epilogue.

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Cuando Sicheng cruzó el puente que dirigía hasta su casa, la nieve caía con mucha intensidad, y parecía que lo único que lograba ver era eso. Cada tres minutos abría la ventanilla del auto para que las ráfagas de aire helado lo mantuvieran despierto.
A pocos kilómetros del destino, casi se sale de carretera debido al cansancio. Logró detener el coche gracias a que el ruido de los neumáticos lo despertó en ese entonces.
Trató de no pensar en nada más que el coche, el volante, y la carretera, pero le fue imposible.
En ese momento, su teléfono celular comenzó a sonar; era su padre. Había perdido contacto con él hacía varios años. Él había rechazado por completo su relación con Yuta, haciendo que se pelee con su madre y, después de todo, terminen divorciados.

¿Papá?

¿Te desperté hijo?

No, la verdad es que ahora estoy manejando. Igual llevo cuidado, las carreteras están congeladas. ¿Todo está bien?

Estoy bien. Yo, eh... quería hablar con vos, devolverte las llamadas. Perdóname, sé que no hice bien las cosas, y pensé que querías localizarme.

¿Seguro que estás bien?

Sí, no te preocupes. Estoy bien.

Está bien.

Me enteré lo de tu madre, lo lamento.

Sí hubieses hecho las cosas bien, por ahí ésto no pasaba.

Lo sé hijo, lo siento mucho. Espero que todo mejore, al fin y al cabo, ella nunca dejó de ser el amor de mi vida.

Ajá.

Bueno, lamento molestarte. Mandale mis saludos a Yuta.

Serán recibidos, padre. Adiós.

El viaje de doscientos sesenta y ocho kilómetros desde Seúl a Gwangju pasó de ser un camino de dos horas, a uno de cuatro por culpa de la nieve.
Al llegar al jardín de su casa y estacionar el auto en su garage, observaba lentamente como los copos de nieve dejaban de caer del cielo, y el sol comenzaba a salir. Eran casi las 9:00am. Estaba completamente exhausto, y fue incapaz de moverse de su asiento, tan así que cuando su celular comenzó a sonar, tardó más de lo normal en contestar.

¿Sí?

Hola, ¿Habla Dong Sicheng?

Sí, ese mismo.

Ah, soy Joohyun, la enfermera del hospital. Querías que llamara si pasaba... algo.

Sí, gracias por recordarlo. ¿Pasó algo?

La señora Dong ha fallecido.

¿Disculpa? ¿podés repetirlo?

Dong Hui Ying, su madre, murió hace unos quince minutos.

Está bien... En unas horas iré a hacerme cargo de ello. Muchísimas gracias.

No fue nada.

Primero terminó la llamada, luego apagó el coche y hundió su cabeza en el volante, dejando salir las lágrimas por sus ojos. Con la ausencia de la luz del auto, todo a su alrededor se volvió completamente oscuro.
Había pasado una semana desde que a su madre le había dado un ataque al corazón, dejándola incapaz de hacer cosas totalmente básicas, a tal punto de que tuvo que estar internada sus últimos tres días de vida.
Se sintió con un vacío enorme, al fin y al cabo, era su madre. Y ella lo apoyó en todo momento.

Sicheng se encontraba lo suficientemente cansado y muerto de frío como para siquiera mover un dedo, tenía mucho sueño como para poder sentir cualquier otra cosa además de la necesidad de dormir. Estuvo varios minutos sentado en el auto, fue como si él no existiera, como si él fuese un alfiler dentro de un pajar y nada más.
Abrió los ojos de repente, justo cuando el sol comenzaba a pegar en las ventanas del auto, haciendo que se sienta más calentito. Y fue ahí cuando se dió cuenta de que había una presencia frente de él.
Yuta, con su saco azul gigante, el que había usado en la que ellos denominaron como su primera cita oficial, estaba parado al lado de la ventana del coche, mirándolo. Se preguntó cuánto tiempo llevaba en esa posición, fue ahí cuando decidió bajar la ventanilla.
Él no dijo nada, pero en su cara vió, notó, sintió, no sabía cómo le había llegado la emoción, un golpe de aceptación y amor. Aceptación, amor y alivio de que él haya llegado vivo a casa. Le preguntó con una naturalidad llena de emoción si tenía ganas de desayunar; que había preparado lo que a él más le gustaba. Sicheng salió del coche con una sonrisa de oreja a oreja, lo abrazó y se aferró a él como si Yuta fuera la vida misma.

schizophrenia ★ yuwin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora