Amor akumizado - Miraculous Ladybug fanfic.

6.- El bien siempre triunfa (2/2)

El fin de semana se pasó volando en la ciudad de París, y llegó el comienzo de la semana otra vez, todos los alumnos volvieron a clases con la escuela arreglada en lo más posible ante los destrozos que Boursetta había provocado.

Esa fue la impresión que Adrien tuvo cuando pisó los suelos de ese sitio, extrañamente se sentía refrescado, sin embargo sintió que el corazón se le detuvo por dos segundos cuando vio a Marinette sentada en las escaleras que conducían a su respectivo salón, parecía aburrida sosteniendo sus mejillas en sus manos y sus codos en sus rodillas.

—Marinette...

—¡A-Adrien!

La chica se levantó de prisa y se puso recta para hablar con Adrien, sin embargo, fue el chico quien tomó la palabra.

—Hola... escucha... después de lo que sucedió el viernes, yo... sólo quería agradecerte por haberme protegido.

—¡Ah! ¿eso? je, no fue nada...

—¡Sí que lo fue! Si tú no hubieses intervenido... tal vez la ciudad no hubiese podido ser salvada...

Adrien miró a un costado al suelo, pues desde su punto de vista, si Marinette no hubiese interferido, él no habría podido transformarse en Chat Noir, y dada la ausencia de Ladybug, la ciudad podría haberse vuelto todo un caos.

—Bueno... ya ves.

Los dos chicos se sonrieron de manera tímida, y pasados unos momentos, Adrien sacudió la cabeza para ponerse serio.

—Por cierto ¿qué hacías en mi casa el sábado?

—¡Oh, emmm...! tu padre fue quien me invitó a desayunar para tener una charla.

—¿Sobre qué?

Adrien dio un paso hacia adelante para hablar más profundamente con la chica, pero ante la timidez de ella, esta también dio un paso hacia atrás, pues tener tan cerca a la persona que le gustaba no la dejaba pensar claramente.

—Ammm... bueno... más que nada para agradecerme por lo que hice por ti el viernes, ya sabes...

—¿Te refieres... a lo del akuma?

—¡Sí! tú mismo se lo contaste ¿no es así?

Ese nuevo dato que aprendió Adrien lo dejó en blanco, y la razón era muy clara.

—Marinette... yo nunca le conté a mi padre lo que pasó el viernes, no quería preocuparlo, así que...

—¿Eh? entonces... ¿cómo supo lo que pasó?

—No tengo la menor idea...

—Pues tal vez-- ¡UAAAGH!

El pie que pateó a Marinette de su espalda pertenecía a Chloe, la chica cayó al suelo como estaba acostumbrada, y sin embargo hizo un gesto de molestia enorme mientras soltó una palmada para golpear el piso.

—¡Adrien-boooo~! ¡Que bueno que has llegado ya!

Marinette de nuevo hizo un gesto de coraje con el rostro enrojecido, realmente le costaba mucho lidiar con los actos de la rubia, no obstante, esa expresión de enojo se borró casi de inmediato cuando vio desde el suelo el brazo de Chloe escayolado y con un vendaje en su frente.

—¿Chloe? ¿qué fue lo que...?

—Heridas de guerra Dupain Cheng, que si mal no recuerdo me provocaron los monos que tú invocaste cuando--

—¡Chloe!—Interrumpió Adrien con un rostro de suma preocupación y enojo al mismo tiempo, parecía casi horrorizado al reclamar a Chloe para indicarle que su comportamiento con Marinette, quien seguía en el suelo, no era apropiado.