Segundo Encuentro

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*Travis Reece en multimedia*

La primera reacción de Debra Roberts es rodearlo con los brazos y presionar sus labios sobre los de Jake

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La primera reacción de Debra Roberts es rodearlo con los brazos y presionar sus labios sobre los de Jake.

Y a pesar que mi pecho duela ante lo que estoy viendo, mi preocupación y sorpresa puede más.

—Cariño.. ¿Qué estás haciendo aquí?

—Quería darte una sorpresa. — Contesta feliz y señala la puerta. — ¿Por qué estaba con seguro?

Aún tengo miedo cuando los ojos de Debra me observan.

Ella se tensa enseguida y no aparta los ojos de mí mientras esta en una sola dirección.

—¿Quién eres tú?

Estoy paralizada.

No sé qué decir.

Completamente paralizada.

Debra se vuelve hacia su esposo en busca de explicaciones. —¿Qué significa esto, Jake?

—Amor, ella es..

No puedo evitar mirar a Jake cuando se dirige hacia su esposa con ese cariñoso apodo, escucharlo hablar por el móvil es una cosa y presenciarlo es diferente.

Es mucho más doloroso.

—¿Quién es ella, Jake?.— Insiste Debra.

Por primera vez Jake no sabe que decir, mientras su esposa pasa la mirada de mi a él, como si tratara de conectar todo y por el dolor que empieza a haber en sus ojos sé que no tardara en hacerlo.

—Jake..

La puerta se abre.

—Ella es Chloe.

Estoy sin palabras, literal.

Debra observa confundida a la persona que acaba de ingresar mientras yo no salgo de mi sorpresa al ver al mismo tipo que me llamo puta hoy.

—Travis..

¿Travis?

El ahora Travis le dedica una cálida sonrisa a Debra, como si él se sintiera completamente feliz al verla.

—Hola, Debra.

El rostro de Debra cambia al instante y a los segundos se olvida de mí y lo rodea con los brazos.

—Por dios, Travis. —Pronuncia apretándolo, el mantiene la mirada baja mientras le corresponde el abrazo. —¿Cuando..? ¿Cuándo volviste?

Se retira para oír su respuesta.

—Esta tarde.

Le acaricia el hombro y pone los ojos en mí, mi cuerpo reacción y a diferencia de cuando fue a verme al bar, ahora me da otra mirada serena.

Bajo las Sábanas de lo ProhibidoWhere stories live. Discover now