V: Promesa al cielo

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Canción🎧: Home - BoA.

La mañana llegó fría y clara. El viento chocaba contra los árboles dejando un rastro naranjo y amarillo de hojas sueltas, pero para dos niños era la mañana más linda de todas.

Daniel al fin se había recuperado y hoy podría salir del hospital.

Su madre le contaba que los síntomas habían mejorado considerablemente en Daniel y como premio, el doctor Minhyun le había dado una semana de 'descanso' y recuperación al pequeño para remendar el tiempo que lo tuvieron aislado de sus amigos.

Los padres de Daniel se habían comprometido para cuidar de Seongwu y llevarlo de campamento por 3 días para que los chicos pasen aquellos días juntos y la madre de Seongwu había aceptado la oferta, ya que confiaba plenamente en el cuidado que tenían los Kang por ambos niños.

— Prométeme que seguirás las instrucciones de los padres de Daniel y que serás cuidadoso.

— Lo prometo mamá.

— Muy bien.— su madre colocó el gorro de lana en su diminuta cabeza y besó su mejilla.— También cuida de Daniel cómo el niño grande que eres.

Seongwu subió al auto donde Daniel ya se encontraba adentro y se despidió de su madre con la mano mientras el auto comenzaba a moverse para salir a su nueva aventura.

Ambos iban pegados a la ventana observando el paisaje otoñal de las calles mientras contaban casas y autos.

— ¡Oh! Esa era mi anterior casa.— resaltó Seongwu.

— ¿Por qué te fuiste de ella?

— Porque estaba muy lejos del hospital y teníamos que ir seguido a ver a mi abuelo.

— Ohh~

Cuando ya se estaban acercando al lugar del campamento,no se percataron cuando se encontraron contando árboles y venados.

— ¡Mira! Ese es un Quercus Rubra.— apuntó Seongwu a un gran árbol de hojas rojas.

— ¿Quer qué?

— Un roble rojo, parte de la familia de las fagáceas. Es muy extraño ver uno por aquí.

— ¿Por qué, Seongwu?— preguntó esta vez el señor Kang mientras conducía, curioso de sus conocimientos.

— Solo crecen en América. Es la primera vez que veo uno real, señor padre de Daniel.

— ¿Y cómo sabes que es ese árbol? Podría ser uno parecido.— la madre de Daniel se unió a la conversación.

— También creí que era una árbol parecido, pero lo reconocí de inmediato porque, según mi libro, el Roble rojo es el único árbol con rayas por tooodo su tronco y ese las tenía.

La familia se quedó satisfecha con las palabras del niño y continuaron su viaje tranquilos.

— Hemos llegado, pueden bajar del auto.— anunció la madre de Daniel.

Los niños se bajaron entusiasmados y pronto se encontraron rodeados de naranja vegetación, hormigas y una fresca brisa.

Los padres de Daniel se encargaron de armar las carpas, acomodar sus cosas y de hacer la comida, mientras que ellos exploraban el sector, estando los dos tomados de las manos porque Seongwu debía cuidar de Daniel.

Los días pasaron de volada para ellos con los paseos por la mañana, las noches de historias y cuentos, los concursos de eructos con el padre de Daniel, las búsquedas de ardillas e insectos y las fantásticas meriendas que hacía la señora Kang en las tardes. Las siestas en la amaca y la simple compañía de ellos serían de los recuerdos más lindos de su infancia.

De Vuelta a Otoño ✧ OngnielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora