24|Cita

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Se término de vestir y se retiro con total discreción para no poder despertar el retrato de su madre, camino por las calles y se metió por un callejón oscuro para poder desaparecer.

Llego a una calle muy tranquila, sabia que solo estaría un par de horas con ella, no se enamoraría, solo seria diversión y nada mas.

Entro al bar muggle donde habían acordado reunirse, no perdería nada, si ella no llegaba, conquistaría a otra mujer, tenia un encanto muy especial que enamoraba a cualquiera ...pero eso no iba a pasar, porque ella estaba sentada esperándolo.

-Hola hermosa-le dijo mientras tomaba asiento a su lado

-Creí que no llegarías, porque un momento creí que te habías acobardado-le sonrió de forma coqueta

-No soy ese tipo de hombre

-¿Que clase de hombre eres?

-Eso tendrás que descubrirlo tu misma- sonrió de costado, mientras la miraba a los ojos.

Conversaron entre risas y anécdota, en el poco tiempo que había estado junto a ella, el había descubierto muchas cosas, tenían casi todo en común y lo mas grandioso de todo era que sus mascotas preferidas eran los perros.
( coincidencia ? ...no lo creo )

-¿Y tu?- le preguntó mientras acariciaba su rostro, los tragos ya le habían hecho efecto muy rápido-. ¿Cuantas novias has tenido?

-Novias, ninguna-respondió Sirius-. Solo salientes

-De seguro las utilizabas para una noche y ya ¿Verdad?

-Claro que no, no soy esa clase de patán-. Tenia que mentir o ella jamas caería en sus garras.

-¿Y crees que te creó?-le pregunto con una sonrisa

-Bueno ....

-No me trago el cuento, Sirius,  se que no tomaras unos tragos y te iras

-¿Que crees que busco?-le pregunto mientras se acercaba mas a ella.

-No lo se, pero yo si quiero divertirme,  de cualquier forma ...tu también quieres divertirte ¿Verdad ?

Sirius no podía creer que una mujer le había propuesto pasar la noche, nunca en todos sus años le había pasado, siempre era el quien lo proponía primero.

-¿Me estas invitando a pasar una noche romántica?-le pregunto en tono coqueto

-¿Sorprendido?

-En realidad ...si mucho, no me lo esperaba, Christina

-Al parecer nunca habías salido con una mujer que solo buscara divertirse

-Las mujeres con las que salia, eran algo aburridas ..-se acerco a los labios de ella y los beso de una forma muy tierna-. Pero tu eres grandiosa

-Sabes muchas cosas sobre mi-le dijo acariciando su cabello-. Pero yo no se mucho de ti

-¿Que quieres saber?

-Veamos ...¿Cuantos años tienes?

-Tengo ...treinta y dos años

-Con que te gustan las jóvenes

-Haber ...no eres tan joven que digamos -Sirius sonrió al ver que Christina se había ofendido un poco.

-Oye, yo no soy vieja-le dijo haciendo un puchero que hizo que el corazón del viejo merodeador latiera con amor-. solo tengo veintinueve añitos

-Y estas espectacular-le dijo con una sonrisa-

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-Y estas espectacular-le dijo con una sonrisa-. Tienes un cuerpo grandioso-se acercó a su cuello y lo beso haciendo que ella reprimiera un gemido.

-¿Te gusta mucho mi cuerpo?-le pregunto con una sonrisa coqueta.

-A cualquier hombre le gustaría, eres realmente hermosa, todo de ti es perfecto.

-A mi también me gustas mucho-le dijo Christina-. Eres muy apuesto, me extraña que hasta la fecha ninguna mujer te haya engatusado.

-No soy de esos, sólo quiero ser libre

-De seguro quieres ser libre para acostarte con todas las mujeres-dijo Christina con algo de molestia.

-¿Celosa?-le preguntó con una sonrisa

-Bueno, si soy algo celosa-dijo haciendo ojitos de perrito-. ¿Eso te molesta?

-Al contrario, me encanta saber que te pones  celosa

-¿Siempre te ha gustado las mujeres celosas?

- En realidad no, pero contigo es distinto-le dijo-. Siempre me habían molestado las chicas que me celaban ....pero me encanta saber que tu lo haces.

-Eres tan lindo ....

-¿Solo lindo?

Christina río divertida, le agradaba mucho Sirius, se sentía muy bien a su lado, era todo lo que había deseado en un hombre.

Las horas pasaron y decidieron ir a casa de Christina para poder pasar el rato, la joven vivía por una calle muy tranquila, junto con su hermana pero ella en ese momento no se encontraba debido a un viaje de estudios.

Llegaron a una casa muy bonita, se parecía un poco a la que tenían los Dursley en Privet Drive, solo que esta era mas hermosa y no tenia dentro a los horribles tíos de Harry

-¿En donde vives tu ?- le preguntó Christina mientras lo jalaba de la mano hacia su cuarto.

-Grimmauld Place. -respondió Canuto con un tono de voz bajo.

- ¿Enserio?- se sorprendió un poco pero luego empezó a besarlo con pasión, Black correspondió el beso al instante, sabia que no podía mezclar sentimientos, solo seria una noche y nada mas.

MI NUEVA VIDA - ¡Mis Padres Están Vivos! Où les histoires vivent. Découvrez maintenant