2Moons [MikaYuu]

• Comida

—Acerca del show de talentos, no olviden informar sobre qué sera su performance y decirle al staff lo que necesitarán —indicó una de las señoritas que estaba encargada de organizar el concurso mientras todos los concursantes estaban sentados en el suelo para escuchar la información.

Pero Yuu realmente no estaba prestando atención, él estaba más enfocado en mirar hacia afuera, en donde Mikaela estaba sentado con varios de sus amigos y compañeros y sonreía ante las bromas de estos. Kimizuki lo notó y se interpuso en el camino de sus ojos curiosos.

—Basta de mirar fijamente —le regañó—. El idiota-sempai no irá a ningún lado.

—Pero él no ha comido nada aún...

—Eres muy raro —suspiró—. Esta mañana estabas llorando por él y ahora te preocupas —rodó los ojos—. Aunque él también es extraño, ¿por qué no comió? Y  ahora solo está ahí esperándote, es gracioso.

—Sí, ¿por qué no comió primero? —se preguntó el más bajo.

—Pues pregúntale.

—¿Yo?

—¿Es que debo ir yo? ¿es mi problema? Obviamente no —se contestó solo. Yuu chasqueó la lengua—. Ve, ahora, anda.

Nervioso, se levantó del suelo y caminó despacio hasta donde estaba Mikaela. Sentía sus piernas temblando un poco y sus manos sudar, y todo aquello se incrementó, además de sumarse un sonrojo, cuando todos los chicos que estaban ahí voltearon a verle, incluido el rubio. Pasó saliva. 

—Oh, Yuu-kun, ¿a quién vienes a recoger? —preguntó un risueño Yoichi.

—Elige el que quieras, Yuu —añadió otro de los estudiantes—. Todos son de buena calidad, ya los he probado por ti.

Una carcajada salió de la boca de todos los alumnos mientras el azabache tomaba aire y calmaba su sonrojo para hablar.

—¿Entonces a quién escogerás? Estamos esperando por ti.

—¿Cómo es que te burlas de él? —regañó  Lacus, risueño también.

—No puedo evitarlo, solo mira lo lindo que es —rió el mismo estudiante.

Hubo un pequeño silencio en lo que él reunía coraje. Ni siquiera podía levantar la mirada con todos ellos allí presionándolo.

—M-Mika-sempai —llamó avergonzado. El corazón del aludido latió rápidamente y su pálida piel se tornó de un muy sutil rosa al ser llamado de esa forma.

—Oh, claro, soy solo el Moon de la Facultad de Agricultura, ¿cómo podría compararme con el Moon de la Universidad? Eso me dolió mucho, Yuu —bromeó uno de los chicos, a lo que todos rieron.