𝐄𝐥 𝐝𝐢𝐚𝐫𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐒𝐚𝐬𝐡𝐚

8

El cobalto después de terminar su desayuno y terminar su plática decidió irse de ahí solo para pensar acerca de como sería si sus padres se enterarán de que el tiene una familia con un erizo hombre.

— Mami, ¿ya vamos a llegar ? —

Sasha se encontraba agotada y con unas sedientas ganas de beber agua.

— ¿Hu?, oh sí Sasha perdón he estado pensativo —  Sonic sonrió intentando ocultar su notable preocupación.

— ¿Ese no es papá? —

En efecto Shadow the hedgheoh estaba un poco lejos de donde se encontraban con una notable molestia.

— Es cierto— Tragó un poco de saliva.

—¡Sonic!—  El azabache gritó a lo lejos para luego usar su esmeralda y transportarse a dónde estaba su esposo y su hija.

— Sha-Shadow — Tartamudeo al sentir al mayor frente suyo transmitiendo furia. No sin antes interponerse entre su hija y el, dejando a Sasha tras suyo.

— ¡¿Se puede saber por qué me hablas en media reunión!?— Alzó un poco la voz ocasionando que el contrario se cohibiera.

— Perdón es que nos cerraron la puerta a mi y a Sasha — Agachó un poco sus orejas.

— Debiste levantarte temprano —

— Lo-lo siento yo

— Está bien no te preocupes, lo siento si te asusté fue mi culpa levantarte la voz y gritarte pero es que sabes que mi trabajo es importante, y ustedes son importantes para mi —  Shadow se arrepintió de sus palabras abrazando la cintura de Sonic.

—No lo vuelvas hacer casi haces que llore —

Inmediatamente las emociones escondidas hace varias horas salieron. Sonic se restregó en el pecho de Shadow llorando.

— Sonic se que no llorarías por algo así. ¿Pasó  algo verdad? —  Quiso alejar un poco a Sonic de su pecho para poder verlo pero el azulado se resistía.

— ¿Y que si paso ?— murmuró.

—  Por eso estoy aquí —

— Te digo en la casa — Se alejó del mayor para después sujetar la mano de Sasha y llevarla al auto del mayor que había dejado estacionado.

Shadow suspiró a regañadientes.

— Mami ,Papi. Voy a jugar con mis muñecas,¿quieren jugar? — Sasha mostró sus muñecas con alegría.

Pero Sonic y Shadow no tenían ánimos.

— No hija, después jugamos tu juega —  Shadow hablo por los dos dejando que Sasha subiera las escaleras.

El cobalto respiro hondo cerrando sus ojos con fuerza y exhalando lentamente el aire contenido.

— ¿Te acuerdas que te dije que mis padres estaban muertos? —

Sonic tembló.

— ¿si? ¿Que pasa soniku? —

Aunque Shadow no quisiera admitirlo podía sentir los nervios apoderarse de él.

— No están muertos —  Susurró algo bajo pero logrando que el moreno alcanzará a escuchar.

— ¿Perdón?—

— Si lo que escuchaste no están muertos, solo lo dije porque no sabía si me aceptarían  y

— ¡Sonic me mentiste!, ¡¿Durante cuatro años me mentiste!? — Exclamó Shadow explotando de ira.