Una llamada de urgencias cambia la vida de Lauren por completo al enterarse que una niña la esperaba, una niña de tan solo 5 años, era posible? Después de su separación de Camila se había prometido no saber de ella mas, pero ahora? tenía una niña...
-Lista Karla?- el doctor Hussey entro a la habitación del hospital, ya era hora.
-Sí...- acaricie un poco mas mi vientre, las contracciones eran cada vez mas frecuentes y dolorosas.
Pasamos a la sala de partos habian por lo menos cuatro enfermeras y mi madre dentro, el doctor llego poco después.
-Buenas tardes a todos- una doctora entro a último momento con el equipo necesario para atender un parto- lamento la tardanza, el tráfico, muy bien a quien tenemos aquí doctor?
-La paciente Karla Cabello esta por dar a luz a una niña- por un momento pensé que él estaria a cargo pero al parecer no.
-Como te sientes Karla?- la mujer era muy jovial, y entusiasta.
-Con dolor...- una nueva contracción irrumpió en mi cuerpo.
-Bien esta pequeña quiere nacer pronto- sonrió- bien abue- le dijo a mi madre- no deje que Karla se duerma puede ser riesgoso, así que mantendremos a mami despierta hasta que termine el parto de acuerdo?- mi madre tomo mi mano y me sentí segura.
Fueron largos momentos en los que solo escuche "puja fuerte" "vamos Kaki" "ya viene", luego por un momento quise pensar en que ya había pasado, dolía como el infierno, estaba cansada, sudando y muy adolorida, en algún que otro segundo me sentía desvanecer, a punto de desmayarme ya no podía aguantar mucho más...
El llanto de un bebé me hizo abrir los ojos muy lentamente, lloraba fuerte haciendo que todos en la sala se enterasen que habia nacido.
-Es una niña hermosa- una de las enfermeras la tomo y aseó delicadamente mientras otra le ponia una especie de cinta de plastico en su piecito, la pesaron y midieron tambien.
-Es hermosa hija- mi madre lloraba de felicidad pero no podia despegar los ojos de mi bebé, al fin estaba aquí.
-Karla aun no hemos terminado solo falta un par de cosas más y te dejaremos tranquila con tu bebé- volvio a hablar la doctora, diez minutos después pude respirar tranquila.
Envolvieron a mi bebé en una toalla y la dejaron sobre mi pecho, su carita rosada, sus cabellitos tan finos y suaves, sus manitos en puños, mi bebé.
-Any...- susurre casi sin voz viendo a mi hija- hola amor...- mis brazos respondían por si solos al calor de mi pequeña bebé, la acunaban sobre mi pecho y la mantenían abrigada.
-Bien es hora de que mamá y bebé tomen un descanso, Matt quita esa cara de idiota no eres pediatra- hablo de nuevo la doctora, solo ahi me acorde que él tambien estaba en la sala.
-Es una niña hermosa Karla- me felicito y siguio a la doctora.
-Tu padre enloquecera con esto- hablo mi madre cuidando de que estuviera bien tapada tanto yo como la bebé.
-Estoy segura que sí- llegamos a la habitación, la doctora esperaba ahí, mi madre me hizo una señal de que buscaría a papá a lo cual asentí.
-Bien, voy a guiarte en como debes alimentar a tu bebé- se fue sacando el barbijo y demás.
Ella tenía el cabello castaño oscuro tirando a negro, con ojos color avellana, su piel estaba bronceada pero eso solo la hacia mas exótica.
-A ver bebé- Any seguía envuelta en la toalla pero parecía algo inquieta- creo que quiere acomodarse- acaricio su pequeña mejilla y vi como sacaba la lenguita- es una niña muy lista- sonrió y la ayudo a acomodarse mejor sobre mi pecho- mamá...
Descubrí uno de mis pezones un segundo después Any se prendió a él, tomando de manera suave y lenta.
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