Cap.11 (¿Eres lesbiana?)

174 4 0
                                    

-Todas hemos venido alguna vez a una biblioteca a llorar. Creo que yo la he usado más para eso que para estudiar –me dijo mientras me ofrecía aquel pañuelo.
-Gracias- le respondí con una sonrisa que consiguió sacarme.
-Si no te importa me voy a sentar, que me sabe mal irme y dejarte así.
Me pareció un detalle por su parte.
Se sentó junto a mí, cogió el libro del que aún no sabía el título y dijo:
-¿Te gusta la naturaleza?
No sabía a que venía aquello ahora así que la mire y me enseño el título del libro. "La buena naturaleza" lo leí y me salió una sonrisa.
-Por cierto me llamo Paula.
-Yo soy Laura- le dije sin las lágrimas en los ojos.
-¿Bueno que te ha hecho tu chico para dejarte tan mal?
Era bastante directa para acabarme de conocer pero necesitaba desahogarme o hablar con alguien. Encima suelen decir que es mejor con desconocidos. O eso creo.
-En realidad no éramos nada.
-¿Entonces que ha pasado? Si lo puedes y quieres contar.
Me seguía pareciendo algo directa pero bueno le conté más o menos por encima, lo más importante.
-Me he lanzado a su boca...-no me dejo acabar.
-Y te hico la cobra...
-No, no también siguió el beso pero quería más y yo no estaba preparada.
-Creo que no te entiendo ¿Qué tiene de malo hacerlo con el chico que te gusta?
Se me escapo una sonrisa de la boca cuando dijo chico.
-¿Y esa sonrisa?-me pregunto nada mas verla.
-Es que no es un chico, es una chica.
Pude notar como con aquella respuesta se le cambió el gesto de la cara, pero creo que cuando asimilo la información la sonrisa que le salió fue aún más grande que la que tenía antes.
-Fallo mío, pero aun así que tiene de malo.
-Que es la primera vez que siento algo por una chica, y aun no se si siento algo.
-Si te has lanzado a sus labios digo yo que sentirás algo, sino eres un poco rara.
Dios está chica era súper directa pero me encantaba.

Seguimos la conversación en mi habitación. Resulta que su habitación estaba a dos puertas de la mía. Le conté todo lo que nos había pasado desde que había llegado aquí, ella me conto otras que le pasaron con sus antiguas parejas. La verdad que para haberla conocido hace poco complementaba muy bien conmigo, podría decir que llegaríamos a ser buenas amigas.

Pasaron una cuántas semana , hacía mucho desde que no veía a Raquel y pasaba todo el rato con Paula. Esa mañana me llego un email del profesor en la que nos citaba en el aula para una pequeña reunión. Nada más llegarme el mensaje se lo enseñe a Paula para que me aconsejara, ya que esto era señal que la volvería a ver. Ella solo me dijo que tenía que ser fuerte. Así que me prepare para ir a la reunión. Me puse mis vaqueros con bolsillos en las piernas, una camiseta básica blanca, mi fular verde kaki y por ultimo unos botines negros con tacones. Paula entro en mi habitación.
-Voy contigo si no te importa quiero ver como es ella.
Le dije que me encantaría que viniera con migo aunque luego se tuviera que ir. La necesitaba cerca por si me daba el bajón. Salimos de mi habitación y fuimos a mi clase, ya había mucha gente fuera. Paula con la mirada me preguntaba si estaba ya, yo le respondía ladeando la cabeza, ya que cada vez que venia una chica me preguntaba.
Y por fin apareció, esta vez sí era ella y venia súper bien vestida, muy a su estilo pero le quedaba genial. Llevaba unos vaqueros gises rotos, una sudadera negra de la marca vans, que le quedaba genial y un gorro negro de lana en la cabeza. Me encantaban como le quedaban los gorros y las gorras. También llevaba unas Nike negras estilo skate. Paula se me quede mirando y estaba vez si le asentí con la cabeza. Ella la miro y puede ver como la miraba, para no perder ningún detalle de la chica que estaba haciendo que sintiera cosas por ella. Hacia bastante, por no decir demasiado que no hablaba con ella y no sabía nada de ella así que no sabía que iba a pasar. Venia directa a mí pero algo le faltaba, le faltaba la sonrisa, esa sonrisa que hacía que el tiempo se parara no estaba. Vino donde mí, me miro y me dio dos besos. Fueron dos besos muy fríos, pero eran con razón, la había dejado con el calentón, la estaba dado ilusiones y después me iba y no me comunicaba con ella. Paula estaba allí e hizo que carraspeó para que las presentara.
-A si lo olvidaba, Raquel esta es Paula, una buena amiga.
Paula se presentó y Raquel la sonrió y le dio dos besos. Ver como a ella si le sonreía me removió algo por dentro, aunque estaba segura que no era la sonrisa que a mi me volvía loca.
Estuvimos esperando a que viniera el profesor en el pasillo y estábamos en un tenso silencio, nadie hablaba. Yo miraba todo el rato a Paula ya que no sabía qué hacer, Raquel no paraba de hablar por WhatsApp. Llego el profesor, me despedí de Paula, ya que ella me esperaría en el pasillo hasta que yo saliera. Me senté junto a Raquel ya que éramos pareja en el proyecto todavía.
-Bueno espero que vayáis bien con el trabajo ya que el día de la presentación está en la vuelta de la esquina.
Yo mire a Raquel ya que yo no había vuelto a hablar con ella sobre el trabajo, no había ido a su casa para hacerlo, así que a no ser que ella hubiera seguido sola no nos daría tiempo a hacerlo. El profesor no dijo cuándo seria el día exacto,pero seguramente fuese más pronto que tarde. Se acabó la reunión y salimos, nada más llegar al pasillo fui directa a donde Paula. Vi como Raquel se iba directa a la puerta para irse del recinto así que fui detrás de ella.
-¡Raquel espera!
Paro un momento de giro, pero no me miraba a la cara si no a un punto del fondo que yo tenía detrás.
-¿Qué quieres?- me pregunto con una voz seca.
-Te importa que me pase esta tarde por tu casa para seguir con el trabajo, que creo que si empezamos ahora otra vez nos da tiempo.
-Como quieras sabes donde vivo. Lleva a tu amiga.
Cuando dijo lo de amiga me acorde que cuando paso lo que paso iba a invitar a sus amigas a casa y le pregunte:
-¿Que tal aquella noche con tus amigas?
Esta vez sí alzo la mirada y me miro a los ojos. Joder sus ojos me mataban.
-No se porque quieres saber esto. Ahora si ya has acabado he quedado y me están esperando.- dijo mientras miraba a un coche blanco en el que esperaba un hombre apoyado sobre el.
-Si claro.
La seguí con la mirada hasta el coche, quien sería aquel hombre, vi que le daba dos besos más un abrazo, y se montaba en el asiento del copiloto mientras él le abría la puerta. Paula apareció por atrás y me invito a un café para que le contara que tal estaba después de haber estado con ella después, de tanto tiempo.

-No lo sé ha sido frio y raro al mismo tiempo.Como para no después de lo que paso.Me lo tenía merecido. Le he dicho que a lo mejor me pasaba esta tarde por su casa para lo del trabajo y ¿a que no sabes que me ha dicho?
-¿Qué?
-Que estaba bien y que podía llevarte a ti también.
-Que maja por su parte, bueno pues si tú quieres puedo ir contigo.
-Claro que tienes que venir no me gustaría quedarme con ella a solas habría mucha tensión.
De repente un chico que pasaba junto a nuestra mesa dijo:
-¿Laura?
Al principio me quede un poco pillada hasta que le reconocí.
-¿Ernesto? Cuanto tiempo.
-Si, no he sabido nada de ti. Marco me había dicho que estabas estudiando y por eso no te he llamado.
-Si he estado un poco ocupada. Por cierto esta es Paula una amiga.
-Encantado, Paula.
-Igualmente.
-¿Por qué no te sientas con nosotras si no has quedado con nadie y te tomas un café?
Se lo pensó unos minutos pero acepto encantado. Pude notar como a lo largo de la pequeña quedada que habíamos hecho en el bar no dejaba de mirar y reír junto a Paula y que ella hacia lo mismo. En ese momento mire la hora que era y me acorde del trabajo. Así que tuve que interrumpir el buen rollo que tenían mis compañeros en este mismo momento.
-Bueno yo me tengo que ir, que he quedado. Paula tú si quieres te puedes quedar aquí y luego volvemos a quedar.
Paula miro de reojo a Ernesto pero luego me miro a mí y creo que entonces se acordó de a donde me dirigía ahora mismo.
-No está bien te acompaño que te lo había dicho. Un placer Ernesto.
-Igualmente.

Nos dirigimos a la parada del bus y como teníamos que esperar siente minutos a que llegara decidí interrogar a mi amiga para que me contara lo que acababa de pasar hace nada. Así que le mire con una sonrisa de pillina y ella se empezó a poner colorada y a reír.
-¿Qué pasa? ¿A qué viene esa sonrisa?
-Dímelo tú, que ha pasado en la cafetería con Ernesto.

Pude notar como se ruborizaba al oír el nombre de Ernesto, estaba claro que ese chico le había llamado mucho la atención y que se lo había pasado muy bien. No me respondió a nada solo me sonreía. El bus llego y cuando no levantamos y nos dirigimos a la puerta fue cuando dijo:
-Está bien es guapo y simpático.
Fue entonces cuando al oír aquello se me escapo una sonrisa de felicidad hacia mi amiga. Nos sentamos delante de dos chicos que no nos dejaban de mirar. Paula se estaba agobiando, lo notaba, odiaba que la gente que no conocía la mirara más de cinco minutos seguidos. Así que yo empecé a hablar con ella para que no se diera cuenta de que la seguían mirando.
-Estoy muy nerviosa Paula, no sé qué va a pasar como me va a recibir...
-No te preocupes seguro que te estas montando tu sola una película en tu cabeza. Además estás muy guapa no se va a poder resistir a tus encantos esa chica.

Uno de los chicos que estaba atrás estaba atento a lo que estábamos hablando y cuando Paula había dicho chica, me toco en la espalda y me pregunto:
-¿Eres lesbiana?

ELLAWhere stories live. Discover now