Comprender

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I.

Era homosexual... su hermano era homosexual.

—Hey, ¿me has estado escuchando?

Thor parpadeó sintiendo como el peso de los recuerdos invadía su cabeza, era una fuerza devastadora y destructiva de años y años que forjaron su carácter y espíritu. Recordarlo todo de golpe era como recibir un knock out apenas entrar al ring.

—Claro— contestó esbozando un intento de sonrisa que se quebró a medio camino.

Loki debió percibir su desconcierto porque después de eso, sin palabras y con una dulce sonrisa, se sentó a su lado.

Thor con timidez y luchando con sus emociones, acercó lentamente sus dedos hasta rozar los de Loki, buscando consuelo. Sus manos eran ásperas y toscas en comparación a las aterciopeladas de su hermano, pero después de lo que su mente proyectaba sin compasión poder tocarlo y sentir su calor era algo que jamás creyó posible.

Ahora lo comprendía (O gran parte ya que aún tenía lagunas de nombres y lugares).

Había despertado vomitado, sucio y sin su billetera en un callejón afuera del bar en el que había estado bebiendo hasta perder el conocimiento. El camino de regreso en la camioneta de Fandral y su cara de horror habían sido suficiente señal para decirle que había tocado fondo.

Recordaba haber dado vuelta su estómago eliminando el alcohol y la rabia que llevaba atragantada durante toda su vida, allí aferrado al escusado derramando gruesas lágrimas de autodesprecio y asco.

La cordura no regresó a él hasta pasadas unas horas, tras una ducha fría y un caldo de pollo que apenas tocó su estomago se fue tan rápido como entró.

No era un momento de su vida que le enorgulleciera, con un aspecto más de muerto que de vivo intentando no repasar el descubrimiento de que su hermano disfrutaba del sexo público con desconocidos y que además resultaban ser hombres.

No era eso lo que lo había llevado a beber a secas una botella y media de Borbón en menos de quince minutos y olvidarse hasta de su nombre. No, eso era lo de menos. Loki era gay ¿y qué? ¿Qué podía hacer él? ¿Qué significaba en la vida de Loki? ¿Quién era él para Loki?

El menor había dejado en claro que ya no eran familia, no eran hermanos. No tenía derechos que reclamar, eran dos totales desconocidos y no importaba lo mucho que le llamara borracho cada fin de semana con la excusa tonta de alguna fiesta suya para sacarle conversación, lo cierto es que estaba absoluta e irremediablemente solo y que todo ello lo había ganado a pulso.

Thor comprendió su lugar en el mundo, en su pequeño y reducido mundo. Él no era nada para Loki. Ni un hermano, ni un amigo, ni siquiera alguien que valiera ser odiado.

Nada.

¿Estás bien, amigo?— le había preguntado Fandral al verlo pálido y callado observando por el ventanal, para hablar con aquel tono y sin bromas de por medio era evidente que el pobre había superado la barrera de la preocupación.

Ahora lo comprendo todo.

¿Tuviste alguna clase de epifanía de borracho?— se atrevió a bromear.

Sí, algo así— murmuró el rubio sin despegar su mirada de ese cielo inmenso, era el mismo que veía a diario y aún así se preguntaba por qué había dejado de parecerle hermoso.

Fandral no se fue hasta asegurarse de haberlo dejado en un estado semi estable, con agua y provisiones como para revivir un muerto, que era justamente el estado actual de Thor, aunque éste apenas lo vio marcharse lo imitó y se alejó de esas frías cuatro paredes, en busca de aire fresco y recomponer su dignidad.

Volviendo AtrásWhere stories live. Discover now