HERS

Capítulo Ocho

Camila's POV

Comenzó como manipulación, el besarla. Pero su gemido hizo que algo dentro de mí temblara. Me asustó, tanto como cualquier cosa podría asustarme. Que ella podía haber visto lo que había visto... y que todavía me deseara.

Era la reacción que quería, entonces, ¿por qué estaba tan perturbada?

Al tratar de salir de mi propia cabeza, fui a la biblioteca a buscar noticias sobre mi gatita, para ver cuánta información sobre su desaparición estaba flotando en el mundo.

A pesar de mi casa, que era opulenta, mantenía todo tipo de tecnología lejos de mí. Sin televisión. Sin computadora, salvo por el sistema de seguridad. Sin teléfono. Hacía las cosas simples. Me mantenía a salvo de ser rastreada de alguna manera. Y me facilitaba dejar a mis víctimas en la casa sin preocuparme de que encuentren la manera de contactar a alguien afuera.

Después, busqué el nombre real de mi gatita y obtuve una gran cantidad de noticias. Para mi sorpresa, solo algunas de ellas eran de la semana pasada. Busqué las más recientes y me aseguré de que la policía no obtuviera ninguna información nueva de esa amiga suya. Incluso mientras hacía los movimientos, una burbuja de curiosidad flotaba dentro de mi cerebro.

Nada. No había nada que me incriminara. Nada ni siquiera para indicar que la investigación policial estaba tratando el caso como un secuestro. Chica desaparecida. No hay más información. Me lamí los labios. El miedo ya estaba saliendo de mis músculos.

Perfecto. Sin empuje para una gran investigación. Pensé que una chica desaparecida sería mil veces más interesante que los hombres de negocios y abogados desaparecidos que normalmente mataba. Supongo que mi gatita tuvo suerte.

O tal vez había más que eso.

Volví a las entradas más antiguas. El primer titular envió una emoción casi erótica por mi cuerpo:

Chica Desaparecida Encontrada

Una adolescente local que se creía fue secuestrada fue descubierta la semana pasada...

No es de extrañar que a nadie realmente le importara.

Se había escapado a los quince años, al parecer. Escaneé el resto del artículo. Ninguna mención de su intento de suicidio. Tal vez fue más tarde, o tal vez se las arreglaron para mantenerlo fuera del periódico.

Los otros artículos renunciaron a algunos pequeños datos. Los nombres de sus padres, su ciudad natal. Tanto por su negativa a darme esa información.

Mi gatita había logrado evitar que sus padres la encontraran por más de tres semanas. Al parecer, había presentado una solicitud para reclamar la independencia de sus padres una vez que la atraparon.

—Gatita —murmuré mientras hojeaba el texto— ¿por qué te escapaste de casa?

Otra pregunta para encontrar respuesta. Pero al menos sabía que estaba a salvo, y con esta información, estaba aún más segura. Las piezas se juntaron en mi mente como un rompecabezas de armadura que me mantenía segura.

Se escapó una vez... podría haberse escapado de nuevo.

...

Lauren's POV.

Me dejó sola otra vez, y dormí, la piel de gallina me estaba enfriando mientras agarraba la manta sobre mis hombros. No sabía cuánto tiempo había pasado, pero cuando desperté mi vejiga estaba a punto de estallar y tenía hambre otra vez y sed, aunque no estaba tan sedienta como antes. Me senté en la oscuridad. Ella había venido por mí antes cuando grité. Tal vez funcionaría de nuevo.