Powerful but insignificant

Desorden Emocional

Cuando desperté Dan seguía durmiendo, me levante sin hacer ruido y salí al patio a hablar por teléfono con Ana a eso de las 6 de la mañana y le expliqué toda la historia, incluyendo el beso en la casa de la playa.
-¡Agh, Alessa!, chillaba Ana por el teléfono,¡No se que haré contigo!
Entré a darme una ducha y la hermana de Dan, me pasó ropa para que me pudiera cambiar.  Tome desayuno, sin Dan y sin mea culpa por que esta era literalmente mi segunda casa.
Salí sin saber que esperar, sin saber que sentía  o como reaccionar cuando viera a Victoria, de la cuál había recibido al menos quince mensajes de perdón y arrepentimiento, culpando a los shots. Payasa.

Sentí que sonó el timbre de la casa, era Ana, la abracé lo más fuerte que pude y luego de cinco minutos llego Victoria al lugar, aún no estaba lista para eso.
-Alessa ¿podemos hablar?,dijo Victoria
-Hazme un favor y sal de aquí, o si quieres ve a hablar con Dan, ha de estar despierto, le sonreí con sarcasmo.
Victoria comprendió rápidamente el mensaje y entendió que no tenía nada que hacer allí.  Pero entonces salió la hermana de Dan, quien era igual a él pero su versión femenina... claro en cuanto aspecto físico y dijo:
-¡Victoria!¿Que tal ha estado la fiesta anoche?, vamos pasa te he estado esperando.
Victoria entró, ni siquiera yo esperaba que Catalina, la hermana de Dan y Victoria fueran amigas, pero al menos eso había ayudado a que quedáramos solas con Ana otra vez. Y fue ahí cuando sin darme cuenta comenzaron a salir lagrimas de mis ojos y no podía dejar de llorar, no entendía por qué esta situación me afectaba tanto, ni por qué no podía dejar de sentirme así y simplemente perdonar a Victoria...
-Vale, Vale Al, esta bien llorar, desahógate, dijo Ana.
-Es que, no me duele el hecho, me duele que fuera una amiga tan cercana, a alguien que le confiaba todo. Comencé a sollozar otra vez y me largue a llorar aún más fuerte que antes mientras Ana me abrazaba y hacía cariño en la espalda.
-Mmm... Al, tu hermana me ha llamado y ha dicho que debemos pasar a buscar un bolso que te ha dejado en casa de uno de tus vecinos nuevos... para que puedas ir a la playa mañana , dijo Dan a mis espaldas. Mierda, Mierda,Mierda no podía verme así, seque mis lagrimas y cruzando miradas con Ana para saber si tenía rastro de haber llorado, asentí con la cabeza.
Ana se despidió de mi y me deseó suerte, además de recordarme que nos veríamos en dos días. Subí al auto con Dan y ninguno de los dos dijo alguna palabras mientras íbamos de camino al lugar.
Junto a la casa de mis tíos, había dos camiones de mudanza que descargan y descargaban cosas, baje del auto y camine procurando no chocar con nadie. Y antes de que pudiera tocar el timbre de la casa alguien me tiro del brazo. Volteé y era Dan, quien me acercó a él poniendo su mano en mi cintura y me besó.
-Al, perdóname ¿Vale?, no se muy bien que es lo que quiero, pero quiero arriesgarme a descubrirlo contigo.
-Necesito tiempo, contesté apartándome.  Pero Dan volvió a tomarme la mano y siguió hablando:
-Al, se que fui estupido, pero no quiero perderte, insistió.
-¿Enserio Ahora te das cuenta de eso?, dije riendo. Me di media vuelta y toque el timbre.
-Hola, vengo por un bolso que ha dejado mi hermana, por cierto bienvenidos al vecindario... dije sonriendo de la mejor forma que pude.
-Hola, soy Lily un placer conocerte, tu  debes ser Alessa llamaré a mi hijo y el  te traerá el bolso enseguida, termino de decir sonriendo.
Cuando ella entró Dan siguió insistiendo y se paró a mi lado mientras esperábamos, pero ninguno de los dos habló. Entonces salió de la casa Lucas, con el torso completamente descubierto y me sonrió mientras me guiñaba un ojo. Ahora que podía verlo con la luz del día noté que también tenía pecas en sus mejillas y que era mucho más lindo, de lo que recordaba.
-Hola, Alessa, dijo finalmente Lucas.