Capitulo 30 - La Misión que Forjo el Destino

201 13 1
                                    


Dentro de un Hospital de Danville, específicamente en la habitación 113, me estaba confrontando a uno de mis últimos pendientes, un pendiente muy importante pero al igual difícil, "Hacer la Paz con la Señora Flynn-Fletcher", al principio, cuando ella entro, sentía que iba a vomitar, por tener inesperadamente a la Madre de Phineas delante mío, me costaba mucho trabajo tan solo sostener la mirada, pero... en lo que nuestra conversación fue fluyendo, el ambiente en la habitación al inicio tenso, poco a poco se volvía más ameno, habían muchas cosas dentro de nosotras que debíamos expulsar, en especial, aquel dolor y culpa que estaba atrapado en nuestros corazones, pero al igual este fue extinguiéndose en lo que seguíamos intercambiando palabra, al parecer, ella también como yo, tenía un peso en sus hombros que no podía quitarse de encima, pero una vez que ambas habíamos logrado descargar todo nuestro sentir; la paz y el cariño habían regresado de nuevo, y claro que sí, estábamos muy feliz por ello.

Después de finalizar una charla tan satisfactoria, la Señora Flynn, contenta, se retiró de la habitación sin antes despedirse de mí, deseando mi pronta recuperación, pero, antes de que cruzara la puerta, de repente, recordó algo que hizo que regresara hacia donde estaba, al parecer regresó para entregarme un pañuelo muy extraño, hecho de soga o algo así, una vez que me lo dio, yo le pregunté... ¿que era? lo único que me pudo decir la Señora Flynn-Fletcher fue que ese pañuelo se lo entregó Ferb, que a su vez Ferb lo recibió de Phineas, con la instrucción que de favor me fuera entregado.

Al parecer, antes de la operación de Phineas, él le pidió a Ferb de que me entregaran ese "Pañuelo" a la menor oportunidad posible, pero como Ferb se quedó a cuidar a su Hermano, entonces él le dio el pañuelo a su Mamá para que pudieran entregármelo. Al escuchar eso, yo me sentía muy confundida, ya que ... ¿qué era lo que me había enviado Phineas ante esta situación que fue tan desfavorecedora? Al final la Señora Flynn solo me pudo decir que "Me dijeron que cuando lo abrieras, entenderías exactamente lo que es".

Una vez que la Madre de Phineas me dejo a solas en el cuarto del Hospital, me dispuse obviamente a abrir el "Pañuelo" que me había enviado Phineas, y una vez que lo desenvolví...

Isabella: Ese... ese... ese tonto, ese adorable y lindo tonto, no estás aquí, y aun así logras impresionarme.

No podía creer lo que estaba en mis manos, era... ERA...

 ERA

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


¡¡Era el Amanita Muscaria!! ¡¡El Hongo que debíamos recolectar a Phineas y a mi aquel día!! Estar sosteniendo ese hongo en aquellos momentos me provocaba una mezcla extraña de emociones, ya que, no sabía en qué pensar, no sabía cómo reaccionar ante lo que me había enviado Phineas en este Pañuelo, ya que, en retrospectiva, buscar ese champiñón, fue uno de los motivos secundarios que nos llevó a envolvernos en tantos problemas, pero... PERO... AHORA... ERA DIFERENTE.


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
💖 Phineas y Ferb (Phinbella) //EL DÍA QUE DESAPARECIÓ PHINEAS// 💖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora