Just For You [Minsung]

[12]

Leí cada guía de padres que se encontraba en aquella enorme biblioteca.

De madres solteras a padres homosexuales.

Todo era muy interesante, no se veía fácil. Se veía como mi antigua tarea de matemáticas, la cual, nunca entendí.

Leí todo eso, y fui a hablar con mi gran amigo, Hyunjin.

Él era un tipo estudioso, tenía su propio trabajo, su familia, la cual me agradaba mucho.

Hablando de gran amigo, ¿y Chan? ¿o Changbin? Aún no puedo creer que Bang esté en una mafia y esté de novio con ese tonto mafioso que le rompió el corazón a mi futuro esposo. O Changbin que era de la otra mafia, nos haya raptado y haya golpeado a Minho.

3RACHA no existirá después de eso, definitivamente, se ve que nunca existió.

No sé cómo llegué a la casa de Hyunjin tan rápido, qué perdido que soy.

Golpee la puerta tres veces, pero olvidé que tenía timbre. Tonto Jisung, tonto.

Su esposo abrió la puerta junto a su preciosa hija, ojalá pudiese tener esa familia algún día.

– Hola Seungmin y, ¡hola Yubin!– Le sonreí a ambos y tomé a su hija en mis brazos con mucho cuidado– ¿Cómo está la sobrina más linda de todas?– Ella sólo sonrió, no podía hablar, apenas tenía seis meses.

– Hola, Jisung.– Habló el padre de esta– Tanto tiempo sin verte, pasa y siéntate como en tu casa, aunque... es tu casa literalmente– Luego de ese comentario echamos a reírnos y entré con mi "sobrina" en brazos. Hyunjin y Seungmin no eran mis hermanos, pero qué más da, soy parte de su familia.

– ¿Puedes llamar a Hyunjin? Necesito hablar con él– Dije entusiasmado, quería decirle lo mucho que me enamoré de Minho, quería que lo conozca, que mis planes para el futuro eran con él. Un poco apresurado, pero está bien para mí.

– ¡Hyunjin, tonto!– Gritó Seungmin desde la sala– Agh, está durmiendo. Ahora lo despierto y vuelvo.– Dicho eso, subió las escaleras para llamar a su amado.

Su casa era extraordinaria, no era tan grande, pero tampoco tan chiquita. Vi unos cuadros colgados en la pared, en la mayoría estaban Hyunjin, Seungmin y Yubin. En otras estaba yo solo o con ellos tres, qué vergüenza, pero me gustaba porque ellos me hacían sentir querido aunque sean menores que yo.

– Hola, Jisung– Saludó Hyunjin, con un tono adormilado.

– Hola, hermano– Le di su hija a Seungmin, quién estaba al lado de él y los miré.– Voy a casarme con alguien que tiene un hijo.– No sé por qué lo dije tan rápido pero estaba emocionado, feliz y muy enamorado de Minho.

Hyunjin junto a su esposo me miraron con los ojos abiertos como un plato y con la boca abierta a más no poder, qué tontos, les va a entrar una mosca.

– ¿Cuándo pasó eso?– Fue lo único que preguntó el menor de todos, no la bebé, Seungmin.

– Hoy me preguntó indirectamente si quería formar parte de su pequeña familia– Solté una leve risa y sentí que la sangre se acumulaba en mis mejillas.

– ¡Te felicito mucho, te amo y estoy siendo muy feliz espero que no sea con ese tonto de Park orejas grandes Chanyeol!– Gritó rápidamente Hyunjin, quién me abrazó y me tiró al piso, poniendo su mano en mi cabeza para que no me lastime.

Estuvimos hablando por una hora o dos, hasta que me fui para darle la noticia a Minho, quién debe estar desesperado por saber mi respuesta. La cual era sí, sí y completamente sí.

Me despedí de mis amigos y mi bella sobrina, les pedí consejos como padres y me dieron cada uno de sus tips para no sentirse cansados o algo así.

Tomé un taxi para llegar más rápido a su casa, agredecí y le pagué al taxista.

La puerta estaba entreabierta, me dió curiosidad. Mientras leía una y otra vez cada paso del libro sobre guía para padres, la abrí rápidamente

– Minho, estuve buscando guías de padres y acept...– Hablé rapidísimo, sintiendo tanta felicidad y sonriendo como nunca antes. Pero rápidamente mi felicidad se esfumó.

Ahí estaba Jeongin sin camisa, besando a Minho que también estaba sin su camiseta. Sentí que mis ojos serían una cascada de agua salada, a la cual llamamos lágrimas. No sabía qué hacer, quedé petrificado.

– Jisung, yo...– Fue lo único que dijo Minho, él quedó igual que yo, pero se puso rápidamente su camiseta y volvió a abrir la boca para hablar, pero lo interrumpí.

– No quiero verte nunca más en mi vida, pedazo de mierda.– Dicho eso salí rápidamente de su casa dando un portazo fuerte.

Corrí rápidamente, no sabía a dónde ir, no tenía a absolutamente nadie. No iba a molestar a mis dos únicos amigos, no podía llevar tristeza a su hermoso hogar. El único lugar que tenía era mi departamento, y supongo que tendré que ir si no me queda de otra, pero no quería estar solo.

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Llegué a mi departamento con los ojos rojos, no me drogué lo juro.

Vi un camión de mudanzas y me dió curiosidad, ¿quién vino a vivir aquí?

No me importó tanto como para preguntar, pasé por al lado de los trabajadores que había en la entrada y subí las escaleras para entrar a mi habitación y no salir nunca más.

Había una persona mirando un papel, creo que estaba perdido.

Me acerqué sin muchas ganas a presentarme y preguntarme qué necesitaba, pero quedé helado. Esa persona era el chico más precioso que vi, aparte de el estúpido de Lee Minho.

– H-hola...– Hablé y el precioso rubio se asustó dando un pequeño salto.– Me llamo Han Jisung, ¿necesitas algo?– Le estiré mi mano y le sonreí.

– Hola, me llamó Lee Felix.– Su voz era tan grave, que no podía creer en cómo un precioso ángel con rostro de un niño podría tener esa melodía saliendo de sus cuerdas vocales.– Estoy buscando esta habitación.– Me entregó el papel y se ve que no era de Corea, sonaba extrangero.

– Aquí es– Señalando la puerta al lado de la mía.– ¿Eres de otro país?– Pregunté, ahora sí me intrigaba este pedazo de sol.

– Sí...– Se ve que no sabía muy bien mi idioma, por lo que estuvo recalculando un rato.– Soy de Australia, no sé mucho tu idioma así que espero que me tengas paciencia.– Dijo, me dió unos segundos para acomodar mis ideas ya que no se le entendía muy bien por su pronunciación.

– Está bien, iré a mi departamento.– Le hice señas para que entienda, soltando una leve risa.

– Hay cosas que entiendo, no soy sordo tampoco.– Se rió y lo acompañé en su preciosa risa.– Buenas noches, joven Jisung.– Se fue a su nueva casa y yo entré a la mía.

Qué hermoso que era ese chico, Lee Felix, ¿deseas ser mi nuevo crush? Voy a tomar un silencio como un sí.

Bueno no, parezco un loco hablando solo en mi mente.

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Este capítulo creo que fue más largo de lo esperado, ¡perdón!

Les aviso que el próximo será un especial Jilix.

No me odien, tampoco odien a ningún personaje. Solo a Jungeun, ajksj.

Espero que les esté gustando este fanfic.

No olviden votar y comentar, aunque nadie comenta, me gustaría recibir sus palabras ://