Pino [Billdip]

Capitulo 12

Ahh...es tan aburrido estar sola aquí en la sala, esos dos de arriba no estan perdiendo su tiempo, eh. Los jovenes de ahora son muy activos, me pregunto que hacer.

Bueno tendran hambre, ese niño tiene voz linda...
Hare de comer algo.

R.T.💖

Los gemidos suaves inundando aquella habitación, dando una atmosfera de calor y calidez tan placentera y atrayente para cualquiera. Los gemidos del castaños son leves los cuales estan siendo tapados con las manos del castaño en un intento inutil de esconderlos. Con su cara completamente roja, y ojos llorosos mira directamente a lo que esta haciendo el rubio; lamiendo de tal forma su miembro, lo que provoca que él tenga ligeros espasmos en su cuerpo.

Se siente raro, es extraño, no es normal, jamás lo habia experimentado antes.

"Se siente bien"

Su mente comenzaba a nublarse, en lo único que podia pensar era en lo bien que se sentía, su cuerpo comenzaba a ponerse extraño.

—Dipper, estas moviendo tus caderas solo, ¿tan bien se siente?...—Dijo este sonriendo de forma un poco burlona, pero a la vez tan tierna y cautivadora, que provoco un latido en él castaño con un sonrojo más notorio al igual que una pequeña reduccion de sus pupilas ante la frase.

Ocultando este de forma rapida su cara con las manos y partes de sus brazos. —Hey —Dijó el rubio sonriente, poniendose a su altura —No, no hagas eso...quiero ver tu tierno y dulce rostro tener esos cambios repentinos en señal de que estes bien —Menciono acariciando suavemente sus manos. —¿Me dejarías ver tus dulces ojos? —Pregunto cariñoso dando un ligero beso sobre esas suaves manos de porcelana.

Dipper dudo un poco, para luego bajarlas lentamente, con ambos ojos cerrados de forma forzada y labios temblorosos, Bill solo sonrio "Que tierno" pensó, para después bersarlo; ese beso era tan calido, pero al paso de segugos se fue haciendo más lujurioso y humedo, pero seguia dando el mismo sentimiento de querrer más Bill comenzó a acariciar la entrada del castaño, la cual ya estaba humeda, Dipper solo dió un brinco al sentir el roce de sus dedos ahí, dando como respuesta el que su cola se pusiera ahí.

—Si que esta adorable cosa es traviesa — La tomó, provocando un grito completamente raro en él castaño "Hyaa" gritó. Ambos quedaron atónitos ante ese grito, para que después el castaño escuchara un "Pff"  y una risa leve, esto provoco un ligero puchero en el pequeño felino.

Bill lo volteo, después de unos minutos metió un dedo dentro del castaño. Era caliente, humedo y esto provocaba espasmos en Dipper, tanto lo queria que de forma involuntaría la cola del castaño se enrollo en el braso de Bill, en señal de no querrer soltarlo. —¿Con qué es así,eh...?

El castaño solo se escondio con la almohada aferrandose a esta —L-lo siento...—Dijó entre jadeos.

Después de solo unos minutos su entrada por fin se extendio, Dipper no era el único que lo quería, Bill se sentia mareado un dulce aroma a flores le atraía, era agradable, lo quería, quería que fuera solo de él y para él.

Y de forma no tosca pero tampoco muy suave entro en él, estaba tan dilatado de forma natural y por el rubio que su miembro entro de una estolcada —¡Ngh...!—Gimió el rubio —Esta...apretado —Dijo este entre jadeos.

Dipper no se quedo a tras. Sus ojos se agrandaron un poco y sus mejillas se puso un tanto más roja, de tanto gemir no podia cerrar la boca donde de esta sacaba ligeramente su lengua y gotas de saliva caian de esta.

"Se siente bien"

—Comenzare a moverme...—Susurro el rubio a una de las orejas del castaño, para después morderla provocando otro jadeo fuerte del castaño.

Comenzo a embestirlo, se sentia genial para ambos era la primera vez que se sentian tan bien. No querian que ese sentimiento se fuera, no querian parar. Para castaño en sentimiento era tan placentero para él, que movia sus caderas al movimiento de las embestidas, habia alcanso su punto más sencible. Era doloroso, era raro, era placentero, se sentia caliente, sentia espasmos y pequeños cosquilleso en todo su cuerpo. Provocando el que se corriera, pero apesar de eso, seguia excitado y quería más. Mucho más.

Pero algo no andaba bien para Bill, algo no le gustaba y obviamente iba a impedir este semtimiento de molestia. Salio de Dipper —¿E-eh...?...¿P-por qué...? —Exclamó él castaño desesperado y jadeoso.

Bill le dio la vuelta y se acerco a su rostro sonriente, con una mirada tan calida que provocaba latidos fuertes en el castaño los cuales sentia por todo su cuerpo —No puedo ver tu dulce rostro en esa posición —Dijo este acariciando su rostro suavemente, y volviendo a entrar en él, para seguir embistiendolo.

Este comenzo a acariciar el miembro del castaño, provocando que él otro gimiera cada vez más fuerte y apretara al rubio provocando una sensacion genial para ambos. La habitacion se llenaba de gemidos, jadeos, de esa lujuría la cual era perfecta y armoniosa.

En él acto, el rubio comenzo a besar el cuerpo del castaño, el cuello, sus orejas, su boca, sus mejillas, su pecho, dejando chupetones en su cuerpo "marcandolo". El castaño se inclino un poco, y entre jadeos mordio el hombro del rubio provocando un gemido de queja y excitacion en este; para después comenzar a lamerlo con esa lengua rasposa, provocando escalofrios en el rubio.

El castaño se aferraba al rubio, ambos se sentian bien, se sentian genial, sentia ese calor proviniente del otro. Dipper se aferraba a su espalda rasguñando está en un intento de jamás soltarlo y seguir mordiendolo, Bill se aferraba de igual manera a Dipper, ambos pensaban solo en una cosa...

"Jamás te soltaré."