Jenn
Gino se acuesta de espalda en el piso y casi mete la mitad de su cuerpo al mueble del lavaplatos para intentar "arreglarlo", lo observo por un rato hasta que decido ya comenzar, me acerco y me siento encima de él, poniendo mi parte intima justo encima de su miembro cubierto por ese maldito pantalón.
- Jenn: Como vas?
- Gino: Eh... bi... bien creo...
De a poco comienzo a moverme hacia adelante y hacia atrás haciendo que Gino reaccione inmediatamente y se ponga muy duro a punto de romper ese pantalón debido a su gran erección. Me quito de encima de él y le desabrocho el cinturón y el pantalón, inmediatamente meto mi mano y saco su miembro y sin pensarlo bajo mi boca hasta él. Luego de un momento de hacerlo disfrutar me levanto y me quito la bata quedando solo con ese sexy conjunto que me compré, vuelvo a montarme en él y paso mis manos por su cuello, bajando mientras subo su camiseta, Gino está paralizado, solo me mira sin hacer nada más.
- Jenn: Tócame papi, no seas tímido, quiero volver a sentir tus manos en mi cuerpo, tu maravillosa lengua recorriéndome, vas a terminar lo que dejaste a medias en la oficina...
Dicho esto hago a un lado mi braga y me siento encima de Gino, haciendo hacia adelante y hacia atrás mi cuerpo, él pone sus manos en mis piernas mientras yo hago todo el trabajo, al rato comienzo a subir y bajar mi cuerpo, cada vez más y más rápido, Gino comienza a gemir y yo aumento también mis gemidos y la velocidad de mis movimientos, no mucho después él toma el control, me agarra de la cintura y comienza a levantar sus caderas obligándome a tenerlo completamente dentro de mi.
Seguíamos haciendo el amor ahí en el piso, el aún debajo del mueble del lavaplatos con toda la ropa puesta y yo encima de él moviéndome a mi antojo, al rato siento que Gino comienza a moverse, de a poco va saliendo de donde estaba sin yo dejar de saltar encima de él, se sienta y yo le quito la camiseta, él comienza a besar mi cuello desesperadamente, de a poco va bajando y llega a mis pechos...
- Gino: Eres perfecta
Dicho esto comienza a besarlos y morder mis pezones por encima del brasier, yo seguía gimiendo encima de él, besó mi boca y volvió a mis pechos, quitó el brasier y siguió saboreandolos, se levantó conmigo en brazos y me recostó en el mesón de la cocina, besó mi cuerpo, bajando cada vez más, besó mi ombligo, bajó mis bragas y se deleitó por unos segundos con la vista que en ese momento le ofrecía, unos segundos después su cara desapareció entre mis piernas.
- Gino: Eres deliciosa...
Pasaba su lengua por mi clítoris en movimientos circulares, succionaba y mordía mientras sus dedos iban entrando en mi...
- Jenn: No pares –Dije en un agudo gemido mientras sentía moverse sus dedos dentro de mi–
Más papi... quiero más...
- Gino: Más?
- Jenn: Más...
Gino
Me quito el resto de la ropa y pongo mi pene justo en la entrada de Jennifer, introduzco solo la puntita, entrando y saliendo lentamente de ella.
- Jenn: Más adentro papi...
- Gino: Quieres más?
- Jenn: S... si...
- Gino: Ven aquí!
En ese momento la tomo en brazos y la llevo a su habitación sin dejar de besar su boca y mis manos sujetan firmemente su trasero...
