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Pov. Calle

Después de que perdiera de vista a María José miré hacía la cama y vi mi ropa que previamente había arrojado allí. Tiene razón, no me ha dado motivos para desconfiar de ella, todos los días que hemos estado juntas es muy especial. Agarro mi ropa nuevamente y la llevo al vestidor, como aún estoy en pijama voy a la cama y me acuesto debajo de las cobijas.

Después de un rato abro los ojos y veo a Poché de pie, de espaldas a la cama apuntándose la blusa

Yo: ¿Vas a salir?

Poché: Ya despertaste, ¿Estás de mejor humor?

Yo: Si, no me has contestado ¿Vas a salir?

Poché: No

Parece que ahora la que no estaba de buen humor era ella

Yo: Poché ven, acuéstate un rato

Poché: Voy a prepararte el desayuno

Yo: ¿Y el tuyo?

Poché: Ya lo hice, durante la llamada

Yo: Oh

Sin decirnos nada más ella salió de la habitación, así que, yo encendí la televisión. Minutos después volvió a entrar con una bandeja en sus manos

Poché: Toma

Me senté en la cama y le recibí

Yo: Gracias

Empecé a comer y ella ocupó el sillón cerca a la cama, colocó su mirada en la televisión. Terminé el desayuno y le agradecí, ella tomó la bandeja y se la llevó. Cuando volvió iba a sentarse nuevamente en el sillón pero la invité a la cama

Poché: Estoy bien aquí

Yo: ¿En serio vas a seguir así?

Me miró y se colocó de pie para después ubicarse a mi lado, salí de las cobijas y me coloqué encima de ella con cada pierna a un costado suyo

Yo: Perdona - le di un pico - no quiero que estemos mal - le di otro pico y ella sonrió

Poché: Frutita te quiero mucho

Se dio vuelta haciéndome acostar nuevamente en la cama, nos besamos y luego se separó. El momento de tensión, de pelea, al fin acabó, me acerqué a ella abrazándola y agarrando su antebrazo el cual empecé a acariciar con las yemas de mis dedos, entrelace nuestras manos derechas y sus dedos empezaron a moverse sobre los míos, giré mi cara para verla como observaba nuestras manos, parecía pensativa, no quiero imaginarme que sea por Juliana pero es una idea que no sale de mi mente.

Miro nuestras manos y encajan tan bien, si la hubiera conocido en Colombia cuando tenia su relación ¿Se habría fijado en mi? ¿Hubiera ocupado el lugar de Juliana en esa relación?, me molesta el pensar las formas en las que ella pudo disfrutar de mi amor, decidí dejar esos pensamientos cuando sentí que me estaba dando besitos en la cabeza.

Pasamos todo el día juntas en su departamento y al siguiente día tuve reuniones con Pau por mi  música, Daniel también estaba pues era quien me ayudaba con los músicos y con lo que ayer Poché me dijo decidí tomar un poco distancia de él, así yo también podría pedirle que haga lo mismo con Juliana.

El lunes fuí con Dulceida a la cafetería, estábamos saliendo del lugar hablando muy animadas cuando de pronto deje de sentir el peso en mi vaso, mire hacía el frente y vi a Poché que se miraba la camiseta manchada, a su lado estaba Rubius quien observaba la escena

Yo: Poché lo siento mucho

Rubius: Vaya Calle a mi también me ha parecido cutre su camiseta pero tampoco es para que se la echaces a perder

Dulceida: ¿Estás de coña?... chicas vayan rápido al baño para que Poché se limpié

Le hicimos caso y al llegar Poché se quitó la camiseta para empezar a lavarla

Yo: Lo siento, mi café estaba hirviendo

Poché: Si lo sentí, pero no te preocupes por suerte en el camerino tengo algo de ropa

Yo: Entonces voy por una camiseta, no puedes salir con esa que estas lavando

Salí del baño y me dirigí a su camerino, empecé a buscar, cuando en un cajón encontré un sobre el cual tenía la apariencia de esos de película, que contienen mucho dinero, ya una vez me metí en problemas con Poché por revisar lo que no debía, así que lo dejé y seguí buscando hasta al fin hallar la camiseta.

Al terminar la jornada Dulceida me estaba esperando mientras hablabamos

Dulceida: Que bueno que ya hayas resuelto las cosas con Poché, si el accidente de hoy hubiera ocurrido los primeros días que se conocieron ni yo te hubiera creído que fue por accidente

Yo: Ya lo se, aunque igual no dejo de ser incómodo el momento

Dulceida: Claro, antes no se ha tenido que ir por al hospital por quemaduras - en ese momento le llegó un mensaje y lo revisó - ¿Te molesta si me voy? Es que llegó Alba por mi

Yo: Tranquila ve, no hay problema

Nos despedimos y minutos después salí justo para encontrarme con Poché, nos saludamos y volví a disculparme una vez más por el incidente

Poché: Ya te dije que está bien, fue un accidente... ¿O acaso no?

Yo: ¡Claro que lo fue!

Poché: Jajaja por eso, ya déjalo así... ¿Vas para tu departamento?

Yo: De hecho no, quedé de reunirme con Pau y los chicos para seguir trabajando

Poché: Vale

Yo: Puedes venir

Poché: No gracias, tengo cosas por hacer

Nos despedimos y subió a su auto. 

Fuera De CámarasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora