Capítulo 12: Los límites de lo correcto

9K 488 54
                                    

Tras la boda de Naruto, me apresuré a ir donde el Hokage. Shizune me había dicho que Kakashi Sensei necesitaba verme con urgencia y no podía evitar sentirme nerviosa al respecto. Después de todo, la última vez que lo había visto era para darle el reporte de una misión fracasada. Necesitaba redimirme de alguna forma ¿Será que al fin me daría la oportunidad?

- Así que al fin llegas- Dijo Kakashi mientras entraba en su oficina. Había libros y pilas de hojas esparcidos en todas partes. La boda de seguro había retrasado muchas misiones- Ha llegado esto para ti desde la Aldea de la Arena. Vino con el ave más veloz que poseen y tenemos razones para creer que es de Alta Urgencia. Esta cifrado, así que tú eres la única que puede leerlo- terminó de decir mientras me alcanzaba un rollo- ¡Ah! y feliz cumpleaños.

- Gracias...- El rollo estaba escrito en un código de ninja médico que había leído unas cuantas veces en los libros de Tsunade. Me pregunto por qué se molestarían en hacerlo, sólo si creyeran que alguien podría interceptar el ave lo harían. Era una carta de Moria, que decía:

Sakura,

Te escribo desde la Aldea de la Arena con suma urgencia. Tanigakure ha sido destruida. Días después de tu partida el enemigo volvió en mayor número y destruyó todo a su pasó. El rango de nuestros oponentes es mínimo Chunin, e incluso me atrevo a decir que más. Por este motivo, nuestras fuerzas no pudieron hacer mucho para acabar con ellos.

Docenas de nuestros aliados han muerto o caído bajo un Genjutsu que no hemos podido dispersar y que los está matando en menos de 72 horas. Y tú eres la única ninja médico conocida capaz de contrarrestarlo. Se reportan más casos en pequeños pueblos aledaños.

Por último, nuestros adversarios te buscan a ti y al Uchiha, y han amenazado con continuar los ataques si no se entregan. Sé que esto supone un gran riesgo para ti, pero eres la única que puede salvar las vidas de estas personas.

Moria

Imposible. No podía creer o que leían mis ojos. Mientras nosotros festejábamos acá, las personas morían en Tanigakure. Pensé que Sasuke había eliminado a los enemigos por completo la última vez, pero me equivoqué. Sólo eliminó una pequeña rama de un árbol más grande. Si partía hoy mismo a Tanigakure y me daba prisa con suerte llegaría mañana. Tenía que ayudar a los sobrevivientes restantes y luego ir a la Aldea de la Arena a curar al resto. Tenía que darme prisa.

- Tengo que irme Sensei- Dije dirigiendome a la puerta.

- Un momento Sakura. Dime qué es lo que está ocurriendo.

- Tanigakure ha sido destruída. El enemigo ha atacado esta y más aldeas, y dejado a decenas de ninjas bajo un Genjutsu mortal que sólo yo puedo dispersar. Por eso tengo que ir. Además, nuestros oponentes me quieren a mí- Mentí. También querían a Sasuke, pero en tanto no sabía dónde estaba no podía depender de él.- Sólo si los enfrento podré evitar que se produzcan más ataques.

- Ya veo.- Dijo pensativo- Misión denegada. No tienes autorización de salir de la Aldea.- ¡¿Disculpa?!

- ¿A qué se refiere con que no puedo salir de la Aldea? Tengo que ir. No los puedo dejar morir, cuando el enemigo me quiere a mí.- Dije exasperada.

- Escúchame Sakura. En primer lugar, el enemigo te quiere alejar de tu Aldea, por eso está atacando lugares lejanos. Si te atacara en Konoha, estaría en gran desventaja; no sólo por estar atacando en terreno desconocido para él, sino por la calidad de los ninjas que poseemos. En segundo lugar, eres la único ninja médico capaz de dispersar el Genjutsu, eso quiere que si te llegaran a capturar o matar no sólo morirían más personas de la Aldea de la Arena sino de tu propia Aldea en ataques futuros ante la imposibilidad de revertir el jutsu. Por último, no sabemos si esa carta es verdadera o una trampa. Así que la respuesta es no.- Lo admito, lo que decía era lógico, pero no era lo correcto.

- ¿Entonces espera que me quede escondida en mi casa mientras personas inocentes mueren a causa mía? No me pienso quedar con los brazos cruzados.- Dije con obstinación.

- Mandaremos refuerzos en algunos días. Nuestros ninjas ya tienen misiones importantes asignadas y en tanto el enemigo no se acerque no tenemos nada que temer. No podemos dejar que Konoha se quede sin el médico ninja más importante, ni mucho menos un Jonin.

- ¿Desde cuándo a la Aldea de la Hoja le importa más sus propios intereses egoístas que ayudar al otro? Tengo que ir. Hay gente muriendo a la que yo sólo puedo ayudar. Soy un Jonin. Estoy en capacidad de hacerlo.

- ¡He dicho que no Sakura! Así es la vida de un Ninja. Tienes que hacer sacrificios por tu Aldea.

- Pues que vida tan honorable Sensei.- Dije con ironía.- ¡Cha!- Grité mientras me iba de su oficina, y sin querer destrozaba la puerta de un golpe. Lo que decía Kakashi Sensei tenía sentido, pero no era justo. No era correcto. Si eso implicaba ser un Ninja de Konoha quizás ya no quería serlo. No podía dejar que se siguieran perdiendo vidas por el miedo de unos pocos. Eso lo había dejado atrás hace mucho tiempo. Todas las guerras que esta Aldea había enfrentado se habían originado por situaciones así y parecía que seguían sin aprender de ello. No me importaban las consecuencias. Partiría a medianoche.

Sangre Uchiha: El viaje de Sakura y SasukeWhere stories live. Discover now