olvides dejarme tu estrellita y dejarme tus comentarios, vamos que no muerdo gggg.
Por favor comparte mi historia para que así seamos más Amantes.
También por fis pásate por mis otras historias y darle amor.
Te Quiero ;*

Amame hasta el final [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora