Love Comes Close - Yutae

Capítulo 5

Últimamente, han estado viendo películas. Al principio era extraño compartir el sofá solo con Taeyong durante varias horas ininterrumpidas, pero Yuta poco a poco ha venido a disfrutarlo. Taeyong es un espectador animado pero no habla sobre la película, prefiriendo hacer una pausa si realmente quiere hacer una pregunta. También le gusta discutir la trama en profundidad una vez que termina la película, que Yuta solía encontrar tediosa pero que ya no le importa demasiado. Se ha vuelto interesante escuchar las interpretaciones de Taeyong, principalmente porque tiende a ver las acciones y los motivos desde una perspectiva diferente.

Sin embargo, no están viendo nada especialmente provocador de pensamientos esta noche. Yuta elige una comedia romántica alegre y se acomoda con un tazón de helado después de tocar play.

"¿Puedo tener algo?", Susurra Taeyong.

Yuta pasa sin palabras el tazón. Si extiende solo la cuchara, el helado goteará sobre los cojines del sofá; él y Taeyong se sientan lo suficientemente separados para que un derrame sea inevitable.

Por el rabillo del ojo, observa a Taeyong comer, la comisura de su boca se contrae cuando Taeyong muerde en una cucharada colmada e inmediatamente arruga la nariz ante el frío.

"Debería haberte advertido acerca de las congelaciones cerebrales", dice Yuta, divertido. "O el circuito se congela en tu caso, supongo."

Taeyong sacude la cabeza. "Estoy bien."

"¿Estás seguro? Eso fue un montón de helado a la vez".

"Bueno, hace más frío de lo que esperaba", admite Taeyong. "Pero me gusta demasiado el sabor para que me moleste. Esto es delicioso."

Esta vez, Yuta sonríe antes de que pueda evitarlo. A pesar de su gran conocimiento y, a menudo, su manera formal de hablar, Taeyong ya se parece mucho a un niño, y el descubrimiento de que le gustan los helados solo contribuye a esa imagen.

Taeyong sonríe tímidamente hacia atrás y se acerca para devolver el cuenco, pero Yuta le dice que puede terminarlo. Parece que lo disfruta más que Yuta, de todos modos.

El resto de la película transcurre tranquilamente. La historia es linda, pero carece de profundidad, para la cual Yuta había sido preparado mediante la revisión de comentarios en línea y la encuentra terriblemente molesta. Pasa el tiempo restante mirando furtivamente a Taeyong en su lugar.

Las características del androide se lavan en la luz azulada de la TV, haciendo que el brillo habitual en sus ojos parezca particularmente luminoso. Frunce el ceño minuciosamente cada vez que el personaje principal de la película experimenta algún inconveniente leve y se anima visiblemente cuando maniobra más allá de ellos. Su rostro ya es expresivo para los estándares ordinarios, pero Taeyong en su conjunto es todo menos ordinario.

Yuta piensa en el deseo insaciable de Taeyong de seguir aprendiendo y mejorando a sí mismo. Luego, recuerda la llegada de Sicheng a Seúl, cómo mezclaría las palabras chinas con oraciones coreanas forzadas para expresar su punto de vista cuando faltaba vocabulario. Se ve reflejado en ambos.

Con Sicheng, la similitud es obviamente más fácil de detectar: ​​ambos extranjeros, habían tenido que adaptarse a un país totalmente nuevo y una nueva cultura junto con él. Taeyong realmente no tiene un lugar de nacimiento, pero es coreano en todos los aspectos: está bien versado en el idioma, la historia y las costumbres. Nunca vivió en ningún otro lugar. Sin embargo, al igual que ellos, está lidiando con un entorno desconocido, y ni siquiera tiene los años y años de exposición a las señales sociales universales que hicieron para ayudarlo.

La música alegre se filtra a través de los altavoces mientras el protagonista en la pantalla oculta el interés de su amor en ambas manos y lo mira a los ojos con serenidad. "Lo haremos funcionar", promete. El hombre mete un mechón de cabello detrás de su oreja mientras se inclina para besarla, y la cámara se mueve hacia arriba, alejándose de su abrazo y hacia el horizonte rosado de la ciudad detrás de ellos.