A YoonGi le gusta JiMin.
A TaeHyung le gusta HoSeok.
Pero HoSeok y JiMin acaban de entrar en una relación.
➖esta obra es ficción➖
➖finalizada➖
➖portada diseñada por; @Pinxsxy➖
|| Intento de Humor || Un poco de drama || Contenido LGBT+ || Contiene Cr...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
» Ina:
Toda su vida, TaeHyung ha estado aterrado de llevar sus relaciones al siguiente nivel.
Toda su puñetera vida.
Y la razón no es otra que por culpa de un chico que fue al mismo instituto que él;
"—No existe eso del sexo con amor, es una sarta de gilipolleces. Una vez que folles con tu pareja, se acabó. Es ley de vida y eso no se puede cambiar como lo ponen en las películas."
Quizás, no debería escuchar aquellas palabras de un muchacho de quince años cuyo rostro ni recuerda. Pero por algún motivo, siempre que parecía que el siguiente paso estaba por suceder, aquellas palabras rondaban por su cabeza como un pez nada por el mar.
Y siempre le sucedía lo contrario;
Al no atreverse y tener miedo del sexo, su pareja lo dejaba con la excusa de "si no me quieres,¿para qué seguir?".
TaeHyung lo intentó muchas veces, de verdad que sí. Pero siempre, siempre terminaba acobardado.
Pero, como en todas las historias, existe una excepción.
Y puede que YoonGi la sea.
Pues esta vez, mientras sube las escaleras de espaldas al no querer separar sus labios de los del contrario, notando como su novio le arrebata la chaqueta y la tira por cualquier lugar sin cuidado, no tiene miedo. Ni una pizca.
Pues cuando las palabras de aquél chico resuenan dentro de su cabeza, TaeHyung siemplemente le alza el dedo corazón y se concentra en el sabor de los labios de su novio.
Ya sin chaquetas ni jerséis, YoonGi empotra a TaeHyung contra su puerta cerrada con un golpe seco y le acaricia el cuello con sus labios como si se tratase de una de las frutas más dulces y deliciosas que han existido en el mundo.
Y lo que más le gusta a YoonGi, es el hecho de que él es la única persona que puede tomarla y saborearla.
Y por eso, sonríe otra vez mientras que su boca de porcelana sube hasta conectarse de nuevo con la de su acompañante, sintiendo una corriente eléctrica zarandear cada centímetro de su cuerpo. Como si sus labios junto a los otros fuesen un cable y un toma corriente.
TaeHyung toma el pomo de la puerta y con cuidado lo desliza hacia un lado, dándole una vuelta a YoonGi para que sea el primero en entrar en la habitación.
Con un sonrisa estampada en la cara, YoonGi se quita uno de sus zapatos con una mano mientras que con la otra va buscando contacto con el castaño, su calidez y su aroma. Grabando a fuego en su memoria cada instante en el que las yemas de sus dedos o los bordes de sus labios acarician y besan la oscura piel de TaeHyung. Disfrutando el momento como si se tratase del último.
