Los tontos también se enamoran.

61_ Juntos.

Max y Kim estaban en el salón de clases muy nerviosos ya que ése día se decidieron en confesarse a sus respectivas chicas.

-Muy bien Max, éste es el plan, primero ve y trae una soga mientras yo atraigo a las chicas a clases, luego tiramos una bomba con gas somni... sonmi... gas de sueño, ellas se quedan inconcientes, la atamos con la soga, le decimos que no la vamos a dejar hasta que se hagan nuestras novias y listo.

Finalizó y el moreno lo miró enojado.

-¿De dónde sacaras gas para dormir?

Kim lo pensó por un rato y suspiró molesto.

Debían pensar en otro plan.

Max sonrió alegre al pensar en algo.

-En la noche las invitamos a una cena romántica.

-Si me prestas dinero.

Otro plan desechado.

-¿Por qué simplemente no van y se lo dicen?

-¡Aaaaaaah!

Los dos se abrazaron asustados y miraron a Alya la cual estaba en su lugar junto con Nino mientras Adrien le enseñaba a Marinette unos temas que ella no entiendia.

-¿Desde cuándo están aquí?

Los morenos se miraron incrédulos.

Ellos llegaron antes y no los notaron.
Se sentían un poco ofendido.

Max miró a su amigo.

-Ella tiene razón, debemos decirles delante de toda la escuela así no se atreverán a decirle a dos chicos guapos que no.

-¡Ésa!

Chocaron los 5 y se fueron a buscar a las chicas mientras los demás los veían con pena.
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En el patio de la escuela.

Los dos se encargaron de reunir a todos los de la escuela cerca de la entrada para que presencien la declaración.

-Muy bien Max, hora de ser hombres.

Las dos chicas llegaron juntas y se detuvieron al ver que todos los veían, haciendo que se sientan incómodas.

-¡¿Qué tanto miran?! ¿Les debo?

Creó que ya se sabe quien dijo éso.

Kim y Max se acercaron a ellas, se miraron con sus rostros muy sonrojados y luego volvieron a mirar a Alix y a Sabrina que los miraban confundidas.

-¡Por favor, sé mi novia!

Los dos lo gritaron lo más fuerte que podían, toda los de la escuela gritaron y silbaron emocionados y las dos chicas se sonrojaron al extremo.

Sabrina fue la primera en reaccionar, se acercó un poco a el moreno y le susurró/ gritó avergonzada.

-¡Max! ¡¿Por qué haces esto frente a toda la escuela?!

Max sonrió nervioso, sabía que no debía hacerle caso a Kim y mucho menos a Alya.

-Pues...

-¡Juajuajuajuajua! Ustedes... ustedes dos si que son únicos.

Todos miraron a Alix que estalló a carcajadas.

-Déjenme adivinar, Max quería declarar su amor a Sabrina pero como nunca antes hizo algo así te pidió ayuda a ti...

Señaló a Kim.

-Tú te imaginaste quien sabe que cosa, le dijiste que te me ibas a declarar y que era mejor si ambos lo hacían frente a toda la escuela por que así nosotras no los íbamos a rechazar por haber tantas personas pero no consideraron que si decíamos que no iban a pasar la peor humillación de toda su vida ¿verdad?

Los dos se miraron sonrojados ya que a pesar de que ella no adivinó todo, en parte si y ahora que lo oían en voz alta ése no fue su mejor plan.

-No lo puedo creer.

La chica suspiró sin poder borrar ésa sonrisa burlona de su rostro y se acercó a Kim el cual se asustó, nunca le pasaba nada bueno cuando veía a Alix tan sonriente.

-Tienes suerte muñeco Ken, si quiero ser tu novia.

Salto sobre él y le dio un beso en los labios el cual fue correspondido casi al instante mientras que todos gritaban emocionados por la escena y Sabrina le tomó disimuladamente la mano a Max. El chico sólo sonrió por el contacto.

Quizás tuvieron una pésima idea pero ése día por fin Kim y Max se consiguieron novias.

Continuará...
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¡Hola!

Quiero terminar está historia rápido para poder continuar con las demás así que acelerare la marcha.

Espero que les haya gustado el segundo capítulo del día.

Volveré...