Redención [Boku no Hero Academia]

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Lo último que recuerdo fue una gran explosión, cuando desperté estaba en la enfermería con los brazos vendados.

—¿Qué paso? – pregunte a Recovery Girl

—Al fin despertaste – dijo ello mirándome amablemente

—¿Perdí? – pregunté sentándome al borde de la camilla

—Eso no es importante – dijo Aizawa-sensei, solo entonces me percate de la presencia de los demás – ¿Qué sucedió?

—Aizawa tal vez fue demasiada la presión...

—Tu coordinación era pésima – dijo el nombrado interrumpiendo e ignorando a All Might – ¿Qué fue lo que paso?

—No lo sé – respondí tratando de recordar

Pero era inútil inclusive apenas recordaba la pelea con Bakugo.

—Yo... cuando llegué a la plataforma estaba... me sentí mal – dije tartamudeando – tal vez estaba demasiado nerviosa

—¿Qué hiciste en la sala de espera? – pregunto Aizawa-sensei al parecer estaba inconforme con mi respuesta

—Nada – respondí – solo esperaba mi turno – agregué sonriendo de lado

—¿Ya te sentías mal ahí? – pregunto Aizawa-sensei

—No – respondí – creo que solo estaba demasiado nerviosa – agregue ya cansada de aquel interrogatorio

—Ya no abrumemos a la joven Nakamura – dijo All Might – felicitaciones por obtener el tercer puesto – agrego mirándome con aquella amplia sonrisa

—¿Quién gano? – pregunte mirando al héroe

—El joven Bakugo – respondio All Might – y ahora permítame que le entregue esto – agrego mientras hacía pasar la medalla por mi cabeza – felicitaciones, joven Nakamura, se suponía que tenía...

—¿Qué paso en el camino hacia el estadio? – pregunto Aizawa-sensei interrumpiendo nuevamente a All Might

Suspire enérgicamente al parecer Aizawa-sensei iba continuar con eso.

—Salí de la sala de espera – comencé con pocas ganas – entonces...

Rápidamente e involuntariamente me toque el hombro.

—¿Qué sucedió? – pregunto Aizawa-sensei

Quería contarle, pero...

Si esto hubiera sido un ataque como lo de la vez pasada, no solo yo hubiera sido la afectada, entonces lo mejore seria...

—Entonces solo me dirigí al estadio – dije tratando de sonar lo más convincente posible

—¿Segura? – pregunto Aizawa-sensei

—Si – respondí – los nervios debieron invadirme – agregue desviando mi mirada – pero después de todo el tercer puesto no está mal ¿no? – pregunte mirando a All Might

—Por supuesto que no – respondió este

Ellos solo sabrían eso, lo demás me lo guardaría, pero trataría de no olvidarlo, aunque eso ya era difícil.

Cuando llegue a casa, mamá estaba en la entrada esperándome.

—¡Ma! – llamé cuando estuve cerca de ella

—Ryou – dijo ella para luego correr y abrazarme fuertemente

—No respiro – dije

—Lo siento – dijo ella mientras entrabamos a la casa – eres increíble – agrego dándome un leve apretón

—¿Lo viste? – pregunte mientras entrabamos a la casa

—Por supuesto – respondió ella – no podía perderme ni un solo segundo...

Según me relataba lo que había visto, pude darme cuenta que mamá ya no estaba molesta y eso me alegraba, por eso decidí no contarle lo sucedido, sería mejor si lo olvidaba.

Fuimos a un restaurant para celebrar, al día siguiente mamá me dejó dormir hasta tarde, lo cual le agradecí mientras tomaba mi desayuno casi al mediodía; aquellos días de descanso se pasaron demasiado rápido.

Durante mi viaje de vuelta a la escuela varias personas me reconocieron y en el tren algunas no dejaban de hablarme de lo asombroso que había sido el Festival deportivo, al parecer todo estaba mejorando y era mejor mantenerlo así, solo me quedaría con lo mejor del festival el resto lo olvidaría.

Eso había dicho, pero desde aquel día o bien estaba demasiado ensimismada tratando de recordar a aquel hombre o demasiado alerta.

Y durante mi recorrido por el pasillo hacia el salón, fue uno de esos momentos en los que estaba ensimismada en mis pensamientos, así que no estaba prestando mucha atención a mi alrededor.

—Oye – llamo – oye

No estaba segura si era a mi así que me detuve buscando el origen, entonces me encontré con Bakugo, me quedé mirándolo y antes de que empiece nuevamente a caminar él hablo.

—¿Ahora estas bien? – pregunto molesto

—Primero – dije mirándolo – soy Nakamura Ryouichi, o tal vez puedes llamarme Ryou, segundo ¿Por qué te preocupa mi salud?

—Quiero una revancha – dijo acercándose a mí con esa cara de matón

—¿Qué? – pregunte mirándolo – ¿Por qué?

—Aquella vez antes de... – comenzó aún más molesto – tu dijiste que no te sentías bien, eso significa que no peleaste con todo ¿No es cierto?

—Ganaste – dije mirándolo fijamente – ¿con eso no te basta?

—Quiero una revancha – dijo mientras pequeñas chispas salían de sus manos – y esta vez quiero que lo des todo y no pongas excusas absurdas – agrego mientras continuaba con su camino

—¿Y qué? – pregunte volteándome y mirando su espalda – ¿me vas a dar tu medalla cuando te gane? – agregue acercándome y jalándole para que me mirara

—Entonces no peleaste en serio conmigo – dijo furioso

—¿Qué? Yo no...

—Lo dijiste con seguridad – dijo el mirándome – ¿Por qué no peleaste con todo conmigo?

Abrí mi boca para responder, pero mi voz fue tapada por la voz de alguien llamándome que resonó por todo el pasillo.

—Quiero una revancha – dijo dejándome ahí en el pasillo

—Lo siento – dijo Hagakure alcanzándome – no sabía que estabas hablando con Bakugo

—Creo que era más una discusión – dije suspirando – pero no importa – agregué tratando de sonreír