NARRA ZAYN MALIK
Durante toda mi vida he estado escondido detrás de un montón de mentiras, de un montón de fracasos y fiascos, no soy el chico perfecto que todos creen o que al menos que yo les hago creer, escondido detrás de aquella falsa sonrisa que forcejeo cada que pasa alguien por mi costado en los pasillos del colegio.
- Hey Zayn. – gritó Liam corriendo hasta mi posición.
En realidad, no pude escucharlo ya que tenía puesto los audífonos, solo vi como abría la boca y corría hasta mí.
Retiré uno de los audífonos y lo observé como trataba de recuperar su respiración.
- ¿Qué harás mañana en la noche? – preguntó recargando sus manos sobre sus rodillas.
- Ir... ¿a la fiesta de noviembre? – enarqué una ceja.
- Perfecto, ¿Consigues chicas lindas? O ¿Las consigo yo? – preguntó recargando su mano derecha en mi hombro.
- Tienes un pésimo gusto en chicas. – reí. - las ultimas que llevaste, una tenia bigote y la otra bellos en las piernas. – rodé los ojos comenzando a caminar nuevamente.
- Mentira Malik. – dijo riendo. – las consigues tu entonces. – comenzó a seguirme. – cuidado al entrar al aula, tu admirador está esperándote.
- Estoy harto de su acoso. – bufé frustrado. – ni siquiera es un poco discreto.
- Vamos, no es tan malo, solo un pequeño problema, tiene pene. – dijo burlón.
- Tú y tu estúpido sentido del humor. – gruñí recargándome sobre los casilleros.
- Tú y tu estúpido humor de mierda. – se quejó.
Entró al salón y yo lo seguí segundos después.
Miré por todo el lugar buscando una banca vacía, para mi mala suerte, solo había una, y era delante de la persona más insoportable del colegio, Niall Horan.
Bufé aceptando mi destino y me encaminé a mi silla eléctrica.
- ¿Está disponible? – pregunté apretando mis dientes al hablar.
- Claro que sí. – dijo igual de hiperactivo y hablador que siempre. – disponible, solo para ti, también el asiento por si te lo preguntabas. – su estúpida y desagradable sonrisa provocaba en mí una sensación de suicidio.
- Gracias. – me senté, coloqué nuevamente mis audífonos y crucé los brazos sobre la paleta, escondiendo mi rostro en el hueco que estos formaban.
NARRA NIALL HORAN.
Me fascinaba estar tan cerca de Zayn, ha sido mi "amor platónico" lo que va del año, sé que Zayn muere por mí, pero le gusta jugar ese papel de chico heterosexual.
- Creo que está en sus días. – Dijo Louis observando a Zayn.
- Siempre está de mal humorado. – sonreí observando el ancho de su espalda.
- Deberías dedicar tu tiempo a otra persona que no sea el, es un cretino chico fresa popular.
- Es lo que lo hace mi chico perfecto. – respondí recargando mi barbilla en el hueco que formaban mis palmas unidas.
Louis solo negó molesto y se cruzó de brazos.
La profesora entró con sus típicas faldas cortas y un labial rojo intenso, no era fea, no, pero vestida así parecía una zorra.
