AMIGOS

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CAPITULO 7

-----POV SHUICHI---------

Mis ojos se agitan y se abren con el repentino escalofrío. Estoy en la cama, pero una corriente acaricia mi cuerpo. ¿Están abiertas mis puertas francesas?

Mirando a mi alrededor, amplío mis ojos por la sorpresa cuando me doy cuenta de que Yuki está parado a los pies de mi cama con mi manta en la mano.

-¿Yuki? -Me limpio los ojos y lo miro inquisitivamente. Mis brazos suben para cubrir mi cuerpo ya que no llevo ninguna prenda encima.

-No -me manda su voz ronca-. No te cubras.

No sé por qué obedezco. Dejo que mis brazos caigan a mi lado en la cama. La intensa mirada de Yuki recorre cada centímetro de mi cuerpo mientras deja caer la manta al suelo. Mi piel quema con su hambrienta observación, y parece que no puedo obtener suficiente aire.

Su pecho desnudo brilla en la luz de la luna que entra por mi ventana. Lleva pantalones negros, que cuelgan bajo sus fuertes caderas estrechas.

Inclinándose, envuelve sus dedos alrededor de mis tobillos y suavemente los separa.

Mis piernas, que están ligeramente dobladas en la rodilla, ahora se extienden y no esconden nada

Flexionando una rodilla sobre la cama, él se inclina hasta que cada una de sus manos cae a cada lado de mis caderas. Mientras mis rodillas tiemblan de excitado nerviosismo, veo como sumerge su cabeza y besa la parte superior de mi muslo.

Suspiro al sentir sus labios, suaves y cálidos, contra mi piel. Los saltos en mi estómago no son nada comparados con el latido en mi interior.

<<¿Por qué no lo estoy deteniendo? >>

Tengo miedo de dejar que continúe, pero estoy completamente asombrado por las sensaciones vertiéndose sobre mi cuerpo. Lo observo en silencio mientras arrastra más besos, dirigiéndose hacia adentro. El cabello en la parte superior de su cabeza cepilla cerca de mi pene, y yo agarro la sábana de la cama para no envolver mis piernas alrededor de su cuerpo y presionarlo contra mí. Su lengua toca mi muslo con el siguiente beso, y el abrasador calor de su boca casi hace que me caiga de la cama.

Enhebro mis manos por su cabello, incapaz de controlarme.

-Yuki -suplico.

Él se cierne sobre mí, mirándome a los ojos con fuego y necesidad. Mientras que su cabeza sigue estando en alto, sin romper el contacto visual, sus caderas se encuentran con las mías, y comienzan a moverse una contra otra. Lo siento endurecerse través de sus pantalones, y me gusta provocarle eso. Mis ojos se cierran por el placer que hierve en mi sangre y mi necesidad por él crece con la fricción de nuestras erecciones frotándose juntas.

-No te detengas -jadeo, el latido se hace más intenso dentro, y sé exactamente donde necesito que él esté. Necesito más de él.

-Eres mío, Shu-Chan. -La mano derecha de Yuki sostiene un lado de mi torso, debajo de mi brazo, y su pulgar acaricia mi pezón.

-Por favor. -Entre su dedo en mi pezón y el pulso en mi ereccion ...cada vez más rápido con nuestro ritmo creciente, cierro los ojos, delirando de deseo. Nuestros cuerpos se mueven en un frenesí, y tomo una respiración tras otra para mantener el ritmo. No sé cuánto tiempo esto puede continuar, pero sé que estamos construyendo algo dulce.

-Di que eres mío -ordena Yuki mientras muele en mí, más fuerte. Maldición, se siente bien. Él baja sus labios a los míos mientras nos respiramos el uno al otro. Él huele a lluvia, viento y fuego.

Muriendo por ti Where stories live. Discover now