Los tontos también se enamoran.

29_ Problemas.

Adrien y Kim jugaban con una pelota mientras corrían, cerca de la casa de Marinette.

-¡Ahí te va!

El rubio pateo la pelota con fuerzas, Kim se protegió con las manos haciendo que la pelota rebote y salga disparada hacia la casa de Marinette, más específico, la habitación de Marinette.

Kim miró hacia la casa de su amiga con espanto.

Todavía le dolía la espalda por la última vez que lanzó algo a la casa de ella y rompió una de sus plantas.

Pero no debía tener miedo ya que por suerte ahora tenía a Adrien y puede que Marinette y su cinturón de cuero no le hagan daño.

-Bueno Agreste, debemos ir a decirle a Marinette que fuimos nosot...

Se volteó y vio como Adrien se ponía un casco y se subía a una motocicleta.

-Yo me largo.

Y se fue dejando a su amigo a su suerte.

-¡¿Desde cuándo tiene motocicleta?! ¡Maldito rico que no respeta la ley y conduce siendo menor de edad?!

Trago duró y se dirigió a la casa de su amiga la cual por suerte no estaba y Sabine lo dejó subir a buscar el balón.

Al llegar a la habitación se puso a buscar el balón por unos minutos hasta que lo encontró y agradeció que no rompió nada.

-Estoy a salvo.

Se estaba por ir pero oyó la risa de Marinette y alguien más así que se ocultó en el armario de su amiga aunque con los ojos cerrados por miedo a ver algo que podría comprometer más su vida.

La azabache paso a su habitación junto con Alya y Alix.

-¿Enserio ése tonto no sabe que le gustas?

Habló la morena mirando a Alix.

-No, ése es más tonto que Agreste, aveces hasta se le olvida que soy una chica.

La ojiazul las miró enojada.

-¡Ey! No metan a mi Adrien.

Las dos rieron por la reacción de su amiga y Marinette agarró su celular.

-Ya lo encontré.

Mientras que en armario Kim hacia lo posible para no salir a preguntarle a Alix quien era ése idiota que no la notaba como a una mujer pero le tenía miedo a Marinette así que se aguantaba.

-Muy bien amiga, si no se te olvidó nada más ya vamos mientras Alix continúa hablando del idiota y ciego de Kim del cual está enamorada pero él no se da cuenta por ser más idiota que Adrien.

Las dos la miraron raro.

-¿Por qué tan específica?

Alya se encogió de hombros con una enorme sonrisa mientras se iban y Kim salía del armario muerto de la vergüenza y no sólo por que encontró un brasier de Marinette sino por que le gustaba a Alix.

-¿C-cómo pude ser tan tonto?

Miró hacia la pelota que había dejado sobre una silla y se sonrojo aún más al darse cuenta de que Alya si se dio cuenta de que él estaba ahí.

¿Cómo vería a Alix a partir de ahora?

Ahora si que estaba metido en problemas muy serios.

Continuará...