Freckles • CHANGLIX FIC AU•

Baile de otoño 2/4

Sorry por los errores ortográficos. Cuando escribí esto estaba tan apurada que ya no lo revisé dos veces. Les dejo la canción con la que escribí toda las partes del baile de otoño.

—¿C?— preguntó Felix con voz temblorosa.

—¿Felix?— pregunta, caminando hacia él, poco a poco como si se tratase de no espantar a un pequeño animal.

Felix se ha quedado estático, sintiendo como su corazón retumba contra su caja torácica, no puede impedir morderse el labio. El chico de cabello negro ha quedado a pocos centímetros de él, puede sentir su respiración cerca de su rostro, Felix cierra los ojos, sintiendo que en cualquier momento podría desvanecerse. El desconocido ha levantado la palma de su mano y Felix siente miedo, solo reza porque no vaya a ser una mala broma y le termine dando un golpe en la cara por "marica", pero resulta todo lo contrario, el chico roza suavemente con sus dedos la parte desnuda del rostro de Felix, tan suave que Felix siente cosquillas y termina soltando una pequeña risa.

—Aquí estoy—confirma el chico del antifaz, recorriendo el rostro de Felix con las puntas de sus dedos, hasta llegar a sus labios y entreabriéndolos un poco.

Felix se siente indefenso, expuesto, no sabe qué hacer, ha quedado a la deriva y a lo que su acompañante quiera hacer con él.

—Aquí estás— contesta Felix posando su mano encima de la del chico contrario, para después darle un pequeño beso tímido, tal vez demasiado atrevido, pero Felix siente el instinto de hacerlo y no piensa resistirse.

Ambos chicos siguen mirándose, Felix parece reconocer aquellas cuencas, pero si hubiera más luz podría descifrar a quién le pertenecen. Pero es muy oscuro y la música apenas deja que escuche muy sutilmente las palabras de su acompañante, así que prefiere dejar de cuestionarse.

El chico del antifaz se acerca más a Felix, para después rodearlo con los brazos, la cabeza de Felix termina en su hombro, el chico de cabello rubio inhala y puede percibir el olor fuerte de una fragancia, lo aturde, no pensaba que así fuera a oler su admirador secreto. Felix no puede creer que su pecho está contra el pecho de C, es demasiado irreal, demasiado apresurado, demasiado para él.

C cosquillea con la punta de su nariz el cuello de Felix y Felix no sabe si reírse o empezar a preocuparse, porque se siente extraño, se siente bien, pero al mismo tiempo muy ajeno o tal vez es la calentura, que podría estar apoderándose de su cuerpo, al final de cuentas solo eran chicos de diesiciete años.

—No hagas eso, me das cosquillas, recuerda que soy muy cosquilloso— ríe nerviosamente Felix.

—¿No te agrada?—pregunta quedito C, con su voz ronca.

—Sí, pero se siente extraño—protesta Felix, para después sacar un suspiro, el chico de cabello castaño ha empezado a besar su cuello.

Esto es demasiado, son demasiadas emociones combinadas, Felix no sabe si dejarse perder en el momento o detener a su acompañante en caso de que alguien los vea. Felix pensaba que platicarían primero, esto no era lo que pensaba como un primer acercamiento. Pero Felix nuevamente tiene miedo de usar su voz, así que termina cediendo, sin saber si es por el miedo o por el fuego que está recorriendo sus venas.