Mochi ❀Kookmin omegaverse

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— ¡¿En dónde mierda se esconde?!— gritó con frustración mientras veía todas las pistas que tenía—. ¡Mierda!— le dio un golpe a la mesa y se acarició las sienes.

— ¿Namjoonie?— entró Seokjin algo preocupado.

— ¿Hyung? ¿Cuándo viniste? No te escuché— apoyó los brazos en el escritorio y su cabeza en sus manos.

— Recién... ¿Te encuentras bien?— preguntó mientras comenzaba acariciar el cuello del alfa.

— No mucho... todo esto de Park Hyungseok me está estresando demasiado.

— No te sobresfuerces— se agachó para quedar a su altura.

— Necesito hacerlo... sino no podremos capturarlo.

— Nam... Yo también estoy asustado, ¿si? Todos lo estamos, pero no lograrás nada al quedarte varias noches despierto y alimentándote mal. Así no te puedes concentrar.

Namjoon finalmente levantó la mirada hasta llegar a los ojos de su novio, quien le miraba con preocupación.

— Lo siento por preocuparte— acarició su mejilla—. Sé además, que tú tampoco te encuentras demasiado bien.

— Es lo mismo de siempre Nam. Todo se repite.

— No te volvió a llamar... ¿No? Ya tienes suficiente con todo esto para que ahora él te siga acosando.

— No, no te preocupes.

— Cualquier cosa que suceda, me lo dirás, ¿cierto?

— Si... siempre te he dicho todo lo que a los demás nunca pude decirles— mostró una pequeña sonrisa sin fuerza.

Namjoon unió sus labios con los del omega y ambos los movieron con lentitud y cariño, hasta que luego se separaron.

— Ven, siéntate— palmeó sus piernas.
Seokjin le hizo caso y no tardó en sentarse—. Te amo.

— Yo también te amo...— respondió mientras ocultaba su rostro en el cuello del alfa, sintiendo su aroma a café.

Namjoon lo alejó para tomarlo de ambas mejillas y unir sus labios, mientras que Seokjin rodeaba el cuello del alfa con sus brazos.

— ¿Comiste algo picante?— rió entre el beso.

— Si... ¿Sabe muy mal?— cuestionó el omega con diversión.

— No... para nada— volvió a unir sus labios mientras recorría el cuerpo del mayor con sus manos.

Cuando ambos se separaron por la falta de aire, Namjoon lo observó fijo.

— ¿Tu celo no tuvo que venir hace algunas semanas?— preguntó, por lo que el omega, con olor a rosas frescas, frunció el ceño.

— Tienes razón... En realidad me tuvo que llegar hace un mes.

— ¿No controlaste?

— No... e-espera... ¿Crees que estoy...?— su rostro palideció un poco.

— No lo sé... ¿No tienes alguna prueba?— preguntó, a lo que el omega negó—. Vayamos a comprar una. Ahora.

— ¿Y si no es? Tal vez nos ilusionamos de nuevo y al final-...

— No perdemos nada, amor— lo besó antes de bajarlo de encima suyo—. Tal vez esta vez si se dé— dijo esperanzador.

Namjoon esperaba fuera del baño mientras cambiaba su peso de una pierna a otra. Se sentía bastante nervioso y ansioso.

Tenía sentido, en su mente, que al fin tuvieran un cachorro. La última vez que lo habían hecho, fue en el último celo del mayor, ya que luego estuvieron muy ocupados, y a partir de ahí, Seokjin no volvió a presentarlo. Sin embargo, tampoco tenía los síntomas de que esté esperando un cachorro. Al menos no que el alfa supiera. Él realmente esperaba que la prueba diera positivo. Ya lo habían intentado una vez y creyeron que tendrían uno. Pero al final no sucedió. Y así, tuvieron que guardar todas las cosas que habían comprado con anticipación para quien hubiera sido el futuro cachorro de ambos.