otra historia de vikingos

Parte 5

Bosque nórdico...

En el silencio del bosque, Sefora cuestionaba a Selcius sobre su origen y el de esos vikingos.

El joven solo baja la mirada para después redirigir su rostro en dirección al de la princesa, camina hacia ella y se abre un poco la camisa. Él le muestra una gran cicatriz que tenía a lo largo del cuello, desde la manzana de Adam hasta la clavícula derecha.

Ella se le queda viendo y con su mano, toca la cicatriz del joven. Él toma la mano de Sefora y se la coloca en la frente como suplicando su perdón.

-Tu... Si podías hablar, verdad!? Antes... - le pregunta con voz tenue.

Él la voltea a ver y asienta con la cabeza.

En ese momento son interrumpidos por los niños que ya habían preparado la mesa para comer.
Ambos los voltean a ver y actuando como si no había pasado nada, sonríen y todos se van a comer.

Llegada la noche...

En las orillas del mar. El escuadrón de reconocimiento había regresado sin ninguna novedad pero al darse cuenta de que faltaba uno de sus guerreros, el líder de tropa le informó a Marfol.

-Mi señor!! El escuedran regresó sin ninguna dificultad, pero falta Norb! El se dirigió hacia el lado este! Río arriba! - informa.

El líder vikingo se queda callado un momento.

-En que dirección escapó la princesa!? - cuestiona muy tranquilo.

-Pues... Nuestros hombres la persiguieron hacia el este del bosque! Ahí la perdieron río arriba!! - responde.

Un silencio incomodo se siente por algunos minutos.

-Señor!? Cree que la princesa pudo asesinarlo!? - pregunta.

-No! Envíen a cuatro hombres a buscarla río arriba!! Y si ven a Norb! Mantenlo!! - ordena molesto.

El líder de escuadrón no comprendía muy bien la orden pero aun así, obedece.

Una hora después, cuatro hombres salen a caballo en camino hacia el Este del bosque y al toparse con el río, continúan río arriba.

-Que creen que este tramando el señor Marfol!? - cuestiona uno de ellos.

-No tengo idea!! - responde dudoso.

-Que no es obvio!? El señor Marfol se dio cuenta de que Norb encontro a la princesa y se la quedó para él!! Por eso es que quiere que lo asesinemos y le traigamos a su ramera!! - agrega otro.

-Si es así... No comprendo para que querrá a una joven que ya fue usada!? Es ridículo!! -

-Acaso no viste el cuadro de la princesa!? Ella es muy hermosa!! -

-Pues si es así... Tal vez podemos usarla antes de llevársela al señor Marfol!! -

-Eres idiota o que!? Se dará cuenta de que la usamos!! -

-si ya no es virgen... No!! Además podemos hacerla que se bañe para que se le quite nuestro aroma!! -

Sonríen los cuatro hombres.  Al parecer ya tenían un plan, solo les faltaba encontrar a la princesa.

Mientras tanto, en la cabaña...

Selcius estaba preocupado por lo ocurrido con Norb. Así que, sin que se dieran cuenta, salió hacia las orillas de la cabaña para hacer algo de vigilancia.

No pasó mucho tiempo hasta que el joven viera a los cuatro vikingos descansando en el río. Sus caballos y ellos bebían agua para después continuar con su búsqueda.
Oportunamente para el ermitaño, uno de ellos comienza a hablar.

-Esto es horrible!! No hay nada en este miserable bosque!! No hemos visto nada para comer ni a la princesa!! -

-Si!! Seguramente Norb se escapó con ella!! -

-Sea como sea! Tenemos que encontrarla!! El señor Marfol la quiere!! Así que tenemos que encontrarla!! -

Al escuchar ese nombre, Selcius se paraliza un poco. Como era posible que ese sujeto hubiera llegado hasta aquí. Esto era malo, porque ahora estarían buscando a Norb ya que trabajaba para ese hombre.

Sin más, el joven regresó lo más rápido que pudo hasta la cabaña y una vez ahí, les indica a todos que tenían que ocultarse.

Rápidamente hacen subir a los niños a lo más alto de un árbol y les indican guardar silencio.

-No!! Selcios yo quiero ayudarte!! - dice Fergudon.

Selcius se le queda viendo muy extrañado pero acepta la ayuda del pequeño, pero obviamente sin ponerlo en peligro inminente.