Lealtad Mortal - Tangled The Serie Fanfic

Capítulo 12.- Revuelta

[Aviso de sangre, angst y problemas cardiacos]

La revuelta estalló. De nuevo todo entró en caos, pero esta vez era en un nivel mucho más intenso que cuando Nigel y Cassandra irrumpieron y destrozaron la calma en el banquete Real. Esta vez eran criminales armados, con pericia para atacar, esta vez era genuinamente peligroso. 

Los guardias intentaron hacerles frente a los criminales, pero como les tomó por sorpresa, no había suficientes guardias para evitar que los criminales se escaparan y anduvieran sueltos por el castillo. El desastre se hacía peor a cada instante. El capitán suspiró con fuerza al escuchar el ruido fuera del salón del banquete. Tomó su espada y la desenvainó, se giró para ver a su hija a los ojos.
-Cassandra- le nombró. –Tú y ustedes... – apuntó a cinco guardias que estaban alrededor. –Protejan a los invitados y a nuestros monarcas.
-Sí, señor- respondieron todos al unísono incluida Cassandra.

El capitán salió buscando a cuantos guardias pudiera para detener la revuelta que se había creado. Cassandra se giró y habló a los guardias, todos ellos eran buenos en combate, pero ella era la más experimentada para dirigirlos. Aunque lo principal era cerrar las puertas del lugar para mantenerse protegidos, los guardias cerraron todas las salidas y las sellaron. 

Para poder guiarles, ella bajó a Varian de su espalda un par de segundos, necesitaba ambos brazos para explicarles a los guardias y a los invitados cuál sería el plan de acción. Varian estaba parado de espalda a la pared. El pequeño Ruddiger bajó de los hombros de Varian y lo observó desde el suelo.

-Ruddiger, necesito que hagas algo – le dijo el chico por lo bajo. –Escabúllete hasta mi laboratorio y trae mi mochila. Dentro tengo un par de cosas que podrían sacarnos de problemas. 

El mapache asintió y corrió lejos. Varian levantó la cabeza para ver a Cassie, se veía tan imponente guiando a todos, tan segura, tan confiable. Le causó gracia el darse cuenta que había sonreído inconscientemente, no estaba escuchando lo que decía, no estaba poniendo atención en eso, se había quedado atrapado en ella. 

Rapunzel corría por los pasillos, Eugene venía tras ella intentando alcanzarla, pero la chica lograba escurrirse entre guardias y criminales, de momento a ella solo le interesaba llegar con su amigo, sabía que los guardias podrían encargarse del desastre. Sin embargo, un par de criminales le cerraron el paso. Eugene llegó con ella y logró notar a esos enormes hermanos que conocía a la perfección. "Oh, mierda" pensó Eugene.

Golpearon a la puerta del salón del banquete, todo quedó en silencio mientras esperaban algún sonido proveniente desde afuera, Cassandra y los guardias tenían su espada en mano, listo para pelear de ser necesario. La reina y el rey se encontraban al fondo, frente al grupo de invitados. Varian seguía contra la pared, viendo con recelo la puerta.
-Alteza- dijo cantarina una voz femenina. –Sé que están allí.
-Esa voz – pensó Cassandra. –Lady Caine.
-Le ruego abra la puerta – dijo la mujer. –Es por el bien de su hija.

Los ojos de todos se pusieron en blanco, Lady Caine había atrapado a Rapunzel cuando se dirigía a ellos. Cassandra dio un paso al frente con molestia. No podía permitir que le hicieran daño, pero abrir la puerta sería toda una locura. Solo deseaba poder saber que estaba bien. Le pidió a Caine que le dejara hablar, pero en respuesta sólo se escuchó las exclamaciones ahogadas de alguien que tenía cubierta la boca. 

Cassandra apretó sus dientes, la tenían amordazada. Sus nervios estaban vacilando y Varian lo notó, notó ese cambio sólo por saber que Rapunzel estaba en peligro. Él dirigió su vista al suelo tratando de concentrarse en aquellos sonidos provenientes de afuera.