- Jenn: Sabes... por primera vez siento que alguien es el hombre indicado para formar mi propia familia.
- Gino: Jenn, quieres hijos?
- Jenn: Claro que si, quiero dos o tres, tu no quieres?
- Gino: Jenn tengo que decirte algo... pasa que...
- Jenn: Mierda... –Me levanto y voy corriendo al baño a vomitar–
- Gino: –Le toma el pelo– Tranquila amor... que pasa?
- Jenn: –Me lavo los dientes– No lo se, desde ayer que me siento mal del estómago.
- Gino: Vamos al médico entonces.
- Jenn: No, no, tranquilo solo debo haber comido algo y me hizo mal.
- Gino: Estas segura?
- Jenn: Si, estaré mejor.
- Gino: Está bien, pero si sigues enferma iremos con el médico.
- Jenn: Está bien papi.
- Gino: Quieres seguir desayunando o me llevo esto?
- Jenn: Llévatelo, siento mucho asco en este momento.
- Gino: Bueno recuéstate, te haré un té de manzanilla.
- Jenn: Eres el mejor, gracias –Le lanzo un beso–
- Gino: –Se acerca a ella y le besa los labios– Te amo, ya vuelvo.
- Jenn: Aquí te espero
5 minutos después
- Gino: Aquí está mi amor, te lo tomas todo.
- Jenn: Si papá –Ríe–
- Gino: Y no te preocupes por el trabajo mañana, no quiero que vayas a trabajar enferma, debes descansar.
- Jenn: Ginooo! Solo estoy mal del estómago
- Gino: Solo te cuido Jenn.
- Jenn: Pero eres muy sobreprotector, solo estoy un poco mal del estomago y ya con este té se me pasa, si puedo ir al trabajo mañana.
- Gino: Bueno, como quieras.
- Jenn: Ay, te vas a enojar?
- Gino: Jennifer tu puedes hacer lo que quieras, en serio, ya no voy a opinar más.
- Jenn: Ay papi pero no te pongas así... Gino...
Gino
Si me molesté porque solo estoy tratando de cuidarla y ella es muy terca!
Estoy en la sala de estar de su casa viendo un poco de fútbol y sintiéndome un poco culpable, no le hablé mal ni nada de eso pero no me gusta pelear con ella, no me gusta hacerla sentir mal, quizás solo debería ir al cuarto y abrazarla hasta que se sienta mejor. Esperare un momento por si es que está enojada a que se le pase y luego iré.
