New Chance [Klaus] [The Originals]

10: "Espíritu animal"

Ya explotada la bomba no teníamos mucho lugar para donde hacernos. No había dormido casi nada por andar jugueteando con el gran hibrido original, apenas iba amaneciendo cuando decidimos tomar juntos una ducha antes de que mi familia decidiera interrumpirnos. Alice y Dylan no habían llegado a dormir y no se habían reportado, por eso estaba tan tranquila disfrutando de mis decisiones.

-Okay, Klaus.... Creo que deberías irte ahora. –trate de moderar mi respiración, pasando las manos por mi cabello, solté un suspiro y él salió de debajo de las cobijas. –Mis hermanos no deben tardar en llegar.

-Creí que no nos importaban las opiniones de los demás.

-Tu familia también va a enloquecer cuando se enteren del hibrido... -hice una pausa porque me beso.

-No me importa. –sonreí y cambiamos de posiciones, yo quede encima de él, moví mi cabeza para que mi cabello no me estorbara y lo observe unos segundos.

-Odio decirlo pero... -pase mis manos por lo largo de sus brazos. –Esto fue un error.

-Que graciosa. –se movió rápidamente y caí de nuevo en la cama, hice una pequeña mueca de derrota y volvió a besarme.

-Nos esperan muchas cosas malas, Klaus. –murmuré aun hipnotizada por el momento, ni siquiera sabía cómo podía seguir pensando si lo tenía a él desnudo encima de mí.

-¿Qué esperabas? –preguntó. –Acabas de acostarte con el diablo.

Sonreí más ampliamente y él hizo lo mismo.

-Te extrañe tanto. –paso una de sus manos por mi rostro, a pesar de haberme derretido, lo empuje y salí de la cama. -¿Qué haces? –pregunto aun enredado en las sabanas, desconcertado.

-Acabo de recordar algo. –encontré una playera tirada en medio de mi desorden y me la puse, luego camine a una cómoda y busque algo en el primer cajón, tome una cadena de plata que ya tenía bastante tiempo conmigo, luego volví a la cama con él, se sentó y me hizo lugar a su lado, bastante interesado en mis acciones tras pasar su mano por mi espalda. –Compre esto con mi primer sueldo luego de trabajar un verano de castigo por reprobar muchas materias cuando era adolescente. –él sonrío levemente. –Lo encontré ayer que Evelyn me hizo tirar tantas cosas...

-Es algo grande para ti. –comentó Klaus un tanto desconcertado.

-Lo sé, a ese punto de la vida ya era muy idiota. –se aguantó una pequeña risa y me dio un beso en la parte lateral de mi frente. –Deberías conservarlo.

-De todos modos iba a llevármelo. –lo tomo y volteo a verme, escuche ciertos ruidos en la cocina porque Evelyn ya se había despertado, fruncí el ceño y tome un respiro, no tenía ganas de lidiar con tantos problemas. –Diles que yo lo mate y olvídate del asunto, puedo lidiar con tus hermanos.

-Yo también puedo pero no quiero. –dije al voltear a verlo. –Ya tendrás suficiente con Elijah y Hayley.

Escuchamos la puerta principal abrirse y luego la voz de Alice saludando a Reg.

-Ya tienes que irte. –musite a lo bajo. –No quiero escuchar a Alice juzgándome por tu culpa otra vez...

-Bien. –se puso de pie y busco su ropa, antes de que alguien pudiera notar su presencia en la casa se fue rápidamente por la ventana, dejándome sonriendo como una estúpida.

Comencé a cambiarme para empezar el día y disfrute de varios minutos de silencio, hasta que mi adorable hermana menor decidió gritarme desde el piso de abajo.

-¡Sarah! –hice una mueca y me tire en la cama, creyendo que así no existiría. -¡Ven a explicarme todos estos mensajes! –se escuchaba molesta. -¡¿Dónde está Ben?!