-Nos vemos, Felix-me despedí de mi novio con un beso en la boca y baje de su coche, entrando al edificio, luego al ascensor y una vez que este llego a mi piso entré al departamento el cual compartía con mi amiga Bruna.
-¿Amor?-desde la sala oí como en la cocina un hombre con acento extraño preguntaba por Bruna
-¿Otra vez tu aquí?-espete con burla y sarcasmo mientras colgaba mi saco en el perchero de la entrada-Estoy comenzando a creer que no tienes casa propia-por el hueco que habia en la barra que dividia la cocina de la sala vi como Neymar cocinaba sin remera. Cuanta confianza, Dios.
-Hola, ¿Como te va, Abril? A mi bien, gracias por preocuparte...-observé su espalda trabajada, llena de músculos cuando pasé por su lado aspirando la fragancia de su perfume característico
-Ni en mil años me preocuparía por idiotas egocéntricos como tú-abrí la heladera y tome una botella de la heladera-¿Acaso no te bañas? Tu perfume se siente desde la sala, Neymar-me acerqué a él mientras que me daba la espalda y seguía picando las verduras-Con esto debes bañarte-heche un leve chorro de agua helada en su espalda provocando que soltara un respingo mientras se daba la vuelta enojado. Recibir agua helada en pleno invierno en Barcelona no era grato, aún así el ambiente estaba climatizado.
-¿Qué crees que haces, Abril?
-Lo que tu no. Tirarte un poco de agua
-Que infantil eres...
-Si te molesta puedes marcharte, por allí esta la salida
-Para tu mala suerte vine a ver a mi novia, no a ti. No te creas tan importante.
-No vas a tener suerte-me sente en una de las sillas de la cocina-Bruna acaba de informarme que debio tomar un vuelo de urgencia a Los Ángeles. Así que ya puedes irte... Si quiere te acompaño así te marchas rápido
-No te creo nada-murmuró sin mirarme
-Ve-le enseñé el teléfono, acortó los pasos que nos separaban y miró el mensaje, con una distancia casi nula entre nuestras cuerpos y sus manos en mi cintura-N-Neymar
Giró su rostro para obvservarme sin considerar que eso acortaría aún mas la poca distancia que habia entre nuestros rostros-¿Qué suecede?
-¿Qué haces?-sentí como pasaba sus manos por debajo de mi blusa y acariciaba la suave piel de mis caderas y mi vientre
-Nada malo...
-No Neymar, alejate-intenté alejarlo, pero su fuerza era mayor a la mía y solo provoque acercarlo aún mas, si eso era posible-¿Qué haces? Yo te odio, tu me odias, no nos soportamos. Alejate...-Giré mi rostro hacia la derecha esquivando su aliento en mis labios, pero fue una mala idea. Su nariz rozando mi cuello hizo que mi piel se erize, al sentir los besos humedos que dejaban sus labios por él, mi cuerpo se lleno de escalofríos. Intenté alejar uma vez más su cuerpo del mío, pero mi fuerza se debilitaba a medida que sus besos llegaban a la unión de mi cuello y clavícula, mi punto débil. Mordi mis labios para evitar que se escape algún sonido de mi boca y forcejee una vez más.-Neymar tenemos pareja, esto está mal. No lo hagas más dif...-callé lo que decía cuando un jadeo brotó de mis labios, su boca mordia y chupaba la suave piel de mi clavícula y cuello, generando una oleada de satisfacción que nunca experimente antes.
-Imaginé y deseé tenerte en mi cama desde el día en que Bruna me presento ante ti. Y fue tanto mi...-repartió besos por mi cuello-...enfado al saber de la sexy mujer que me perdía por estar con la loca de Bruna que no me permití tratarte bien-a esta altura mis manos ya estaban rodeando y acariciando su cuello.
Cada vello de mi cuerpo se erizo cuando el brasileño abrió mis piernas para posarse entre ellas bruscamente, chocando nuestras intimidades y arrancando un gemido de mi boca. Tire mi cabeza hacia atras dejando expuesto mi pecho, que Neymar sin ningún problema dejo al descubierto solo en brasier.
No entendía que sucedía, Neymar me caía mal, o eso creía, pero mi cuerpo reaccionaba por sí solo. Ese brasileño me hacía sentir sensaciones que ningún otro hombre había provocado, y aún eran solo besos.
-Se que esto esta mal, pero es un pecado que ansío cometer-susurró en mi oído.
Y sin mas junte nuestras bocas en un beso desesperado, con lujuria y pasión.
(...)
-Mamá ¿En qué piensas?-sonreí ante el precioso niño de tez blanca, cabellera rubia y unos ojos dulces que derretian a todo el que los mirara, sonreí ante el bello hijo fruto de aquella aventura en Barcelona.
-Nada pequeño-besé su cabeza y suspire terminando de oreoarsr su chocolatada-Ve a ver los dibujitos mientras acabo con mi trabajo ¿Si?-el niño asintió y corrió a la sala de la mansión.
Luego de aquella tarde, en la que juramos no volverlo a repetir, nos enteramos con Neymar de la existencia de Davi. Desde ese día nuestras vidas cambiaron rotundamente, a la producción de la novela que rodaba en ese entonces junto a Bruna no les agradó la noticia de mi embarazo y mucho menos de quien fuera su padre por lo que pocas horas después de haberselos informado ya tenía entre mis manos mi carta de despido.
Neymar se hizo cargo desde el primer momento, pero aún así no logramos ocultarlo y se generó un gran escándalo mediático provocando su salida inmediata del Barcelona, hacia el PSG.
No voy a negar que saber que tendría un hijo con la persona que creía odiar fue difícil, fue mucho tiempo de pensar, convencerme y asimilarlo. Pero con serenidad y por sobre todo amor a nuestro niño logramos superar todos los obstáculos que se nos presentaron. Y si, en el camino perdimos muchas amistades, personas, oportunidades, pero logramos formar una familia. Una familia que no cambiaría por nada ni nadie... nunca.
🌻🌻🌻 AlertSpam: En mi perfil hay una novela de Neymar para quién quiera leerla. By.
