Just For You [Minsung]

[9]

¿Jeongin tuvo el descaro de llegar a mi casa?

Me secuestraron por él, me rompió el corazón, me dejaron inconsciente por preocuparme por él.

Me pueden matar si se enteran de que les dije que no lo conocía, cuando en realidad es la segunda persona a cuál más amo.

Y ahí estaba mi hijo, dormido en los brazos de el mafioso más buscado y peligroso de Corea con cara de bebé.

Me acerqué y agarré a Chenle en mis brazos, no dejaría que mi hijo estuviese cerca de ese tipo. No puedo creer que me haya enamorado de él.

– Vete.– Escupí esas palabras con tanto asco.

– Minho, escúchame...–

– ¿Escucharte?– Solté una sarcástica risa– ¿Por qué debería escuchar a la persona que rompió mi corazón en mil pedazos? ¿Debo escuchar a mi mejor amigo, al cuál besé y se alejó de mí?– Sin darme cuenta, estaba llorando.

– Minho, lo siento...– Dejé a mi hijo en el sofá y corrí a empujar a Jeongin hasta que perdió el equilibrio y cayó.

– Vete, nunca más vuelvas.– Él también estaba llorando, no sabía si de pena o qué, pero no me importaba.

– Tengo que explicarte algo, es urgente.– Me tocó la mano pero me alejé bruscamente.

– No quiero que me expliques nada.

– Te explicaré igual...– Comenzó.– Soy líder de una mafia, no te ignoré porque no me gustabas o algo así. Sino que soy peligroso para tu vida y para la de Chenle. Los amo a los dos y no quiero que nada les pase. Y yo...– Se detuvo un momento para dar un leve suspiro– tengo novio. Bang Chan, ¿lo conoces? Es un infiltrado en la mafia amarilla...– Bajó la cabeza sintiéndose culpable– Realmente lo siento, no es tu culpa. Te quiero, Minho y juro que no quise alejarme.

Lo único que hice fue empujarlo hasta la salida y cerrarle la puerta en la cara.

– ¡Maldito descarado!– Comencé a tirar todo lo que había a mi alrededor mientras sollozaba, pero me olvidé de algo.– Jisung...

Jisung estaba ahí, en medio del pasillo. Quieto como una estatua. Vino corriendo hacia mí y me abrazó.

A través de ese abrazo sentí muchas emociones. Enojo, tristeza, cariño, protección. Todo lo que deseaba que Jeongin me diera, me lo está dando Han Jisung.

– Tranquilo, bebé...– Me pasaba su suave mano por mi mejilla– todo va a estar bien, estás seguro aquí.– Aseguró

– Mientras estés conmigo voy a estarlo.– Y lo besé.