Un secreto [Viktuuri AU/Mpreg/Omegaverse]

Capítulo 7. Día de caos.

Antes de empezar, me disculpo porque en el capítulo anterior cometí un error con la diferencia horaria de Japón y Rusia, sí que la había buscado, pero me pareció entender que Rusia le llevaba las seis horas a Japón y no, era al revés, ya está corregido, y de nuevo, me disculpo por eso, ahora sí, disfruten el capítulo uwu.

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-Buenos días. -Dijo el pelinegro.

-Buenos días. -Dijo su jefe. Este salió del auto y le ayudó a subir su equipaje al auto ya ambos partieron rumbo a el aeropuerto, como siempre, casi no hablaron.

(...)

El tiempo pasó  y ambos adultos ya se encontraban en el avión, el peli plateado buscaba algún tema para entablar conversación con el omega y, sin embargo, estaba completamente en blanco.

-Yuuri~ -Dijo el peli plateado.

- ¿Necesita algo? -Dijo el pelinegro volteando su mirada hacia él.

-Háblame de algo, ¿qué te gusta hacer? ¿Qué haces en tu tiempo libre? -

-Mmm veamos... Por lo general me gusta leer, eso es lo que suelo hacer en mis tiempos libres, o ver películas con Yu-- -El pelinegro se calló de golpe.

- ¿Yu? -

-Yu-Yui, mi pareja. -

-Ya veo... ¿Es una chi--? Ah, lo siento, no preguntaré sobre eso... Veamos... -El peli plateado pensaba en alguna otra pregunta para hacerle al omega, este sonrió al ver que el alfa trataba de no incomodarlo. - ¡Ya sé! ¿Cuál es tu comida favorita? -

-El katsudon. -

- ¿Katsudon? ¿Qué es eso? -

-Es... Bueno, consistente en un bol de arroz cubierto con una chuleta de cerdo rebozada, huevo revuelto y condimentos. -

-Ya veo... Me gustaría probarlo. -

-Puede hacerlo, lo llevaré a un lugar... Claro, si quiere. -Dijo apartando su mirada.

-Sí, sí quiero. -Dijo el peli plateado sonriendo, el pelinegro se sonrojó un poco ante la sonrisa del alfa, sólo asintió.

(...)

Ambos adultos bajaron sus cosas y fueron por sus maletas, acto seguido tomaron un taxi hasta el hotel, una vez ahí, lo primero que hizo el peli plateado fue acostarse en la cama.

-Estoy cansado... -Dijo el ruso cerrando sus ojos.

-Puede descansar, no tiene asuntos que atender hasta el día de mañana. -

-Sí... Eso haré. -Dijo levantándose y buscando un cambio de ropa en su maleta. El pelinegro tomó su teléfono y se disponía a salir de la habitación. - ¿A donde vas, Yuuri? -

-Iré a hacer una llamada. -

-Está bien. -Dijo desviando su mirada, el pelinegro salió de la habitación. Tomó su teléfono y marcó el número de la tía de su hijo, luego de un par de timbres la chica contestó.

-Yuuri~ Hola. -Dijo alegre la rubia.

-Hola, Maiko. -

- ¿Ya llegaste? -

-Sí, hace como una hora. -

-Ya veo. -El pelinegro escuchó de fondo la voz de su pequeño hijo diciendo "mamá".

-Maiko, ¿me lo podrías pasar? -

-Claro, Yura, ven aquí. -Pasaron unos cuantos segundos cuando el pelinegro escuchó la voz de su pequeño.