♡Ü→Soy YANDERE⇜ت♥ ▓[~Budo Masuta y Tú-]█

Semana 2, día 6.

Sábado:

  Desperté al escuchar repetidos golpes tras mi puerta, a pesar de haber tenido un sueño tan horrible, yo estaba realmente tranquila…también un poco cansada. Los insistentes golpes en la puerta ya me estaban haciendo perder la cabeza.

— ¡Adelante! — gruñi con un bostezo

  Por la puerta se asomó Haruto, caminó deprisa hacia mí y se sentó a mi lado, entregándome una nota.

— Esto es por si te llegas a meter en problemas con tu familia, mantenlo siempre contigo, si es posible aprendelo. — habla muy rápido, casi no puedo entenderle. — Es la dirección de mi casa y su número, allí viven mi esposa y mis hijos. Pero sólo en caso de emergencia extrema. Busca en nuestra habitación debajo de…

— Debajo del colchón, lo sé.

— Bien, hoy llegaremos tarde, tienes hasta las siete. Tu desayuno está abajo, está en la gaveta — se levanta y sale rápidamente, dejándome confundida sentada sobre mi cama.

  Me levanto de la cama y entro al baño, me lavo la cara y los dientes, luego salgo nuevamente y bajo a la cocina. Cuando llego observo a Haruto ordenar la comida que se van a llevar en su mochila.

— Buenos días ¿Quién hizo el desayuno? — pregunto y me siento en una de las sillas de la cocina

— Buenos días, tu madre. Se levantó temprano.

— Entiendo…¿Dónde está ahora?

— Debe estar cambiándose ¿Tú no deberías estar bañándote?

— Pues sí, pero ¿Para qué? No tengo una cita importante o algo a…sí ¡¿Qué hora es?!

— Las diez y media de la mañana — me observa confundido mientras yo me levanto rápidamente de la silla — ¿A dónde vas?

— Voy a bañarme — corro en dirección a las escaleras y subo las mismas rápidamente — Buenos días, mamá. — la esquivo a tiempo y ella chilla asustada

— ¡¿Qué crees que haces, jovencita?!

— Iré a bañarme — y cierro la puerta de golpe para empezar a desvestirme

  Tiro la ropa sobre mi cama, agarro mi toalla y me meto al baño. Me doy una ducha rápida y salgo para secarme y vestirme. Me rocío colonia en todo el cuerpo, me echo crema en brazos y piernas, me peino el cabello y me lo dejo suelto.

Ya lista, bajo a la cocina, no hay nadie en casa, por lo visto ya se fueron.  agarro el que está en la gaveta. Me sirvo un vaso de leche y me siento a comer.

  Después del desayuno, me lavo los dientes, busco mi mochila, guardo las cosas necesarias para el parque y salgo de la casa a quince para las doce.

  Camino despacio porque aún hay tiempo, observando todo a mi alrededor con expresión risueña. Las personas se ven alegres, los niños corren y se divierten, las personas abren sus negocios con alegría y esperanza de obtener más ganancias que ayer.

   Llego a la plaza y siento un cosquilleo en el estómago, trago saliva y me acerco con nerviosismo al lugar. Me quedo allí de pie un buen rato esperándole.

12:58 m

  Sigo en el mismo lugar algo cansada, ya va a ser la una y él aún no llega. Quizá ocurrió un inconveniente en el camino que le ha retrasado, pronto vendrá. Me quedo sentada esperándole.

3:45 pm

  No quiero pensar que me ha dejado plantada, a lo mejor sigue con ese inconveniente. Estoy un poco cansada y tengo mucha hambre, pero…¿Y si me voy y él llega? Le esperaré un poco más.