Capítulo 5: ¿Están bien?

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[Dimensión 5, donde Emma es una sacerdotisa, Ray un Tengu y Norman un Zenko (zorro celestial)]

Habían llegado a un espacio en blanco, o eso se veía. A la distancia, vislumbraron a una chica de cabellos castaños, junto a otra chica, quienes estaban de espaldas; y antes de que ellos pudiesen acercarse más o hablar.

Una de ellas volteó a verlos, con una sonrisa retorcida.

- Ustedes no deberían estar aquí. Les falta un largo camino por recorrer~.

Y un vórtice se abrió justo debajo de ellos, llevándoselos a quién-sabe-dónde.

...

El vórtice se cerró después que ellos entrasen en esa nueva dimensión, sin embargo, en vez de estar en el suelo como siempre, estaban en el aire. En otras palabras, cayendo. Emma y sus amigos comenzaron a gritar.

- ¿No se supone que deberíamos estar en el suelo! – gritó Ray, con una mueca de terror. Norman y Emma se preguntaban lo mismo.

- ¿Cuál es el propósito de esto! – preguntó Norman, igual o más alterado.

Emma miró abajo con terror. Los árboles comenzaban a vislumbrarse, aquello sería una caída de lo más dolorosa.

- ¡Cuidado!

Se dieron de lleno con las ramas de los árboles, raspándose y golpeándose en el proceso; el primero en caer fue Norman, para después caer Ray, dándose de lleno contra el suelo como su amigo.

Soltaron quejidos, aquello pudo haberlos matado, aunque siendo sinceros, la muerte siempre les acechaba, pero no lograba llevárselos con ella. Ray abrió los ojos, con preocupación.

- ¿Y Emma? – preguntó Ray, sentándose de golpe, haciendo que la espalda le doliese por todos los golpes. Norma se sentó a duras penas, mirando a su alrededor.

- Ella debe estar en otro lado, en esta dimensión... Ray, ¿Puedes levantarte? – preguntó Norman, mirándolo. El pelinegro suspiró, tendiéndose en el suelo. – Supongo que eso es un no.

- Vaya, con que aquí están. – mencionó una persona, comenzando a salir de entre los árboles. Norman miró sorprendido a quienes tenían enfrente, quienes eran Emma y una versión de él, pero con orejas y colas de zorro. Emma sonrió, un poco preocupada. - ¿Se encuentra bien?

- Si caer desde varios metros de altura y chocar contra los árboles significa estar bien, pues sí, lo estamos y mucho.

El Norman de esa dimensión sonrió, divertido. Emma hizo un mohín.

- ¡Que grosero! Y yo que venía a ayudarles. – dijo, cruzándose de brazos, mirando hacia otra parte. Norman miró a las versiones alterna, ladeando la cabeza, con curiosidad.

- ¿Dónde está su Emma?

- Lo mismo queremos saber. – respondió el Norman original, levantándose con esfuerzo, manteniéndose de pie a duras penas. – Nos hemos separado al caer. Aunque suponemos que ella sigue en esta dimensión.

Emma los miró, para después mirar a su amigo.

- Los llevaremos con nosotros. – Emma se acercó a Norman, haciendo que este se recargase en ella. Él se sonrojó levemente. – Norman, ¿Podrías encargarte de ese grosero?

El Zenko sonrió divertido.

- Sí~.

...

- ¡Bájame! – pedía Emma, aferrándose a las ropas de ese Ray. Ray volaba, ignorando el pedido de la chica. Y es que, ya le tenía en cierta forma fastidiado. O sea, le había salvado de golpearse con todos esos árboles.

Viajando entre dimesiones [REN]Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu