RinxLen ¿Quien es el malo de la historia ?

secretos.

Rin paso sus manos por su cabello anestesiando su frustración. Se levantó del sillón caminado hasta mi. Tomo el vaso de whisky tomándose lo todo de un trago.

Me sorprendí pues nunca la había visto tomar o mostrar interés por las bebidas alcohólicas.

_ bien hagámoslo _dejo caer con brusquedad el vaso en la mesita.

– esta misma tarde aremos la transferencia_ ella asintió.

_ pero antes de eso_ se quitó el saco dejándolo en el escritorio y aremango las mangas de su blusa._ quiero investigar por mi propia cuenta.

_ ¿hablas de que quieres bajar al sótano?_ le respondí incrédulo, ya había sufrido bastante yo.

_ si, dos cabezas piensan mejor que una y cuatro ojos ven mejor que dos, así podremos encontrar más cosas.

_ pero.... Había algo.._ murmuré entre dientes.

_ ¿tienes miedo Len? _encarbo una ceja ebozando una sonrisa divertida.

_ por supuesto que no_ aclare mi garganta y me pare con los hombros firmes.

_ entonces vamos_ camino hasta la puerta dejándola abierta para que yo saliese después de ella.

Las secretaria y algunos del demás personal nos miraron con pezades.

No me imagino el alboroto que hubieran creado si llegasen a enterarse de que nos besamos. Y ahora que lo pensaba ninguno de los dos había tocado el tema, era como si eso nunca hubiera pasado pero sabía que muy en el fondo queríamos aclarar ese asunto.

_ que pasó con kensuke, no le he visto_ pregunté alcanzado su paso por los pasillos.

_ supongo que se tomó el día libre_ le mire mal_ ¿Sospechas de el?

_ para nada solo que el se está tomando un día libre cuando nosostros dos tenemos la soga al cuello y ahora más con la estrategia que vamos a usar.

Rin miro a ambos lados para asegurarse de que nadie nos estubiera viendo.

_ tenemos que hacer creer al enemigo que nosostros ni enterados del problema y que las finanzas están demaciado bien.

_ que crees que opine padre de esto_ me atreví a preguntar.

_ no me interesa lo que el piense_ se adentro en el sótano. Se quedó un momento de pie buscando el interruptor entre la oscuridad

_ ni lo intentes, no hay energia_ encendí la luz de mi teléfono y ella emito mi accion enseguida.

Nos adentramos entre los pasillo. No hacía más de una hora que había estado ahí y aún tenía la sensación de no estar solos.

Giadinos por la pista del cabello nos dirigimos hasta el viejo escritorio. Rin lo iluminó revisando con detalle cada parte de el.

No me había percatado de que el diseño del escritorio era muy elegante, quizás los que se usaban en aquella época y muy seguramente perteneció al presidente de aquellos tiempos.

_ mira..._ apartando la silla del escritorio rin encontró la caja que había Sido removida de la esquina de este. En ella había viejas figuritas de porcelana como duendes fumando un pipa o cosas por el estilo.

Ambos sonreímos. Sabíamos perfectamente que a nuestro abuelo le gustaba coleccionar ese tipo de cosas. De seguro este había Sido su escritorio.

_ ¿por qué buscarían entre las cosas del abuelo?_ estaba realmente intrigado.

_ no lose _ alzó los hombros_ hasta estoy empezando a dudar que su objetivo sea desintegrar la empresa.

Rin prosiguió por abrir los cajones del escritorio, en unos había unas cuantas telañanas o insectos muertos los cuales le provocaban caras de desagrado o graciosos gestos.

Me reí por lo bajo intentado que no lo notará.

Un sonido sordo de un jalon llamo nuestra intención. El cajón derecho del fondo estaba atascado.

Rin intento nuevamente con mucho más fuerza pero fue inútil.

_ creo que tiene cerrojo_ señaló la abertura de la cerradura.

_ que extraño..._ me incline un poco para ver mejor_ aver haste a un lado._ le ordené y ella se movió para que pudiera quedar en su lugar.

Rin también se inclinó a un lado mío observando lo que aria.

_ ¿la puedes abrir?_ me preguntó con los ojos bien aviertos.

_ no lo sé eso voy a ver_ le tendi el celular en su mano _toma esto y alusame_ se apego mucho a mi costado para iluminar.

Jale nuevamente de la agarradera para asegurarme que fuera la cerradura y no que estubiera atascada. Todo indicaba que si era problema de la cerradura.

¿Pero donde estaría la llave?

Despeje mi mirada buscando a los alrededores pero no encontré nada. Tendría que forzarla. Nuevamente busque con mi mirada algún alambre o metal que me sirviera.

_ necesito..._ volteo hacia rin, su rostro estaba iluminado por la poca luz del teléfono. Ella me miraba con sorpresa cuando me quedé callado al mirarla. ¡Bingo! Grité iternamente mientras giraba mi torso para estar frente a ella.  Me aseque un poco y pude ver como retrocedió unos centímetros confundida.

_rin..._ murmuré mirándola directo a los ojos. Sus ojos se abrieron como platos y en sus mejillas se tornaron rojas.

Alze mi mano a la altura de su cabello, ella cerró los ojos fuertemente aflojando su cuerpo.

Deslizar mis dedos por su cabello trabado de no estirarlo.

_ ¡listo!, Esto puede servir _ dije cuando tenía en mis manos el noche que sostenía su fleco. En ese momento Rin abrió los ojos._ ¿Pasa algo?.

_ ¡claro que no!_ me empujó del rostro haciéndome voltear hasta la cerradura_ ¡Ponte a hacer tu trabajo!_me ordeno gritando.

Sonreí.

Adentre el broche entre la abertura.

_ necesito más luz_ le dije y ella acerco un poco más su brazo_ nesecito que te acerques más_ camino un poco en cuclillas más cerca_ te nesecitas más cerca de mi_ susurré para mí mismo.

De un momento a otro gire mi cabeza sin saber en lo que estaba pensando.

Me concentre en mi trabajo dando unas cuantas vueltas al broche y jalandolo hacia fuera. Unos segundos bastaron para que el sonido de esta abiendose sonará en el silencio.

_ muy bien_ me felicito rin.

Ambos nos miramos y decidimos abrir el cajón.

El el ansia un cuaderno pequeño, viejo y polvoso. Se asemejaba más a un diario.

Al tomarlo y levantarnos una vieja foto en blanco y negro callo al suelo.

Rin se agachó anrrecojerla.

Eran unos hombres jóvenes  de traje ignaurabdo lo que sería un viejo edificio. Ahí estaba el abuelo de joven. Al reverso estaba otra foto más pequeña que aunque segura siendo en blanco y negro era más reciente.

Era el abuelo, ya un hombre de edad avanzada junto con otros dos hombres de sus misma edad y al costado derecho del abuelo se encontraba un hombre de aproximadamente unos veinte años. Ese hombre era nuestro padre, juto a otros muchachos más pequeños.

– ¿quienes serán ellos?_ pregunto rin al ver las fotos_ papá nunca hablo de que kagamineMark fuera una colaboración. El siempre dijo que fue fundada solo por el abuelo.

_ no veo el caso de mentir_ le respondí.

_ esto es demaciado raro....

_ creo que es hora de visitar a nuestro padre_ dije firme.

Continúa....