Capitulo 12♥

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29de Marzo de 2013

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- Hola preciosa -susurró aquella voz en su oído mientras recolocaba el correo.

- ¿Qué quieres Shino? -preguntó Hinata entre dientes.

- Solo hablar contigo -dijo él apartando el cabello de su hombro y hablando contra la piel expuesta de su hombro.

Hinata se retiró y lo miró a los ojos.

- ¿Quieres dejarme tranquila? -preguntó mirándolo fijamente.

- Caerás... -susurró Shino con una sonrisa arrogante.

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5 de abril de 2013

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- ¿Vienes conmigo al cine esta noche? -preguntó apoyándose en la mesa de recepción.

Hinata rodó los ojos antes de levantar la mirada.

Shino era atractivo, alto, fuerte, con el cabello negro. Su piel palida brillaba con el sol, sus ojos negros eran profundos y enigmáticos y su enorme y blanca sonrisa te deslumbraba. Pero Hinata estaba en un punto en su vida en lo que lo único que le preocupaba era su hijo.

- ¿Si te he dicho que no cientos de veces, que te hace creer que ahora aceptaré?

- Soy irresistible... -contestó él encogiéndose de hombros.

- Y tu ego también es irresistible... Shino...

- Llámame Shi -la interrumpió- o mejor, grita mi nombre... yo puedo ayudarte a hacerlo...

Hinata comenzó a reírse a carcajadas, ese chico era tan insistente...

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7 de abril de 2006

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- ¿Qué es lo que tienes para que Kiba me prohíba estar contigo? -le preguntó un día más.

Hinata suspiró antes de girarse y fingir una sonrisa cordial, después de todo era el hijo de su jefe.

- Tengo de lo que carecen las demás chicas con las que sales -susurró mirándolo.

- ¿Y qué es eso? -preguntó descargando todo el poder de su mirada en ella.

Hinata tragó saliva y sonrió dulcemente.

- Cerebro -contestó.

- ¿Ya la estás molestando otra vez? -preguntó Kiba que apareció de repente.

- Sí, sí... tu chica es intocable -dijo Shino alejándose y rodando los ojos.

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Presente

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- Jefe Hiashi... ¿está Hinata en casa? -preguntó Naruto con voz cortés.

Hiashi lo miró de arriba abajo con una mueca de desagrado y estuvo a punto de mentirle y decirle que su hija no estaba, pero pensó que después ella se enfadaría y prefirió decir la verdad.

- Ahora le aviso -masculló entre dientes.

Se dio media vuelta y azotó la puerta dejando a Naruto con un palmo de narices y preguntándose qué diablos había pasado. Un par de minutos después Hinata salió al porche de su casa y miró a Naruto con una sonrisa de disculpa.

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